Mañana estarás lejos sin tu camisa bordo
Buscaras entre tus ropas pero nunca las veras
Se quedó entre las sabanas sucias del amor
Manchada de sudor frio y de mucho dolor

Yo aún espero que cante mi gallo bataráz
Espero que la sombra de mi olivo se desnuque
Y su fruto vaya cayendo entre las horas si ti
Escapando de esos surcos de mieles y arrope

No sé qué será de tu vida vagabunda sin mí
Solo sé que nada tiene sentido a tu lado
Un día no hace mucho hablando me dijiste chao
En mi sorpresa te fuiste sin darme la señal

Nada importa hoy, vivo feliz sin tu camisa
Tengo otra esperanza zurcida de colores audaces
Lo demás quedo enterrado en el pasado
Y tú... y yo, solo fuimos dos equivocados en este juego.

Que abandono sin rencores ni emoción
Aquí me quedo jugando con mi gato siamés
Con mi perro faldero, el collar de tu alhajero
Y todo el movimiento ajeno a nosotros que suena

Estoy entretenida recordando ese mundo infeliz
Nada queda todo se lo llevo tu pérfida vida
Solo transcurre la vida en este fogón lleno de cartas
Que ya no necesito, ni quiero recordar nunca
Te digo adiós para siempre sin amargura sin pena.



Alessandrini María del Rosario