Inicio / Cuenteros Locales / allka / HACIA EL SOL
Desde la ventana del bus podía conocer bastante la ciudad, gastó bastantes horas del día mirando desde ahí las calles.
Muchas cosas vio, muchas escenas quedarían registradas, y hacían que la sensación de vivir una época igual a otras le causara un pánico; la sola idea de que todo se repite infinitamente lo dejaba colgado de sus pensamientos.
Y ahí estaba nuevamente la realidad, detrás de los cristales de la ventana del bus. Entre la multitud que caminaba por la calle vio a una mujer indígena de no más de veinte años, llevaba sobre su espalda un tierno niño. Iba empujando una carretilla repleta de mandarinas, las ofrecía a la gente que pasaba por su lado. La carretilla, por la expresión del rostro de ella, debía estar muy pesada.
Cuando vio a la mujer la siguió con la mirada hasta que la distancia del bus lo permitió. En ese momento ha bajado del bus, ha ido en dirección de la madre trabajadora; cuando se encuentra con ella, la mirada de él ha buscado el rostro del niño o niña; lo ha encontrado extremadamente iluminado y vivo, rostro en verdad vivo, diferente a todos los que viajaban en el bus del que se bajó, diferente al suyo.
Compró una cuantas mandarinas, y se quedó mirando como la madre se iba con determinación hacia el sol. |
Texto agregado el 05-11-2017, y leído por 85
visitantes. (0 votos)
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login
|