Acumulo noches pensando en tu región más discreta.
Horas de sueño atravesadas muy lentamente, al paso,
en la desesperación de sentirme un solitario marginal
en ese juego raro de irte descubriendo en los pasadizos
que dejan las huellas del deseo cuando está amaneciendo.
A veces disfruto de esa porción de mí que te has llevado
y que ratifica el vacío de mis manos llenas de nada.
Desorientado busco el beso inasible en medio de la noche,
en una peregrinación que es un interrogante abierto.
Quiero cesar esa irracional búsqueda de tus lugares vacantes,
que solo sirven para que mi boca tenga absurdas razones
para seguir creyendo que soy dueño de tu fatal presencia
en el tálamo desolado en el que acopio noches imaginándote.
Texto agregado el 19-07-2017, y leído por 91
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Lectores Opinan
20-07-2017
Eso justamente pasa con los solitarios marginales: seguir creyendo que son dueños de eso, ello incluso ella. Ojalá que el personaje de tu texto no siga acumulando noches solitarias. eRRe
20-07-2017
se siente una sutil sensualidad pero la triteza lo subyuga. Me gustó. Justina2017