¿Podemos amar de repente?
¿Nos sentirenos felices
aunque antes se hayan arrastrado las piedras de la tristeza?
No me vas a creer
pero al conocerte
mi mundo se llenó de mariposas.
Sólo yo las veía:
Cuando miré tu cara
las mariposas volaron a tus ojos.
Las vi aletear en tus pupilas.
Fue fácil decirte que me gustabas.
Fue fácil
dejarme surcar por tus largos brazos exigentes.
Tu nombre surca el agua como un barco.
Si apareces:
extenderé mis brazos y dejaré que siembres una huerta en mi cuerpo.
Una huerta que se llenará de flores y frutas de acuarelas.
Sacaré de la galería del mago una tarde igual a esa:con lámparas de azúcar al llegar la noche y pájaros de niebla que se adormecerán en la despedida.
Me convertiré en red de pájaros amarillos y soles madrugadores: para tener cada cierto tiempo
un amanecer
después de cientos de brumas y oscuridades.
Te irás y edificaré con el recuerdo
una fortaleza que me refugiará.
No habrá olvidos…
Yo
huésped de volcanes
me acostumbraré a la quieta temporada de tu ausencia.
Y las mariposas
no se separarán de mí
poblarán el aire:
Te esperarán.
Victoria
Texto agregado el 02-08-2017, y leído por 377
visitantes. (36 votos)
Lectores Opinan
15-02-2018
Esto es superior. Cautivante como aquellas mariposas que no se separan de ti. Tico
15-12-2017
Hoy en el presente, estoy como el grillo alunado que sólo quiere a su amor cantar y seguir viajando en el tranvía de los recuerdos, donde el olvido no tiene estación. chilicote
26-09-2017
AMISTAD !!!
Es recíproca llama viva
un faro que nos irradia,
una luz incandescente
aunque haya gran distancia.
Mis ***** chilicote
22-09-2017
Locuras. Me tocas y tiembla tus letras. Puro sentimiento.Exquisita. Besos. Deojota51
23-08-2017
Siempre bella tu forma de escribir así como lo eres tu hermosa! Sanducera