En plena cacería una paloma blanca se posó encima de su escopeta, el cazador intentó ahuyentarla varias veces pero la paloma insistió en quedarse. Él la tomó y se marchó a su casa, mientras ella le dejaba caer en sus manos una ramita de laurel.
Texto agregado el 03-10-2017, y leído por 217
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Lectores Opinan
10-10-2017
muy bonito en pocas palabras, un abrazo mis 5***** alejandroeder
Le faltó poco. Si hubiera sido una corona hecha con hojas de laurel, ese cazador más bien era un poeta. Diferente que hubiera sido una ramita de olivo, eso significa: paz. eRRe
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