Si Dios decide llamarme,
Debo de estar bien dispuesto,
Trataré de alegrarme,
Pues he de ver al eterno.

La vida se va en un segundo
Eso ni que decir,
Todo se queda en el mundo,
Lo que has de conseguir.

Por eso mi buen amigo,
Debes estar preparado,
Pues el último camino,
Será sin duda sagrado.

No dejes enemistades,
Arregla todo a su tiempo,
Visita a tus amistades
Y trata de estar muy contento.

Goza de la buena comida
Y viaja cada que puedas,
Aprovecha bien la vida
Y no dejes ni una deuda.

Evita las preocupaciones
Y juega como los niños,
Reza miles de oraciones
Y no dejes de dar cariño.

Cuida mucho tu salud,
No hagas lo que no es correcto,
Goza de la quietud
Y el equilibrio perfecto.

Trata de ser servicial
Y canta muchas canciones,
Ha nadie le hagas mal,
Alegra mil corazones.

Pide siempre por los demás
Y llegará a ti la ayuda,
Pregunta siempre demás
Y no te quedes con dudas.

Recorre aquellos caminos
Que quisiste recorrer,
Sé un constante peregrino.
Observa cada atardecer.

Escucha muchos consejos
Y sé un ejemplo viviente,
Adora a niños y a viejos
Y muéstrate siempre sonriente.

Y cuando acaben tus pasos
Y estés cansado de caminar,
Abre bien esos, tus brazos
Que Jesucristo te a de esperar.

Uriel López Guillén