Caminata Previa
Esta persona iba caminando. Ojos puestos sobre el pavimento, sobre las líneas que dividen la vereda. Quizás buscando algo; quizás es hasta donde podía ver; quizás abrumada por lo que había adelante; quizás sólo pensando en algo tan pesado, que hasta su mirada no podía sostenerse.
Caminaba lento, o por lo menos más lento que las demás personas, que por lo demás escaseaban en la dirección a la que se dirigía.
No se podía distinguir, mediante la simple observación, si sus pasos firmes eran por la emoción de alguna buena noticia, o por la amargura de tener que hacer un obligatorio trámite.
Sus brazos se balanceaban con una cohibida energía, como si sus hombros a penas los contuvieran.
Su expresión, su rostro ¿qué podría significar? Una sonrisa tenue, una careta, quizás puesta para sí misma, para convencerse de la normalidad de la situación. O también podría indicar el cansancio de una tarea que aún no culmina, una tarea que recién comienza.
Su postura es calmada y decidida.
Su parsimonia al caminar y el esporádico ceño a penas fruncido, hacía notar la importancia de su objetivo.
De pronto endereza la mirada, toma de brazo a su padre, suspira, comienza una canción y entran a la iglesia.
FIN
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