No me prodigo como escritora en esta página primero porque no lo soy ni lo pretendo, y segundo porque estoy en ella para disfrutar como lectora ávida y compulsiva que soy.
Normalmente me dedico a leer puntuar con estrellas lo que leo, sin escribir comentario alguno, pero hoy escribo, como las demás veces que he escrito algo, por la muerte de mi paciencia a manos de la necedad y mala educaciónde alguien, en este caso la de encantador11.
Como ya he dicho, soy lectora y como tal he disfrutado de grandes lecturas en esta casi siempre maravillosa página al igual que he leído auténticas bazofias; en ambos casos puntúo según mi criterio que reconozco que no es el acertado en algunos casos pero mis gustos son mis gustos. Lo que sí que hago es respetar a todo aquel que escribe, me guste o no sus textos, pues considero que simplemente el escribir es una valentía en sí misma. Lo que no respeto es la necedad y la falta de consideración hacia el resto de los miembros de la página de aquellos con ínfulas de críticos literarios, como ya dejé claro en mis textos anteriores a éste, o de esos otros (y éste es el caso) que saturan la página convirtiendo en invisibles a muchos compañeros.
Puedo entender que muchos escriban como terapia para aliviar sus cargas emocionales (muchos textos de este tipo son buenos e incluso verdaderas obras de arte) y puedo entender que por falta de tiempo para conectarse algunos escritores cuelguen varios textos de golpe. Pero en ningún caso puedo sentir respeto hacia alguien que cuelga tantos textos que sature la lista y menos cuando esos textos son monotemáticos y dirigidos a alguien que seguramente no los leerá jamás (para eso están los mensajes telefónicos o el correo electrónico o el correo tradicional).
Por eso escribo este texto, para desahogar mi mal humor ante actitudes como las de encantador11, el cual no parece ser tan encantador cuando la protagonista de sus textos lo dejó y puso tierra de por medio.
Sin más me despido pidiendo excusas a todo aquel que después de leerme se haya quedado con la sensación de haber perdido el tiempo, pero yo también necesitaba desahogarme.
Un saludo