La calma se ha posado sobre mi endemoniada cabeza, la tranquilidad es infinita, ahora ya no hay dudas, no existe cuestionamiento alguno acerca de mi ser, de mi amor, de mi misma.
Me veo reflejada en un espejo, pero no es solamente mi figura física es también mi alma, que al compás del párpadeo de mis ojos se desprende lentamente de mi y se convierte en un destello luminoso.

Escucho cada uno de tus pensamientos, también puedo oír tu agonía consumida que ahora es la fuente de mi fortaleza y de esta forma comienzo a asimilar mi propia existencia.
Mi alma nueva, como vapor atraviesa todos los poros de mi piel y regresa a mi ser…

Pienso ahora en tí, en si escucharas cada uno de mis pensamientos que son tuyos, en como he llegado hasta la razón del espacio momentaneamente vacío de tu cuerpo, de tu alma, de tu ser.

Puedo recuperarte?... no lo se, eso no dependera ahora de mi sino del tiempo, de la vida y del trayecto que esta sigue , pero si ese trayecto no nos llegara a unir mantendre vivo el recuerdo, el amor de un ser tan extraordinario, un ángel con alas de cristal pero con la sutileza de la seda que las ayuda a emprender el vuelo.

Te extrañare pero te tendre siempre cerca por aquellos hermosos momentos juntos, por tus palabras que estan grabadas en mi piel, por el tacto de tus dedos en mi cuerpo y tu dulce aliento en mi alma…