1-Quiero dejar de hablar de esta cuestión. Tengamos vergüenza que esto suceda. Siempre aparece primero lo más rudimentario. Hagamos silencio hasta que sintamos la necesidad de decir algo nuevo, que nunca hayamos hablado. Cuando alguien roba o mata olvida enseguida el hecho para no meter la pata. Y dije meter, y metí la pata. De alguna manera estamos hechos de nitrógeno y fosforecencia, dando vuelta sobre lo mismo, no existe la tal creatividad, somos como el perro que persigue su cola. Y dije cola y metí la pata hasta el caracú. Que más puedo querer que estemos unidos, y que seamos uno evitando aquello que genera conflictos, principalmente con la moral y el pudor individual.
2-Ciertamente eso tiene un precio de vernos atornillados, o como siameses resignados a pedir permiso para dar un paso sobre otro. Pero luego del encierro vuelve la sonrisa sobre el rostro en los pómulos y en el semblante. Esto para nosotros lleva un alto precio, de vernos arrodillados como fregando los pisos pujando como parturientas, pero cuando se consolida la familia la balanza comienza a subir en el sentido de la recompensa. Y en contra de males, luego del sacrificio se suma la alegría de ver a los hijos cargando la antorcha hacia el final de la posta. Es un punto en común donde la existencia en veremos acepta las reglas del sacrificio para luego cosechar felicidad y dicha.
3-Entonces tenemos en común que el amor cumple las dos funciones de proteger y satisfacer al mismo tiempo, debiendo de alternar entre una u otra, cada uno izando la bandera que mejor le quede. Te he de cuidar de piojos y liendres, más tú me llevarás la comida a la boca. Te he de saldar con el fisco penurias y servicios, más tú brindarás la fina cintura al grueso rebenque para surcar la pradera bajo el sol del cariño, luego del mediodía, a la hora de la siesta.
4-Estar con gente, hacer sociales, una pendiente milenaria desde que existen las sociedades, pero nosotros debemos cambiar el modelo establecido y planchar la frazada con susurros y silencio. Ser yo el inquieto inquisidor de al pan pan y al vino vino, y vos el ama de casa de conciencia esencial que atiende al marido con mucha sexualidad. Y para esto estaremos presentes para demostrar a Dios que no se ha equivocado en unirnos en matrimonio.
No hay moneda que tenga dos caras iguales ni calzones con simetría absoluta.
5-Cuando estoy contigo siento que un torrente me recorre la piel, que pronto habrán de crecerme plumas en la cabellera; como si un candado de besos entre los labios no permitiera soltar piropos que emergen del intelecto por la pasión que tu figura inspira, que me irá a estallar la cabeza y regar las paredes de frases de amor con los colores del idilio. No hago más que temblar sin motivo, no tengo miedo o frío, quizá nervio o ansiedad de volver a ver tu cuerpo desnudo puesto a mi servicio. Soy bien hombre, pero a tu lado me siento un niño que irá a llorar por una simple golosina.
6-Hoy estoy elemental, la próxima prometo serfiar el límite de lo básico haber si consigo ser más profundo y enigmático, igual prefiero ser este obrero calificado de la colmena que parecer un genio. Un mostachole atravesado por una tirita de bola de lomo. Vos en cambio fuiste con la mirada un láser soltando flores que se estamparon en la alfombra. Los cristales empañados enturbian el paisaje mundano. Estando contigo no hay mejor hora que la hora del tiempo subjetivo, determinado por la gustosa realización, fuera de toda tensa ansiedad por la espera del premio de la ración.
7-Del hígado al sistema nervioso pasan sin visado los humores picantes de la noche. Me ofusca no encontrar la pomada pero me amparo al son de tu desmedro que ante la insistencia se agiganta.
8-Me explicaste sobre tu pena como esas propagandas que hablan rápido, despertando en mi una ternura extrema. Te amaré de un bocado, beberé de tu sangre como un vampiro. Y si nos sobra el aire haremos caridad con los más necesitados.
Una fuerza interior que sale del centro de la tierra hace salir un pino con gran tronco y copa, conmigo con forma de soga del mago, emergiendo para inmovilizar tu risueña figura. Debajo del árbol tenemos una hoguera a tus pies, con llamas de adorno que no queman ni lastiman. En idioma libidinoso te repito frases de amor acaloradas, con la lengua surcando varias veces como pista los cartílagos de la oreja; pero solo una sonrisa logro quitar de tu rostro que tanto me enamora. Pasan milenios gozando hasta que tu cuerpo comienza a soltar savia, provocando que resbale, y con solo levantar un poco los pies sales a caminar por la pradera.
9-Papa frita de paquete soy de tanto repetir que te amo. Estomago resfriado. Sopa de letras mi amor. Pero cuando hay que poner, pongo, y si tengo que fregar, friego, más si se trata de lamer, lamo. Si hay que ir por adelante, avanzo, o por detrás, no me achico.
Si bien el amor es el motivo de la existencia, siempre es por alguien. Solo para ti tengo sentimientos del valor del infinito del universo y la eternidad del tiempo. Un tesoro que solo la muerte posterga hasta volvernos a encontrar.
Una escalera, de la primera fila al altar, con vos y yo tomados de la mano. En un recuerdo gigante veo proyectada la muchedumbre de conocidos enardecida pidiendo a gritos un beso en los labios. Después desde el lecho se oían los estertores de la fiesta que nunca terminaba. Regalos y flores rebalsando por la verja, y una cola sin fin con más del inestimable afecto.
10-Mi amor eterno. Una flor de cinco pétalos en un valle de dos medanos de arena.
La vida ofrece miles de bellos momentos, de bellas oportunidades, pero nosotros debemos sentir, en este espléndido sitio donde anida la carne que luego se pudre, felicidad plena y armonía perfecta; el único motivo de inspiración permanente y de religión propia y unidireccional.
11-Recordando a la margen de un rio yace mi corazón palpitando. Con el delta plagado de peligros navego con pensamientos claros bajo el yugo de la imaginación. Solo el cariño presente de mi amor querido logra avivar las ganas, de pensar que pronto estaremos nuevamente felices entre besos y caricias. El clima ventoso voltea el rumbo de la mariposa que tuerce las alas cual acordeón.
12-Tu voz tan preciosa, con la virtud de pronunciar las palabras con claridad meridiana, como solo tú lo logras hacer, cosa tan linda una lengua bien pronunciada, de cualquier región que sea, paladeando las letras cual degustación de vino, la inteligencia con el soporte de la cultura que tienes, al servicio del idioma, más el agregado de tu hermosura, el rostro angelical, la piel de terciopelo, los cabellos como alambres finos de cobre, en fin eres una diosa, una diosa de verdad y eterna.
13-Una gripe me tiene postrado y vos como siempre en mi ayuda. Entonces, por la fiebre y el amorío, la cama padece de recaliento global; igual que los cuatro pómulos y la pirámide de labios cómplices que conforman esta bella tarde. Me siento parte de la corrupción general cuando pido permiso por tonterías y luego arraso con aliento de dandi tu cuerpo de enfermera valiente.Tus media negras me hacen acordar a la super liga.
14-Maniobro a babor de la mirada; de los pliegos de la alfombra a estribor se mesen guardas árabes de color pastel. Con desconcertante virtud y una actitud de acabar con las normas de la simpleza, ahora eres tú quien da una vuelta en campana sobre los muslos de mis piernas agradecidas. Y sentando un nuevo precedente, impensado, perecedero, fabuloso, con ternura agitas el garguero hasta saldar el pleito con maestría.
15-Siempre que no quede muy aturdido pego un vistazo al escenario final luego de amarnos cotidianamente, no por miedo a dejar olvidada la vergüenza, o una remolacha del huerto, o el calzón de seda (horrible lo del tarifaso), sino para dejar sellada, en el prisma de los recuerdos, aquellos bellos momentos.
16-La vida no se arruga, a lo mejor pueda caérsele el bretel o la bragueta, pero los que si nos arrugamos somos nosotros.
17-Subir una música al corazón y dejarse llevar por los sentimientos de alegría, con la triste realidad de la melancolía allí lejos, y correr por la pradera tomados de la mano hasta dejarse caer sobre la hierba, una y otra vez besando tu boca sonriente. Rodar acostados por la pendiente hasta la orilla del lago, y quitar la sed con agua cristalina. 27-Suenan como trompetas los suspiros, alaridos del placer. Siendo ajenos los jadeos se hermanan como banderas de naciones. Crujen los cimientos de la cama de madera. El oro del crucifijo se derrite quedando libre el condenado. Hoy morimos juntos pero mañana despertaremos, pegajosos, aun prendados, libres de pecado, sedientos, hambrientos, huérfano, con olor a vida.
28-Bueno, surgió la idea de venir al cine, y aquí estamos en primera fila. Con dos años de casados rascando como principiantes. Trajimos una petaca de coñac. Ha tanto calor más calorías. Pero estar embriagados nos pone atrevidos. Aquí nadie mira la película, todos nos miran a nosotros, y nosotros no miramos a nadie. Un agujero negro en el Gran Rex.
.32-Cada día tengo un afecto renovado pero con la misma pasión. Siempre la misma dicha, llama ardiente que nunca se apaga. Pero necesito del cuerpo, los sentidos, encandilar con la luz del ahora. Deseo los senos clavados en la entraña. Redundar, amasando, fregando, puliendo yo antes que la erosión del tiempo; olvidando casi como una traición, las recomendaciones del protocolo del joven bien educado, desplazar hasta después del pleito amoroso la útil razón y la vergüenza de raíz.
36-Aniquilado pero manso me amamanto de tu regazo y los poros se erizan el ritmo de la succión. Un túnel de excitación hace triza el descanso matinal, de picante oxígeno, impregnado por la noche pasada. La esclava del placer su selva ofrece al rollo rendidor, que siendo su tesoro la embriaga aunque muerto.
37-A tu lado los minutos son talar una selva frondosa, quince minutos son un paseo por el Amazonas, una hora es beber el Nilo de un sorbo . Los músculos son goma de mascar en barra. Te amo tanto querida.
39-Me confieso en esto mis pensamientos y aseguro no tener celos de mi enamorada. Tengo mucha paz interior, y exultante alegría, por la felicidad de ésta mi mejor etapa de la vida. Para mí el mundo empieza y termina en ella, pero reconozco que es difícil eternamente ser fiel a una misma persona. De lo mío lo descarto, pero si alguien se cruza en su camino la voy a saber comprender y también perdonar. Voy a canalizar la bronca con más amor y de mejor calidad.
46-Tiene la actitud de una soñadora, la mirada retenida por la imaginación, el cuerpo en estado de vigilia, inerte al compás del planeta. Solo vuelve cuando la llamo querida.
Pero con el amor explícito y sin coraza, es un vigía en la garita, un capitán frente a un fuerte temporal.
47-Los modales en la cama son:
Ella se acuesta segundo, y yo le sedo el asiento sobre mi falda. Luego del primer bocado, ella se limpia los labios en punta, sobre mi lisa boca de servilleta.
Ella deja los cubiertos sobre el plato que remiten a la batalla de waterlook (Dejar tiempo para aprender y corregir); pero ese tenedor son mis brazos, y el cuchillo mis piernas en paralelo. Más, la cuchara de sopa, mi garganta humedecida del flujo correr del tiempo. Y los cubiertos del postre mi existencia saciada de tanto dulce caramelo mundano. 48- Estoy sobre el aire con una fortuna moralizante que chorrea el micrófono. Catorce mil extractos de la realidad surgieron con prismas brillantes.
Del otro lado una nube por cada estertor que asoma. Empecinada en conseguir resabios del pasado sonríe acechando al extenso futuro.
51-Una lengua afilada que sale de la mirada impregnada de lívido termina el recorrido en las piernas abiertas, un montón de palabras con sentido erótico desfilan hasta soplar la caverna de aliento fresco, lentamente la cabeza recoge el telar en la garganta y se mete en la boca de tormenta. Insatisfecho abandono la almeja comenzando a escalar la escultura; previo paso por el ombligo. Suena el timbre que tapa la música, truenos hacen temblar la cumbrera, los ventanales flamean alocados, la civilización termina, se apaga el mundo, pero nosotros seguimos para el frente como si nada.
54-Digo cosas inocentes que son cuestiones del amor, amor que ejercemos con mi señora esposa dentro de las leyes del deseo, de complacer cuerpos y alma; que a medida que transcurren los hechos nos vamos fusionando en uno. Pueden ser procaces pero son consentidas por Dios; nadie escapa de querer meter la cabeza dentro del plato de tallarines, o la trompa en el hormiguero amigo, o las manos en la melaza.
56- Estoy parado sobre un plato, y aplasto a un montón de hombres que desean a mi esposa. Existen jerarquías es en vano tener envidia.
57-Sabemos más de morir que del amor propio. La realidad se va a transformar de repente cuando escuchemos los quejidos del fin del mundo.
60-Fue sintética la manera de quitar el elemento, y el apriete para rasgar la olla con la boca. No puedo domar la sonrisa pero de veras deberías ser menos opulenta. La cosquilla es ingrata luego de haber reído, la tensión paraliza el músculo que sin aire se acalambra a riesgo de morir de desidia.
Mi señora cabalga como en la doma. Un sustrato de revoque se avecina al derrumbe. Creo poder con esta bravura, he atravesado tormentas peores; solo que hoy es un día de ir abajo en el tanteador.
63- Por encima de todos los castigos de un mundo sin virtuosismo supe aplacar los dolores del deseo interior, y en tus labios la sed del angurriento. Como poseídos por la ira, el desorden interior, a tu lado supe hallar sosiego y sombra. Pagando con dulce amor, cariño, ternura y agradecimiento, por la dicha de estar con vos ratificando el destino a cada instante.
El amor requiere de confianza, es fundamental no agotar el sentimiento con decepción, ni tampoco recargarlo con energía extraña.
65-Nuestra primera crisis matrimonial tiene que ver conque Emilse está por fin indispuesta y yo igual quiero tener relaciones. Pero mi parte de razón reside en que antes no había drama; si total hay otros recovecos donde armar la cucha, palabras textuales de ella. Pero ahora soy un ogro que mata y molesta; no existiendo historieta que la erotice.
66-El corazón hace sonar los latidos como un tambor de carnaval. Una brisa que sale de adentro empaña tus pechos de cristal. Somos virtuosos malogrando el destino intrascendente, entre piernas tambaleantes de caer en éxtasis.
Cuando intercede al amor, la realidad se torna muy verídica, se intensifica lo que de por si es auténtico, la materia es más perene, el aire es chocolate.
67-Nuestra ventana es un verbo. Por nuestra ventana entran de una los rayos que calienta los cuerpos sin nada. Nuestra ventana mese la alegría que embriaga nuestra contemplación en la pausa. Es un escape al exterior por donde el placer asciende al cosmos. Nuestra ventana es una topadora que junta lo que el idilio desprende.
70-Cuando estoy con Emilse siento que lo simple aumenta; y percibo grandeza genuina, de a poco quedando con gran ambición de prosperar.
71- Exprimir al ser enroscado de placer hasta dejar gota de algo. No quiero ahondar la pesadilla donde veo que te alejas sin que lluevan niños; el suspiro es nuestro argumento. Debemos sonreír que la vida es bella. El capricho es la comanda del ego que ancla con autoridad en las costumbres. Mil veces te amo.
74-Antes de conocerte tuve una novia, un amor quebradizo de carácter perentorio sujetado con alfileres, y el tiempo pasaba junto con el consabido acostumbramiento. Se me tapaban los oídos con tal de no escucharla renegar, más, siendo tan charlatán no se me ocurría nada que decir más que buen día o dar las gracias por tonterías.
Hasta que tu Emilse, copaste mi aldea arrasada por un tsunami, enseguida levantado chozas y edificios, carreteras y acuaductos; obviamente notando la diferencia plena entre un amor eterno a uno de escaso afecto. Ahora pudiendo asegurar estar pleno psicofísicamente, sabiendo ser feliz, con esperanza en el futuro y sin miedo a la esclavitud del matrimonio.
76-Mi amor, tenle paciencia a tu madre, hace bien en decir; cuando se sufre por estar viuda, sin marido, no es recomendable estar en silencio, mascullando pena, o miedo al futuro; lógicamente la lengua golpea la superficie del estrado, y proclama a los gritos lo que mejor debería callar por prudencia; supongo se trata de una manera de canalizar el mal momento. Tampoco debería simular e inventar un sentimiento artificial, o persuadir con un verso barato para obtener ventaja de la desgracia. La pobre está pasando un momento difícil donde todo le cuesta demasiado. Pienso que tal vez la sangre no le circule bien perjudicando el accionar del cerebro. ¿Viste? No logra quedarse quieta, busca dentro de si una respuesta que no aparece. Te pido que la sepas perdonar. Quiero mucho a esa madre tuya, a esa suegra mía.
77-Hacer el amor contigo, es un ida y vuelta permanente al paraíso encontrado.
La cuestión consiste en delirar de goce y con entusiasmo oler el perfume de las flores; un enorme beneplácito de un deseo cumplimentado. Y al llegar al valle en la hierba fresca purificar el alma saciada de tanto erotismo, volviendo la sonrisa sobre la boca desecha en jirones por los besos; alma que resuena como la sirena de un faro, iluminando la entraña de los sentimientos colmados de felices sensaciones.
78-Mi cuerpo fue un día escombros de un rompecabezas existencial y fue tu amor quien alzó un rascacielos monumental; mi piel pestilente se cubrió de fragancia silvestre. El temor es hoy alegría Eres para mi una escalinata que lleva al encumbrado placer que embriaga con hipo hasta quedar dormido, de hecho estoy deshecho de tanto amor permanente. Te pido perdón si no respondo al máximo; mi cuerpo es hoy un montón de huesos soldados con cemento y algo de carne; pero igual voy queriendo decir que el amor es lluvia, hasta que aparece lo bueno que es descansar, aunque sea a las cinco de la tarde solamente.
86-Escalar con los besos hasta llegar a la cima, y luego mirar el abismo recién nacido con la impunidad del consagrado. Siendo un literal poeta arrojado sobre el cuerpo liso y rosado, para enseguida continuar con la tarea de la babosa que avanza sin extremidades. Por siempre enredado con los cabellos sublimes, atornillados con cintas que deparan ocurrencias. Ronco pero aniñado, pidiendo repetir sin repartir porciones con lo relativo; a cuenta de un reclamo esencial de pertenecer al circulo del género, con intención de reproducción de la especie, comprometido con el sostén de la educación y el alimento.
87-El amor es un contacto permanente con alguien que puede estar o no. Es una presencia constante en las entrañas de las emociones, y en la mente, en forma de recuerdo o pensamientos variados; de alguna manera rige el ritmo cardíaco y de la respiración, teniendo influencia directa en las diferentes funciones del cuerpo.
Como es algo positivo uno debe prescindir de vivir en el hospital, pero puede ocurrir que aquel caudal de energía con poder sobre el alma, si arremete en contra del afectado, pues no es correspondido, lo fusile de cuarenta escopetazos en simultaneo.
91- Vestidos de rayas y colores somos los perfiles preferidos de la historia. Somos jóvenes reducidos en el tablero del paraíso como los muñecos de la torta, pero aquí tan grandes que es imposible la indiferencia.
La ropa en la hora del amor descansa en los respaldos, desnudos tomados de la mano corremos hasta caer en la hierva florecida despertando en la muerte; y tantas mariposas y ardillas enlazadas con las caricias; picaportes que fueron molinos con el jadeo, el amanecer que se retarda y nos espera, el sol que tímido le pide permiso a los párpados caídos en combate para dar luz al día.
92-Objetivamente la realidad es una pero el sujeto la reinventa. Si no existiera vida el universo seguiría estando pero sin nadie que lo interprete.
96-Es una pesadilla pensar en vivir sin tu amor, quedar con el alma vacía sin posibilidad de llenarla con nada. Suerte que me quieres, pero a veces pueden ocurrir desgracias más allá del propio afecto. Pero lo mejor será mirar hacia adelante dedicando el tiempo al desarrollo de la pareja, poner en el hogar paso a paso lo que haga falta, de a poco crear nuestro propio paraíso; no digo vivir con escafandra, que cada uno tenga lo suyo, pero si un lugar de referencia donde encontrar la paz necesaria para ser felices. Te propongo que primero nos miremos a los ojos un momento, luego muy lentamente vayamos acercando nuestros rostros hasta tocarse, y acariciarnos con la boca, las mejillas; que las manos empiecen a moldear el cuerpo, y así hasta pescar el infierno.
96a-Pronto seremos hombres puros alejados de toda maldad. Hoy es tiempo de abandonar la codicia, ya no es necesario ser egoístas. Lo especial está por venir pero tan cerca que no falta nada. Por fin entenderemos que la salud radica en ser bondadoso. Salud y bondad correrán de la mano hermanados para siempre. La tristeza será un extraño visitante, siendo que reír una constante abrasadora; será innecesario la prisa o el apuro, tendremos la sensación de estar extasiados, sin apetito permanente, saciados, faltos de ansiedad. Siempre listos para amar sin reparos ni tontas excusas.
98-Tu eres la manzana de mi huerto, y yo te lustro y yo te muerdo. Después estoy tibio pero con la hoguera en el ser que enciende de a poco el instinto indomable. Te busco en las estrellas queriendo besarte en el dulce escándalo de la piel erizada.
El agua de tu boca pinta la sed de deseo renovado; y ahora mis fuerzas son la potencia que reparto con dulzura sobre el cuerpo. La palabra se silencia en el gemido y el verso se desgarra con el hecho de gozar.
99-Quedamos flotando en una canoa acunados por un rio manso, abrazados soñando con una calesita en una pradera de flores silvestres.
El viento ventila los cuerpos aun húmedo. Lejos emerge humo de una quema de pastizales. La luz de los árboles penetra la escena pero sin molestar la pausa del destino perentorio. Hay burbujas del aire que emergen del lodo. No festejamos un nacimiento, honramos la vida lejos de la mediocridad, en el remanso del relax, por el placer otorgado con esfuerzo y dedicación; insistiendo con volver donde la juventud hace sus alardes. Promesas cumplidas, campos por llenar, deseos de volver a escribir con la lengua sobre el papiro humano.
100- Cada uno se quita la ropa a su modo, pero nos miramos con dulzura desafiante; alguien saldrá en camilla, uno de los dos sufrirá la peste de la furia recibida, ambos pediremos un tiempo aparte para renacer de nuevo.
102-Mi mujer es mi droga, mi vicio; quisiera fumarla, hacerla gragea ilegal, aspirar su polvo rosado, inyectar el alma en mi brazo y echar a gozar de alegría. Es mi coca cola con fernet. Un enrosque, ella logra sumar una personalidad carismática, entretenida, soñada. Caramba, nunca terminas de sorprenderte con el bagaje de emociones geniales que emergen como agua de manantial.
103-El granero quedó con la paja echa un nido, estábamos galopando sobre nubes. En breve habré de tener un potrillo en el jardín de infantes. Nos peinamos con el sudor a la gomina. Pero fuimos carne contra carne, músculos afinados a barro y espiga.
El pecho irritado por la succión y el bombeo. Sin duda un llamado de atención para los campesinos complicados por la experiencia del testimonio.
104-Emilse piensa que el mundo está dividido según el grado de fermentación del alcohol; dejando aclarado que la dominación provienen de los gobernantes, y que los psicofármacos están en la punta de la pirámide (redada).
Y Ahora queremos tener sexo influenciados por el alcohol, de diferentes grados. He de tomar vino, en cambio mi señora ha elegido agua ardiente. Sin estar beodos estamos por demás alegres. Algo de diferencia hay pues ella me ha propinado un beso que por poco me quita las amígdalas; en cambio yo he apelado al verso susurrado más mordisco suave en oreja y cuello. Eh, eso es trampa, primero con los pechos al frente me ha dado como un especie de latigazo, sumado que logra tumbarme poniéndose arriba, con una navaja en la mirada. Abriendo la boca, embrujada, muestra un globo de cumpleaños, que bajando decidida coloca con maestría, luego sonríe como diciendo: ¡Tengo el poder, pero quiero ser madre! Arrancando el latex del sitio. Y se calza decidida lo único que de mí queda en pie de guerra.
Está claro que amamantar al niño lo hace más fuerte e inmune, pero eso no quita que luego llegue a ser presidente de una nación.
Pero como sea en lo referido al amor está todo inventado; cualquiera sea el confín del mundo nadie escapa de practicar lo mismo. Quito una uva del parral, miro el patio alrededor, me quito los pantalones e invito a mi amada hacer lo mismo.
107-Valga la paradoja la distancia nos separa, cuerpo y alma son gotas de agua, pero que estés tan lejos carece de sentido. Te apichonas sobre el borde cuando cerca del abismo hace frío, recogiendo las piernas de rodillas junto con la barriga; y yo al pie del centro estando protegido pidiendo socorro de sentirme huérfano. Quiero traer esa ubre escondida al apriete de la mandíbula; con la lengua esparcir la voz recitando la biblia desde el génesis hasta el padre nuestro, viendo caer una a una esa vergüenza señora. La cama grande no admite prófugos, ni tampoco cobardes, tenga a bien arrimarse al centro, que la espera el gobernador para entregarle las llaves del pueblo suyo.
108-Tus cabellos ayer anudados hoy crespo profundo son un enigma de donde tus ojos de calidoscopio ahondan la intriga, la nariz recta de no más que una línea de creyón, proponen la resoluta de una mujer sin época; eres natural, con la boca de labios recatados y el mentón en armonía, con el cuello de un cilindro perfecto. Los senos con el ombligo forman un triángulo encantador; más lo que sigue es un callejón sin salida perfecto para encontrar el deceso mucho antes de lo imaginado. Piernas donde cada músculo tiene su forma adecuada, y pies de Cenicienta ideales para un calzado de cristal.
109-Vamos nena que la vida es corta y quiero que nada quede por hacer. El amor estuvo primero pero ahora a descansar mirando la ciudad florecer, que no nos quede rincón por recorrer ni aroma por aprehender, que las luces brillen más y más en la mente por siempre. Quiero escuchar los pájaros cantar y los coches roncar en la siesta, que seamos testigos de nuestro tiempo protagonizando el destino juntos, con tanto coraje, con las garras del campeón, lleno de ilusiones pero que luego sea la realidad que nos haga aun más felices. Vamos nena dale con la fusta al viento, en el anca del tiempo, que estamos pronto a ganar la carrera del milenio.
Estamos de paseo, entre la nada y la eternidad.
111-La fogata supera la superficie del predio, el fuego ocupa la mitad de la mirada, van entrando los carbones que equilibran la llamarada. Mi señora con las manos negras me recuerda a una esclava. Íbamos a comer carne con pan solamente, pero además asamos vegetales. Porque esta comida sea una de millones en las que estemos juntos tan felices.
112-Esto es un asalto arriba las manos; ay mi amor te quiero tanto, a cada instante te necesito más y más. Deme todo lo que tenga, no intente nada raro, la estoy apuntando, ojo que se puede escapar el tiro. Mi vida, mi cielo, mi tierra, mi alma gemela, te amo, te deseo más que a mi propia vida. A ver si por acá tiene algo de valor, uh nada, la voy a tener que dejar ir, por última vez donde esconde el dinero. Querida mía no aguanto esta calentura hoy siento como nunca, mi amor te amo, pero basta necesito besar tu boca, comer los labios. Allí viene la policía mejor la dejo libre pero la próxima tenga la plata encima adiós. Bueno basta por ahora basta.
113-Salimos del ropero con la voluntad de volver a poner la ropa en su lugar. Estoy con las piernas abarrotadas y le propongo a Emilse preparar un licuado de frutas con mucha glucosa. Para que, entramos en la cocina alucinando que la mesa de comer es la cama matrimonial, adiós jugo, retomamos desde donde habíamos dejado, porque tuve cierta incontinencia injustificada, seguro producto de la claustrofobia, dejando los trámites a mitad de camino. Entonces consideramos que este nuevo predio nos permite explayarnos con mejor soltura; aunque a decir verdad, por la enorme altura, me temo que redunde otra vez pero ahora presa del vértigo que trae el miedo al vacío. 115-Corazones sobre el condominio de los jadeos, ahogados de amor profundo germinan como suspiros multicolor. Vale acariciar en tono suave y efectivo, y el agraciado debe festejar la sensación colmándose de febril alegría. El que no puede insiste, y si no consigue persiste, pero nunca avisa que va muriendo sin lograr los deseos.
116-Emilse consigue quitar de mí un guiño complaciente, una sonrisa relajada, y un especie de cabezazo que invita a repetir el baile. Con vestimenta uno dice muchas cosas, pero desnudos es imposible expresar el bagaje de emociones que van saliendo
117-Mi esposa dice que ando rápido hasta dentro del garaje; que para qué acelero tanto, si apague las luces, llegamos al destino y tengo una pared enfrente.
118-Siempre somos una pareja perfecta, cada uno intentando hundir en el placer al otro, que desea tomar los sentidos prisioneros para que vibren hasta caer hecho añicos. Las caricias son trompadas, la calma está en la tumba, pero a veces luchar en la agonía es la patada que debemos dar para culminar arriba del rendido.
El amor puede ser bueno o complicado, lo ideal es que sea perene, eterno.
Dejaremos de comparar el sexo con la guerra.
121- Hice una mezcla con cemento, cal, arena, y oro en polvo; de este último mucha cantidad. E inspirado con vapores de donde descansaba la droga, esculpí tu cuerpo amada mía. Una estatua enorme como el obelisco. La gente, al ver la belleza de tu figura, de tu rostro angelical, rezan convencidos que con ello han de mejorar su salud; de optimizar su rendimiento personal. El amor es dicha permanente, una energía que cuando entra quita la tristeza y la desesperación, volviendo a brillar la luz donde la oscuridad es una fresca sombra.
123-Emilse tiene la piel del color cobrizo, palabras de ella, tirando a negro. Y como no le gusta demasiado el tornasolado ese; mi opinión al horno como los panecillos. Mi señora tamiza su cutis con la luz de la luna.
126-Yo te amo sin tiempo, fuera del lamento, con pasión y esmero; esperando dichoso tu correspondencia, que unidos somos la hoguera que ilumina la noche y el firmamento. Clamo por ti hasta el infinito, agradecido de tenerte, seguir pudiendo susurrar la canción que endulce tus oídos, con un coro de ángeles cómplices del amor que profesamos.
Y que el cielo sonría de ver este par de grandes que son idénticos, haciendo honor al genero diferente, poniendo la especie en el lugar que tiene, pero en son de confirmar todo lo que puede, en unión de amor inagotable. Gracias padres por darnos la vida, hermanos por multiplicarnos, amigos por alegrar con riqueza horas minutos y segundos.
127-Febo calienta nuestro amor que se cuece de rayos poderosos, y los mares mecen nuestro amor que va creciendo hasta ser gigante. Amor poderoso, amor gigante, amor indestructible. Amor protector que sale de vigilia en amparo, a caminar por el mundo ayudando y ayudando. Amor que jamás se agota, que siempre tiene algo bello para dar, para compartir, una alegría que irradia en forma de diamante; de dos almas que dibujan un corazón de diamante.
128-Aullido de lobos se escuchan cuando me besas hondo porque tú boca es un radar que emiten ondas que abarcan el mundo, y las pájaros caminan sobre la circunferencia que van dejando tus labios embebidos en mi. Tu cuerpo desnudo es un tornado bueno que esparce un viento maquillado para la fiesta. Embriagado soy un minero hundido en la montaña, quitando fortuna de las paredes. Lamiendo el jugo de la tierra. Flor silvestre que brota sin luz. Encendido de placer inmaculado, que recorre mis venas de norte a sur con palabras pensadas que reviven el inmenso momento. El bullicio del decir enamorado es fulminante, y el único yo entreverado se yergue inevitable plagando la alcoba sonrojada de grandeza imperialista.
129- Ella está relajada, espléndida, pero a mi me sale morder la manzana y enseguida la zanahoria hasta el cabo. Quiero que ella me bese todo lo que la contorción le permita en esta batalla infinita. Amor a la carta de platos complejos.
130-Que esperamos para fundir nuestras lenguas con las estrellas, date prisa que estoy esperando, dulcemente conectar tu boca sobre mi rostro insaciable; habremos de calentar nuestras manos con esas llamas antes de incidir en el cuerpo impaciente. Recuéstate en la rivera del espacio sideral, permite que sea yo quien riegue las entrañas del jardín que es tú cuerpo desnudo, predispuesto ha más de lo mismo; de esa repetición de lo deseado con tanto anhelo.
Besos que hacen estragos hacia el sur del ombligo, terminando la misión redentora en la amarra relativa. Ruido de uñas estampadas en el filamento del anca partida. Impotencia del llano en desmedro de la plaga erecta. Aunque torpe decidida la inteligencia con el criterio del bruto palo, que hace bajar al bravo antes de dar con la cima, pero volviendo a intentar el peón de la doma montar la yegua arisca de pavadas. Pionero insistente conquistador de lo merecido. El amor somos nosotros en la órbita del cielo mortal.
132-Odio tener que amar con limitaciones, estamos entretejiendo correctas modalidades maritales, digo, con fe deberíamos probar las diferentes posibilidades para recién luego barajar las conclusiones a partir de la piola experimentación.
133-Mi lengua es una hormiga girando en un eslabón encontrado, un látigo que golpea la crin del potrillo, un sirviente de mansión embrujada. Mis ojos son la malla donde obreros y reina fabrican lo que vomitan; pero mi lengua insiste en encontrar quizás el oro que los nazis quitaron de los judíos, acalambrada, va como caminando sobre un charco de ácido. Doy constancia que mi lengua obedece la ley del instinto, con natural simpatía, dando sonrisa al portador de la cadena, donde mi hormiga se relame recorriendo el mundo, con mochila, cantimplora, y compañía.
134-El sexo no es todo en la vida, pero es esencialmente placentero pues debemos multiplicarnos; luego se forma una cultura en derredor del goce que provoca sin necesidad de reproducción. Es el deporte con más adeptos; es la cultura que mejor conocemos, la que nos ofrece un número importante de diferentes tipos de posibilidades, donde unos adquieren un bagaje de experiencia que otros acaso no practican, pero que en definitiva son válidas en cuanto mantengan algún punto en común con lo establecido por la naturaleza sin evolucionar al compás del desarrollo industrial. El amor necesita del sexo tanto como del afecto a secas.
Una a una las virtudes desfilan incansables contra cualquier desazón aislada separada de la gloria.
138-Te deslizas descalza e incisiva entre la alfombra de la habitación, dándote paso, el basural de vestimenta interior golpea contra las paredes como olas de una embarcación. Te embadurnas con cremas alegres, que penetran primero tu cuerpo, en proceso de condena. Luego de cruzar los cardos en flor debes volver azotada por el mismo látigo esclavizante a sentir los colmillos del monstruo de dos cabezas.
Una corona de flores te cubre los ojos en la muralla de fusilamiento; cuando mis manos ásperas percuden tu belleza contracturada, sin ningún remordimiento ni perdón, adobo tus abdominales con pimienta. Eres el cauce perfecto para un puente de acero.
El amor macizo que llevo ahora hace límite con la metafísica.
139- Mi amor es arrogante e insaciable, martillo con fuerza la confianza que brindas, inocente pero con enormísima resistencia, siempre abierta a dejar que entre una tropilla de mi ego. A cada paso que doy me voy enredando peor. Con el cuerpo erizado voy haciendo sangrar la olla, duermo como un ser ignorante, siempre soñando con entrar nuevamente enroscado en besos que esculpen un camino, haciendo larga huella imborrable, mella en los labios unidos en cruz.
140-El amorío se redime en la cama con sábanas limpias; se mezcla la furia con el odio latente, pero la ternura suave disipa la ira hasta hacerla humor exquisito. Quiero arrancar una sonrisa de esa pulpa del mar, que vea como sigsageo sobre la cuerda del agudo entuerto queriendo domar el infinito abismo, saliendo airoso con una copa de gozo para dar el sorbo ideal. Miro el cielo y ruego que nunca se acabe el fondo blanco.
141- El amor es una energía simple, que amalgama los sentidos, interviene en la razón con el poder de una democracia, gobernando las acciones con firmeza, las intenciones con vehemencia; entonces una idea pequeña se traslada terminando el escueto recorrido en una demostración insignificante. En la política te hacen gozar con la lengua pero luego sufrir con el cuerpo entero. El amor es lo contrario a la política moderna, es algo arcaico, porque el doble sentido se prende con el fracaso, resultando ser una especie de engaño; las alianzas con el opositor una infidelidad parecida a los cuernos del reno. Yo amo a mi mujer, a mi familia, al mundo entero y punto, el resto de mi capacidad es para el pueblo Argentino.
142-Fuimos regando los cráteres de la piel hasta salir hollín y espectros en la textura del brillo. Me adoso sobre ella; aunque intento quedar agazapado, el cuerpo inquieto, se balancea sin órdenes impartidas. Las frazadas enroscadas hacen imposible cubrirse del aire otoñal que penetra por la ventana. Enseguida vendrá ese juego de enfrentar las secreciones con el sistema neurológico y el frío impostor, sería penoso remarcar lo inevitable con banalidades o estornudos. Quisiera eternizar con ella esta instancia de sacudimiento amoroso quedando presa del tiempo girando en deflagraciones. Con un epílogo final abrazados mirando el techo fumando un pucho.
143-No podíamos parar a observar lo caminado y seguimos insistiendo a pesar de lo sucedido. La furia de la juventud, con el tesón del afecto, hicieron posible lo insospechado, un repentino pasar inadvertido de lo simple a lo mezclado; arraigando las raíces contra el fondo, en un espacio indestructible de infinito abrigo.
Era cuerda tensa, dentada pasión, ardor de apego, carne viva, una fogosidad poco habitual que merece repetirse y multiplicarse en lo sucesivo. Por siempre tuyo y vos eternamente mía. Hasta la muerte juntos y en otra vida.

144-De temperamento arremolinado, con parsimonia, los arrumacos se alistan bajo los efectos de la inspiración, que provoca el instinto humano de disfrutar del amor impregnado por la pasión libertina. Nunca es mucho lo necesario, o cenizas de leña seca lo imprescindible. Se entrecruzan los movimientos, las dulces sensaciones se confunden con desenfado, las ideas sensuales pugnan y se sacan chispas, entrando en una órbita grotesca que circunda el encanto de deleitarse. Y ella que siempre pide seguir insistiendo con más de lo mismo, encontrando en mí el eco perfecto que la comprende, que busca explotar esa riqueza en favor de la unión íntima, existencial, familiar; eterna.
145-Ubicado en la zaga trato de hurgar un roce inevitable y así vamos teniendo una vida aparte sin deplorar el único destino importante. Lejos de abandonar el ego siento escapar la conciencia detrás de un mundo supremo, quedando el cuchicheo desparramado por el aire húmedo del cuarto.
146-El recinto venéreo donde el módulo establece una permanencia palpita por causa de una vena mayor que amaga estallar. Las paredes debajo del pubis aprietan cual prensa de granito en trampas de pirámide. Suelto un solo ladrido intelectual que indica cuan sorprendido estoy. Ella gime en una flácida estrofa una disentería de vocales que superan los triptongos. Suaves contracciones de placer contradicen la armonía estética acaso predominante. Puedo pensar pero no decir lo que deseo. No todo en el amor son frases bonitas.
147-La fuerza del amor está en la resistencia para enfrentar los difíciles momentos que se van presentando; digo enfermedad, porque Emilse se pescó un resfriado. Siendo una mujer perfecta cualquier anomalía representa un susto. Pero temer por tonterías es una forma de franca debilidad. O peor, tener ansiedad por saber si una cosa insignificante es un bigban, sería un despropósito. Finalmente optamos por hacer el amor como siempre, pues esta hermosa actividad además de ser linda representa una acérrima fuente de salud.
148-Amor sin ofertas. Como coronación al desplome, Emilse despojada e inmutable solicita atención adecuada con la bravura que la caracteriza. Manantial de ilusiones corren por el velo de la imaginación, con mucho recelo tembloroso intento izar hilos de una coartada que me adose clima favorable; pero temo que piense que le he sido infiel, y caigo más aún en efusiva apatía e itinerante hastío. Grúa con polea, aren de elevadores, quitadme este pliego que tanto remite a los años y el frío.
149-El adalid golpea el claustro hostigando al mortero inmaculado; machacando desafiante la pobre ley de gravedad, que es lo peor que tenemos. No podemos salir pero queremos quedarnos. Los susurros lindan con el canto, rasgan de picores los martillos encastrados en el tímpano, la voz despojada de mentiras empaña la ciudad donde se dibuja una muchedumbre; da placer limar los pezones con el grueso aliento. Cuando el amor es extravagante hay fiesta en los corazones. La quemazón nos hace dudar de los conceptos pero toda cosa arriesgada sacude el alma que esparce vida.
150-Gloria de estar a tu lado, amando la vida a cada momento pleno de felicidad, fuera de todo dolor, inmerso en un estado de placer ininterrumpido. Y tener un renombre prestigioso llamado grandeza; siendo considerado una celebridad que perdura en la victoria. Nos honra, a mí y a mis padres, ser parte de tu vida exitosa, un prestigio sagrado que habremos de atesorar con orgullo; porque es un triunfo perfecto tu hermosa presencia, la cálida personalidad que brindas espontáneamente, el aura que ilumina como el sol, los buenos modales que aportan pigmento agradable al destino natural. Una suerte sin comparación de un premio que vale tantos millones como estrellas de dios en el firmamento.


151- Masa compacta que prescinde de barranca, de donde luego quedan resabios rezagados pero que también compiten, por ganar un lugar en el podio de la vida desafiante. Seres aderentes carentes de apego, pero que igual compiten ensimismados con el ego y las garras del engreído; con la cargosa dualidad de permanecer compactos bajo el auje de la sustancia.
Antes de engendrar deben saber ustedes, como para optimizar el resultado, que el éxito en la vital competencia anterior a la carrera hacia el óvulo, radica en las caricias y arrumacos, ruta del objetivo, duración del entrevero.
Y por ello nos esmeramos tanto con el objetivo de hacer madre a esa gran mujer, en la que deposito esperanza existencial de proyectar permanencia.


152- Es de vital importancia, cuestión que a la postre nadie escapa, que cada quien salga del encierro de si mismo, con ello desafiando la soledad permanente, ese arte cruel de lidiar con el espejo de uno mismo; disfrutando a pleno de las diferencias, del ida y vuelta con el prójimo, esfuerzo gratificante y enriquecedor que luego se resuelve con el regreso adonde partimos colmados de expectativas.
Es lo que queda de lo que no queda, es lo que falta de lo que no falta, están superpuestos, pero uno es más grande por lo que sobra, el otro es más pequeño por lo que falta, y por ello ambos se dejan ver.

153-El amor es una virtud del alma; pero cada ser es único lo que hace impredecible el producto final. Ellos son una masa compacta con signos de un desgarro. Una flecha atraviesa el útero de Emilse a la velocidad del rayo, Alfredo presiente lo sucedido y el cerebro se le arremolina por la adrenalina, pero igual sigue la tala cual si fuera el primer árbol que derriba. Los ovarios son dos escarpines rosados con luz de un milagro; no obstante hay un cuadrilátero donde nada es de nadie, el viento que proviene del exterior transita el escenario que late palpitante; un fuerte olor a océano invade las tribunas vacías. A pico y pala han desollado una montaña de donde emergen un coloso llamado volcán.
154- En contra de la sagrada costumbre, como despectivo, Alfredo soslaya la espléndida figura de Emilse que esparce pixeles de rubíes y diamantes por la atmósfera del hogar. Han engendrado una niña muy deseada, pero de humor campechano, sin recupero del tambo invertido en intentar embarazar a su señora esposa, presupone estar en bancarrota enlodado en purpurina. No temiendo poder continuar con la gesta, ahora tiene serias dudas de su fertilidad masculina, del poder y calidad del catalizador digno para la procreación compartida.
Sin llegar al tormento le duele pensar en una solución in vitro, con ñata extranjera en el corazón de la firma.
155-Inmediatamente luego de fecundar una damita de blanco vestida de hipocampo, felices, vuelven a recostarse sobre la cama desecha aun tibia; y como queriendo acuñar caricias para un futuro museo del amor, insisten y continúan con el ánimo de forjar un destino establecido e inalterable, redundando sobre el pasado inmediato, empecinados buscando lo ya encontrado; e infiltrados de ignorancia chapotean enlodados de calentura, en cómplice transpiración, ardiente frenesí, piel succionada, huesos en punta.
Ni para un ángel con ganzúas sería posible difundir las noticias del lunes dentro de una caja fuerte blindada de magia divina, con complementos agregados para silenciar las alarmas propias del nuevo estado, dentro de una simbiosis espeluznante con ausencia de contradicciones.
156- Y siguen regando la planta muerta ¿Qué otra intención puede tener una caricia a la mujer desnuda que no sea acoplar el cuerpo insatisfecho? ¿Pero qué hambre puede tener un obeso a las tres de la madrugada? Y sigue la fiesta en el velorio con el cajón cubierto de disfraces. Un camino de baldosas que son besos que conducen al tesoro. Ella es blanca, él es un carnicero pintado de rojo sangre.
Si uno busca concebir con énfasis, debe presuponer un desenlace favorable, quebrar el deseo animal dando paso al empirismo; que requiere de mesura, de un recipiente donde alojar la experiencia.
Si el amor no es elevado es calentura, que cuando se quita de las llamas es deshielo; donde mientras uno cumple el rol del estímulo la otra parte se emancipa de la razón.
157- Con la siembra perimida cuando él decae ella lo reanima. De talante perverso, desfasado del índice perfecto, con la química interior llena de bacterias del retrete, lejos de ser ambiguo, retoma desde donde había dejado hace instante; previo duelo de un segundo al verse algo flácido, pero con las ganas del reprimido; un enfermo derivado al boliche donde la noche se estira por decreto. El período de la lujuria ha finalizado pero sigue luz verde para el apareo. Es de suponer que por otro cuarto de hora más será ficticio mirar sin requisitos para el cuerdo, de humor pasivo, ambiguo buscar reparo de la lluvia en el desierto.
158-De mirada difícil, habiendo comprobado que el hambre es un síntoma tratable con relación al mañana quizá halla astinencia obligada, observa la habitación prestando especial atención en la quietud del conjunto de objetos, como comprobante referencial de la felicidad interior conseguida. De pronto volviendo a las imágenes de la pasión experimentada que corren como pensamientos ilustres; más el sonido de batería que proviene de la cocina. Nada de nada le molesta, ha quedado de arriba a bajo como dilatada por demás, expectante, aunque con abundantes latidos en el pulso, la respiración acelerada pero volviendo al ritmo habitual; el instinto de conservación desafiante, con deseos de ofrecer nuevamente batalla, pero desde un lugar mejor, más desafiante.
159-Con movimientos discretos intentan ensamblar los cuerpos de manera que sean uno, que solo una línea ondulante los separe del heterogéneo mundo, un trabajo minimalista de ir pegando pecho, vientre contra vientre, haciendo fundir los abdominales sin importar las hondas diferencias cualitativas. Fuertemente sujetados de la cintura, se va formando un remolino metafísico, que dibuja una glorieta del monumento a los caídos, de elementos capturados de la expansión del goce, donde los muertos hacen suposiciones acerca de donde estaría la entrada al nuevo mundo. Sopla una brisa entrecortada y débil, que emite una música relajante, aunque el grueso de la melodía no refiere a algo conocido, resulta muy esperanzador escuchar con el alma.
160-Parecía que había muerto pero aun existe, la vida es un campo minado, debe ser como estar bajo el yugo de los bombos del baterista; cualquier ingrediente que desaparece por motivo de la erosión deja su musiquita esparcida por el aire; una laucha escondida dentro del parlante de los graves. Hubo un advenimiento y lo sigue estando, pero ahora es una raíz que florece sin la anuencia de un sindicato, apenas una tendencia que brota en la sociedad por ser interesante. La ciudad está dormida solo se escucha el crujir de la cama, la emisión de un susurro que sopla ininterrumpido. Cuesta admitir que alguien tan débil pueda permanecer tan cercano al amplio infierno parental, será preciso detener la ambición del triunfo personal en detrimento de lo nuevo; algo sencillo cuando se sabe pero difícil cuando se ignora. La aceptación sigue estando pero dejemos explayarse al cielo.
161-Luego de cenar opíparamente, bajos los efectos del farol de la luna, hicieron el amor obviando la digestión. Y pasó que no habiendo mediado un beso profundo, una marca apenas perceptible comenzó a emerger de la piel de Emilse. Gran motivo por el cual continuaron con mayor vehemencia, mejorando la lívido, hasta hacerse palpables dos letras de imprenta sobre su fino cuello. Así pues, arremetieron intrigados, pero duplicando la carga de morbo pensando que tal vez sería un largo mensaje. Y así, sin decantar el entusiasmo con conjeturas vanas, se amaron toda la noche hasta saber que se trataba de solamente letras, tal vez iniciales. Una vocal más una consonante, negras, que con mucho aprecio intentan descifrar en fugaz razonamiento, pues ninguna se corresponde con sus nombres completos.
162- Hoy soy un pensamiento sin cuerpo, no temo ser tomada como una cosa extraña, lejos estoy del aposento de la crítica especializada. Tampoco puedo espiar y avisar lo que está pasando. Será conveniente plantarme al filo que me sostiene buscando reunir ganas para lo que continúa. Y si cavan una tumba pues me entienden como a un muerto dar zancada cual si fuera un arroyo que cruza el deshielo. No provengo de sobras, así podré resurgir de un resultado incierto; lejos estoy de ser ágil, o con la precisión del experto, igual aunque agitándome tengo un recoveco donde apoyar las vértebras y los tejidos. Soy fruto legítimo de un perturbado vicio imposible de reemplazar por conductas nuevas, un estereotipo excelencia de placer que en la repetición cobra sentido, una cultura que el afecto potencia en grandes cantidades sujeto al método de prueba y error; machacando sobre lo mismo se forja un escudo de acero labrado con ilustraciones de la epopeya.
163-Las iniciales U y Q, lejos de ser el garabato de una picadura, ponen a Emilse en el cautiverio de la duda de tener que hallar explicación socialmente coherente. Motivados por el ocio creativo, de tono apacible, han acordado que por el atraso menstrual arrojado, si acaso fuera un embarazo deseado seguirán la rutina sexual por algún tiempo indeterminado, pues es sabido que no existe influjo alarmante de pellizcar el embrión hasta llegada la primer ecografía; además, por superstición, piensan que a mayor menjunje se refuerza la creación, optimizando el desarrollo del enaltecido producto; con ello descartando por completo la posibilidad de secuelas peligrosas en renegado proceso inverso, estableciendo deuda ética que desafíe la integridad del ser tan añorado.
164- Alfredo Aparicio Gibaudo y Emilse Roxana Gallego conjeturan entre caricias al revoleo, si el nombre será Ursula o Ulises, Quirina o Quevedo. Mientras en el interior se siente oír: A la vera del útero estoy, pretendiendo saber hablar, y estoica en cuclillas contra los remolinos de la turbulencia luchando; pretendiendo expiar el cuerpo de rencores y del susto. Sin flaquezas, con toda la garra posible, andar bien hasta conducir por mis medios algo más que un adverbio, una canción que acompañe la despedida de este inseguro lugar; que severo se hace merecedor de improperios sin música ni poesía alguna. Sin cielo negro u ofuscado voy buscando el sitio adecuado donde crecer dignamente. Allí veo entrar un gigante rendidor que acaecido y arrogante suele pretender los designio del espacio redentor.
165-Ya han comprobado científicamente que si, que han podido engendrar una versión del amor en un embrión femenino, que aun permanezco en declive en el sitio donde poder superar el tamaño de un garbanzo. Barajan nombres tejiendo escarpines mientras acoplan sus miembros sin pensar que el cuerpo donde habito es taladro salvaje de moler asfalto. Mi alma sofoca las flemas que se estampan al vidrio escupiendo maldiciones. En marcada destreza los gélidos latidos difieren de la pasiones amorosas, de rebote en dolo castigar la existencia con la escusa del maldito conformismo. ¿Quienes podrán devolver mi versión de las cosas sin incluir su elevado egoísmo retórico? Deberé darle muerte, desprenderme de aquí, más con la infantería de odio recorrer la sangre hasta aplastar el blando cerebro estampillado de rigor de mujer. Privar del movimiento de la vida. En transición sin mediar una resurrección casera socavar el empecinamiento atroz y en efímero deceso dar aliento nuevo.
166-Vaya calumnias poco cortés propias de un garguero endemoniado. Y la suma millonaria de tramar firme venganza vaticinando redondo final, haciendo combinar la ira desbordante con la inteligencia al servicio del honor mancillado, resultando poner la furia desenfrenada sobre la hoja de ruta de un camino de margaritas, con la astucia propia del justiciero intachable. No es algo fácil para un pensamiento restringido que patina sobre ruedas rectangulares y carece de reflexión tranquila conectada con la respiración pausada. Además inmersa en leche de tigre con polvo de suplemento energizante la idea de matar en serio, con lo costoso que resulta el imprevisto, alimentada de estrategia adicional militarizada, como para ir saciando el entramado de sentimientos heridos, escoliados, y en transición remontar la gesta con plasmar los deseos de continuar el crimen haciendo estragos con metralleta. Poco frecuente, cero referente, falto de considerar.
167-A pesar del asedio de las dificultades, gracias por darme una niña, justo con la mujer que más amo y admiro, una regia descendencia que ha de ser muñequita mimada. Juro sabremos educar al estilo de sus abuelos, para que sea un orgullo que la estimada sociedad tenga y atesore. Son esporádica mis plegarias al cielo, la mención y el agradecimiento por tanta dicha recibida, pero luego de esta bienaventurada noticia será presumible verme con la cara mirando la vía láctea y diciendo gracias a cada día del calendario. Lejos voy a estar de esquivar el bulto, pondremos los huevos sobre el canasto agregando horas extras para incrementar el sueldo. A Ursula no le ha de faltar nada, y aunque sea muy menudita como pronostican los facultativos, la vamos a querer a toneladas. Subyugado estoy con la íntima fantasía a acunar a la niña mientras ligero adoro a su madre con músculos, adrenalina y remache.
168-Han incurrido en la carretera que conduce al sexo. Una manga que escapa del brazo, pues al nacer venimos desnudos, un bretel que se desprende ofendido, por donde aparecen los senos, seguidos de vibrante ovación. Buen comienzo con un paciente prefacio. El cinturón abierto en alas cayendo incrédulo juntos con el pantalón vaquero azul. Un Nilo de barbarie sin delimitar, los emisfério del cuarto barajando truenos, terremotos y vapor. La ruta del placer con morfología elástica donde recae la vuelta, él por fin entra, ella se arruga en pliegos de sotana con los cabellos erizados entrando por la inercia; se restringe el esqueleto, los huesos en fosa común de un caldero sucio, los gérmenes enmudecen ante el pesquero en vaivén del patriarca y la mucama. Cual varios intentos en vano, una promesa de movimientos continuos se ancla en el vientre. Emilse cree ver en el círculo negro del ojo de Alfredo el rostro de un bebé luego de un largo viaje.
169-Fuera de todo chisme, para la segunda ecografía Úrsula ya no se encontraba. Sin pretender difamar la paz del pueblo, acaso por la apremiante complejidad de entender la realidad, cayeron en otro nudo de silencio, prefiriendo refugiarse en el sexo antes que tratar de entender el tráfico de maldiciones y de conjeturas vanas que van apareciendo; tuvieron que agregar poses nuevas que sirven de bálsamo; accediendo al privilegio poco común de mantener relaciones frente al ventanal para que el barrio los vea, con ella colocando un pomo en el ano de él; una propaganda marginal que lleva al ridículo extremo y que entonces la sabia vergüenza pone en retroceso al grave dolor de padres fracasados. El ego inteligente entonces sugiere dar sustento al yo perturbado por medio del cuerpo al servicio del oprobio que aplaca la fea perturbación. Sin dejar de trabajar se han vuelto más doméstico, impertinentes con los horarios establecidos para las más básicas responsabilidades.
170- Incomprensible Alfredo tiende a disgregar el matrimonio, en particular con flagelaciones y desbordes que hace recaer sobre si mismo, rociando el cuerpo con solventes o reposar sobre vidrios molidos, por ejemplo; además de mostrarse pendenciero con el resto de los mortales. El punto álgido fue mostrarse hostil con los servidores de la medicina. Su esposa al sospechar que estaría bajo los síntomas de un tumor cerebral, trajo unos neurólogos a domicilio, a quienes, tétrico, al momento escupió el aparato de confeccionar electroencefalogramas, sacándolos a empujones, acortando la estancia en el domicilio. A pesar del desvarío siempre en algún momento del día recobra la conciencia, con el debido perdón, vuelve a querer seguir pegado con la Emilse, quien no le niega mimos, caricias, y algo más. Pero el amor enfermo es peor que el odio justificado, en algún lugar deberán expiar culpas y comenzar desde cero.
171- Mi cabeza está siendo allanada por fuerzas superiores, fuera de mis cabales percibo un coctel de culpa, que ha de derivar en cálculos renales, por haber buscado placer en postrimerías exquisitas y no en el objetivo prioritario, tal vez sea esto lo que me sucede o como en aquellas tribus donde la mujer da a luz y el hombre sufre las contracciones; pero aquí hablamos de un deceso, entonces debe ser que sufro los traumas de la madre. Aunque descarriado pretendo emancipar mi mente de toxicidades, me reprocho tanto haber gastado concentración en chucherías afectivas en vez de meter rigor de semental en el objetivo principal de engendrar una criatura. Toca el destino la curva descendente del que fuera lícita fibra de virtudes. Aunque la santa que ilumina mi camino desea intentar de nuevo quedar embarazada, siendo eximido del delirio, la demencia, o usurpación.

172- Y yo me siento obligada por los represores de siempre, aquellos que ven en la modernidad los diablos que llevan dentro, a permanecer oculta fuera de la patria como el vapor de la locomotora. Prefiero sentirme una sirena del mar y no unas combinaciones raras de partes pertrechadas por la urgencia, en mundos aledaños que son la antítesis del entorno necesario. No pretendo delegar mi espacio personal en menstruaciones fuera del presente con la sangre del exterminado, mi hegemonía es la estoica razón de evolucionar por las leyes de la naturaleza, fuera de la depredación del fornicador que creyéndose permisivo solo afloja cuando la tienen caída. No soy más que una potencial promesa, una subliminal poesía, una religión que comienza por el milagro de la vida, sin detentar poder, sin forzar el cerrojo del alma de nadie. Pero quiero subrayar que con el ímpetu de la razón voy a tramar una estrategia y como sea voy a nacer consagrada para la libertad, sin ostentar nada específico más que hacer la revolución para los pobres.
173-Emilse extrañada de nunca haber visto a Úrsula partir, ahora indispuesta revisa la toalla en busca de huellas. Como forma de favorecer el entrenamiento no irán a desperdiciar dejando pasar el período femenino por alto, planean que luego de una semana de libre albedrío van a adoptar nuevas poses para el próximo intento de reproducción, sobre todo: La repisa del afecto, La mesa con ruedas del hospital, El changuito lúdico, Los incentivos para la clásica; títulos, que sin poner a consideración del orden ético, serán la plataforma reforzada de lo que se viene por delante. Alfredo aun convaleciente, con dolores agudos que van mutando por diferentes partes, en algún punto hace un clic y se repone mágicamente, relegando la asistencia medicinal por medio de integrar la esperanza como factor descongestivo, haciendo promover el optimismo sanador, con el regir del coraje que eclipsa la acuciante realidad traumática.
174-Es difícil determinar la lesión de Alfredo, porque es una molestia que se va trasladando: de los genitales al aparato digestivo, garganta, ojos, cabeza; pero al ser tan pertinaz con los deberes de marido recién casado, se niega a realizar análisis clínicos o a escanear el cuerpo, lo que torna imposible arrojar un pronóstico serio, es solamente conjeturar para en el mejor de los resultados adivinar. Con frecuencia la psiquis traslada al cuerpo el sufrimiento que sobra, y lo de Úrsula ha sido un episodio abrumador. Alfredo trabaja en una náutica, vendiendo repuestos, probando motores, limpiando piezas mecánicas, a lo mejor halla ingerido algún producto o el cuerpo haga las de absorber algo nefasto. Lo mejor será instalar una manera correcta de llevar la conducta con austeridad, y dejar que el tiempo sea el encargado de mostrar un resultado, pero luego seguir por la misma senda sin volver a empezar con otra cosa, o peor volver a lo que veníamos haciendo.

175-Esto es un mundo dotado de correspondencia, con infinidad de cartas en estafeta, estampilladas con la imagen de Alfredo, con la identidad epistolar de quienes luchan por alcanzar el buzón de entrada. La cantidad es igual a unir todas las notas del mundo de fieles a los reyes magos. Y Úrsula, pertinaz, busca hundiendo sus manos en la montaña de sobres. El que posea el remitente ideal será el elegido: solo habrá que leer el curriculum, seguramente de fuerte temperamento, de quien deberá acompañar a su hermana en realizar la revolución de los infantes. Aquí no hay reglamento, solamente zarpar del franqueo, y sin censura, ajustarse a la rutina de fuerte impacto emocional orientada a salir en expedición en busca de la otra parte que falta. No existiendo las recomendaciones en sociedad habrá que poner empeño en integrar intuición e inteligencia para elegir con destreza a quién acompañe a la niña a luchar por la existencia.
176- Dentro de un badajo doble, en un campanario amigo, al momento la misión de Úrsula es verificar la identidad del futuro descendiente, tratando de indagar a fondo sus posibles condiciones latentes. No existe un trayecto amplio adonde poder hacerse a un costado de la algarabía grupal, y así seleccionar con comodidad lo más acorde con el anhelo; sin llegar a ser un cielo abierto en el fondo del túnel se deja ver una luz colorada con tulipa de plástico. Cientos de renacuajos se bambolean sin cesar, habiendo paquetes de ellos que se deslizan por la concavidad luego de golpear como olas. De pronto, como presagio que algo muy álgido sucederá, da comienzo la fase más intensa del programa; donde aun continúa el rutinario estilo de vida de éste yogur del tercer mundo. Pero en abrupto desenlace, estalla el salón en desaguote quedando la niña sola sostenida de un milagro tratando de apaciguar el desconcierto, mientras tanto el resto desaparece por la manga, sin rectificar lo acumulado, ni hacer medible lo recorrido.
177-Por norma cultural pero también por capricho, han decidido usar el método de protección del condón, mientras dure el período femenino y hasta transcurrida la primer semana, casi llegando al punto de mejor fertilización. Para luego si retomar la manera candente de cuerpos desnudos sin aditamentos; y regar con ganas el jardín de las delicias con agua bendita caída del paraíso.
Un tema que introduce la cábala, pero que puede variar según el nivel de excitación que pinte. Socavando información fidedigna, resulta ser que las posibilidades de quedar nuevamente en cinta es sin dudar el mismo, pero gracias a la variante progresiva con etapas diferentes, de un nuevo intento más fiable, con la febril presunción de aumentar las posibilidades de arraigo del feto; pues, los cromosomas estarían mejor predispuestos al cara o cruz, y las hormonas con mucho colágeno animal. Anótese, la pareja reluce rabia y optimismo, tratando de enmascarar el pasado funesto sin ironizar lo programado.
178-Al no encontrar la salida por estar bloqueada, no una vez sino varias, Úrsula debió emigrar hacia el norte; volviendo a ser reconocida por apariciones en los ojos de Alfredo. Y en condiciones nulas, de disparidad, incapacitada de transportar a nadie, obligada a abandonar al hermano respectivamente elegido con anterioridad.
El amor es amor mientras el diablo no interceda, admiten los cónyuges mientras esperan repetir la performance; pero ralentizaron el coito menguante asustados de pensar estar poseídos por algún demonio, debiendo enunciar oraciones liberadoras previo contexto amoroso; y así limar asperezas y reconciliar el deseo con la acción sin objeción alguna para reencontrar placer como siempre. Pero se está cuajando la idea de abortar selectivamente si por tal caso fuera del sexo femenino; tratando de paliar el asunto para el lado de la sensatez, han decido primero esperar a saber el destino en suerte, más recién luego decidir como actuar al respecto.
179- Alfredo platica con el miembro viril cual si fuera un ser independiente de él; los cimientos olvidados por falta de presupuesto. Es el arquetipo de persona que cristaliza la imaginación otorgando vida a los factores de la naturaleza, quienes lo acompañan como mayordomo a la espera del almuerzo; siempre y cuando no abandone esa propulsión de bondad extrema que lo hace intachable y poderoso. Ha perdido la chapa de campeón y la frescura del inocente. Paulatinamente va volcando la moral en favor de la superstición, entonces la lujuria del placer talla en el rostro la cara de un prohombre inflexible, el vicio mundano ahora prenda esclavizante, atenta contra las ojeras del amoroso poniendo los ojos al rojo venoso. Resulta conmovedor verlo rogar al futuro pidiendo clemencia,
en favor de no caer en la delincuencia de aplastar un alma que flota sin gravedad y que carece de pito; rogemos que el amor que profesa por la vida no se vea mancillado por la puta coyuntura.
180- Me sacio la panza con los nervios, beso la nuca con los dientes apretados; azotado por la desolación me cuesta horrores centrar la cometa con el arco iris. El ser amado apremia con el cuerpo ondulante, otorgando un placer indescriptible pero agreste, pidiendo entre susurros que la conciencia se abstraiga de las espinas del pecado, que a lo mejor todo salga a favor de la carambola. Atrapado en un corral de sensaciones fuertes debo deplorar la mitad de lo invertido cual si el esfuerzo no fuera un crisol. Entonces la sangre se corroe por las piedras que me circulan por el torrente, piedras que son cálculos por la aversión al miedo atascados en el corazón. De andar sobre puntillas en la nativa corteza del lugar, el idilio se vuelve compromiso, atracción de cuerpos que chocan en vez de rozar con ternura. Quiero ser altruista de la lengua para afuera y tutor de un hogar que naufraga subsidiado por pavuras del momento, una suerte de mediocridad con nivel terciario en danza.
181- La vida es un reducto donde es preferible considerar pasarla bien en vez de andar a los saltos pretendiendo lo imposible. Alfredo luego de la licencia obligada es enviado a retirar un yate en las afueras del Río de la plata; de la expansión y el auge del prototipo de muchacho ideal, ha transitar anulado como un inválido. Pero al situar la proa al viento nomás, rueda sobre el interior del cuerpo la fortuna de una pepa de oro con forma de esfera, aunque empecinado en cumplir el encargo aguanta los retorcijones para lograr el objetivo laboral. Trascartón impaciente por regresar al hogar se embarca en la lancha de pasajeros, viajando de brazos estirados haciendo tope en la butaca masticando tormento. Por el semblante y el decaimiento se aprecia que a sufrido muchísimo, haciendo inclinar la decisión en favor de una prórroga en la licencia hasta que se encuentre recuperado. No existe peor paradoja que ostentar felicidad mientras escalamos hacia la cúspide del sufrimiento; siendo siempre la prudencia lo que nos posibilita estabilidad verdadera.
182-Úrsula tiene quince años y mide un centímetro de altura. Sin ser un insecto, pues tiene una figura perfecta, se desarrolla de óptima forma; será preciso que pueda salir a tiempo antes que los días pasen y se transforme en una anciana. Pero atención, estos precisos momentos, tiene en la mano derecha al que podría llegar a ser su hermano de sangre, y felizmente sus padres están teniendo relaciones sin protección alguna, de poder atravesar por los conductos que conducen al útero quizás logre traspasar la barrera que la lleve derecho a la fecundación, más luego del tiempo estimado, a los sesenta años de edad, pueda salir colada por la puerta grande ha cumplir con la parte del destino que falte.
183-Habiendo logrado pasar al cuerpo de Emilse, cumple con el objetivo de embarazar a su madre. Y a partir de ahora la niña ya no habla por si sino también por su hermano, luego de hacer una marca con las iniciales P y N debió regresar nuevamente al cuerpo de su padre. Alfredo aliviado de dolores, peor que antes no cesa de tener relaciones sexuales, haciendo la permanencia uterina insostenible. Pero al regresar la nena al ser anterior, éste recae en aquel estado de postración que tanto sufrimiento le hubo infringido. Más al rato la niña decidida en establecer una protesta hace su aparición en la pupila de Alfredo; con el puño cerrado contra el rostro y el dedo Medio erecto formando el conocido símbolo despectivo. Emilse, que ya no sabe que pose adoptar como para no mirar los ojos de su marido, a podido ver la imagen de la niña vituperando con el faquiu, lo cual le provoca una aversión tremenda que la impulsa a querer destruir ese diablo que se ha infiltrado. Impotente lo más que ha logrado ha sido escupir la cara de Alfredo como para espantar al demonio.
184-Úrsula, luego de un apretado recorrido por el cartucho de Alfredo, escala con vigor hacia la cima de la pupila. Satisfecha por la decisión de dejar en manos de la naturaleza el destino de su hermano, que lo siente como un hijo, ahora mira la larga escena amorosa entre sus progenitores. Acostumbrada a ser testigo de lo erótico, con emotivo desinterés, desvía la mirada de lo obvio para reparar con especial atención en las letras P y N en el fino cuello de su madre, debajo de las anteriores U y Q en el lado izquierdo, emblema que diera origen a su nombre y seguro que después al de su hermano. Ella de tanto escuchar entiende el idioma y puede hablar de corrido, tiene una vos tan potente que desde dentro se escuchan protestas y maldiciones; aunque hay veces bromas. No todo en ella es odio o bronca, sabe ser traviesa y divertida, optimista y transgresora.

185- Tras analizar las marcas en el cuello, se produce un intercambio de opiniones arribando a la conclusión que están esperando un nuevo hijo. Esto pone de relieve dos cuestiones postergadas: Los pedidos de Emilse para ahondar la cuestión de las apariciones en las pupilas, y los alaridos escuchados salir del interior de su marido. Aunque son sistemáticamente dejadas de lado, suponiendo que nada extremista ocurre, cada vez se hace más difícil disimular tantas anomalías incluyendo los dolores y las marcas con iniciales. Sobre el final de las evaluaciones se trenzaron en amoríos desatando la inconciencia del orgasmo que dio por tierra con cualquier razonamiento sensato o conclusión potable. Los temas matrimoniales están muy presentes pero se van dilatando por cuestiones del amor. La niña analiza la posibilidad de escapar para hacer efectiva la arenga en persona, de hacer notar los peligros que corre el nuevo descendiente teniendo que lidiar con la espada de damocles.
186- En acalorada discusión, mientras se frotan el cuerpo con furor romántico, como soporte a la depresión inherente, con el auspicio de la fe mundana, han decidido adjudicar las nuevas iniciales, solamente a nombres de varón, pues si fuera niña, de ninguna manera aceptaran una mujer, habrán de abortar sin miramientos de la conciencia. Pablo Nazareno si fuera uno, o por separados si fueran mellizos; del resto no existe posibilidad de variaciones, ni de plasmarse en la realidad como algo tangible. Emilse está feliz de saberse madre, con tantísimas esperanzas proyectadas en el futuro; y ambos calientes de caminar sobre las llamas que el amor provoca entremezclado con el delirio que la pasión acciona. Les resulta imposible salir de la trama, que es una melodía envolvente que otorga mucho placer y cosquillas.
187-La licencia de trabajo se esfuma invertida en coitos y tijera; en un maple de diez cuadras se ubican los chupones con saliva que salieron caminando. La habitación inhala vapores del matrimonio, que luego el edificio vierte como transpiración sobre el cielorraso y las paredes, suma susurros terminales al revoque, olores que son huecos proclives a ser sonidos de un placer sinfónico, de un infierno de placer pintado en los factores del tiempo que acompañan los humores de una noche explosiva.
También se sienten ecos y gritos de la niña encolerizada; que ahora es vedette tallada en una almendra, y la televisión encendida en el canal de las noticia. Ella teme por su hermano que considera como suyo. Úrsula piensa que cuando se nace solo no se tiene madre, que por ello pretende acompañar al por nacer en el desarrollo del proceso de la vida, pero no quiere decir esto, sin embargo, que vaya a querer incidir en resultados posteriores; ella, con motivos válidos, duda de la supervivencia.
188- Este tipo de ser que es Úrsula, luego de pasado los tres meses de ser un feto normal, pero traumatizado por fricciones desmedidas que marginan el espacio requerido para si, sufre una alteración repentina e implosiona produciendo un nuevo ente, diminuto, pero con las características similares a las de un ser humano ya formado. Se caracterizan por tener un desarrollo acelerado, en una equivalencia, de por cada mes de nuestro calendario maduran cinco años, manteniendo las proporciones iniciales que no superan el centímetro de altura. De diferente manera, siendo expuesto al exterior, muta hasta equipararse con nuestra especie animal, creciendo en tamaño un centímetro por cada minuto horario que transcurre, hasta completar el tamaño medio de nuestra anatomía. Si salieran de dentro del cuerpo o capullo en breve alcanzarían las dimensiones normales, detendría ese crecimiento acelerado hacia la longevidad, para entrar en los parámetros promedio de la especie.
189- La vulva está siendo sometida al aire de la compulsión y a las paladas del vejamen. A mayor dolor propio Alfredo duplica la carga erótica, hasta dotar los nervios de una molestia apenas perceptible. Un conjunto de labios en cuña, ávidos del carnaval, disfrutan del millonésimo bautismo. La ampolla de Alfredo, lejos de la castidad, inserta en la zona del rastreo el contenido, con habilidad y entusiasmo; pero alterna la actividad succionando los pezones. Emilse da vuelta la cara, desfigurada por el goce, y para su desgracia divisa a la niña sátiro, mirando desde el faro que representa la pupila de su marido. En un movimiento eléctrico estira el brazo cual látigo, y con la uña larga, del índice erecto, pintada de esmalte con purpurina, le aplica un navajazo justo donde se encuentra, según su entender, el demonio que tanto los persigue. Por consiguiente se abre el ojo, provocando una abertura vertical, justo al centro del órgano; quedando la niña expuesta al son del mundo exterior.
190-Cuando Alfredo alza las manos para cubrir el tajo del ojo, Úrsula, decidida, salta al vacío cayendo sobre el monte de venus. Y si bien, en este breve tiempo de apenas segundos, hubo crecido varios milímetros, igual se pierde en el matorral de la madre. Sale corriendo chocando con la punta del clítoris, volviendo por las ninfas hacia el vestíbulo vaginal. En cambio la madre montada en cólera, le ruega al marido que quite al diablo como sea.
Entonces Alfredo, con los dedos como ganchos, logra que Úrsula vuelva al exterior; encontrando virtual reparo en el ombligo de la misma. Todo esto, dentro de un dramático griterío, que culmina con la niña adherida, a los dedos pegoteados del padre; quien en un solo movimiento la introduce en la boca. Tragando el bocado sin masticar; quedando su presa atrapada en el aparto digestivo.
Más, al instante, vomita por los agudos retorcijones; pero dentro del inodoro; con lo cual, rápido, acciona el desaguote, dando por terminada la cacería, con la hija metida en la red cloacal.
191- Cual si ninguna tragedia hubiera mediado, Emilse fuera de complejos o culpas, de elegante lencería, creyéndose insinuante, le concede tres deseos al marido; válidos hasta entrada la rica madrugada previo al desayuno, solamente referido, los deseos, a los alrededores de los puntos excitantes G, K, U; por haber ganado con encono machista la guerra al infierno. Alfredo, sin orientación, poco sesudo, navega a vela sin viento bajo los efectos de la melancolía; negado de transferir resentimiento por el accidente donde perdiera la visión de un ojo. Luego de la cirugía, ha quedado con el órgano visual cosido pero disimulado con férreo apósito negro, por lo cual, hasta lo hace más atractivo.
Han acordado deleitarse por sobre lo erógeno, hasta saber científicamente que sí, que la cosa anda sobre los rieles de la naturaleza. Que luego del compulsivo exilio de Úrsula, previa menstruación con dos gotitas de sangre solamente, han fecundado un nuevo ser; que el cielo quiera sea del sexo masculino. Pero por los vaticinios de las comadronas confían que será machito; un alivio para sus días, el sendero que conduce a la satisfacción necesaria para alcanzar el disfrute de una felicidad duradera.
192- Han adquirido una embarcación con dinero propio pero deben revender urgente antes que naufrague el negocio quedando en pampa y la vía. Pero resulta que hoy a Alfredo le cuesta articular piropos comerciales con relación al producto; es como que tiene la inteligencia en el glande. De manera brutal olfatea la axila para saber si está impregnada del néctar de anoche. Siente como si las yemas de los dedos no tuvieran impresiones digitales, habiendo quedado derretidas en los glúteos de Emilse. Ella es su futuro promisorio, sonríe pensando que los ovarios de la señora liberan óvulos como salvas de cañonazos. Nunca un vendedor debe verse tímido, pero se muestra esquivo, huidizo, torpe y llano buscando pretextos sonsos para sortear las dudas lógicas de un comprador; el producto es digno, aunque se siente que el precio lleva la carga del porcentaje que ellos agregaron para su peculio, resultando imprescindible argumentos convincentes para que el comprador obtenga la contención necesaria.
193- Los compradores son un matrimonio de ancianos, pero que parecen ser hermanos gemelos. Fuera de tabúes, no es que no pueda existir, dos personas calcadas que se hayan enamorado y unido en matrimonio, pero llama muchísimo la atención el hecho patético que sean dos gotas de agua. Ellos viven en una isla del delta, en la propia cuenca del Río de la Plata. Mientras los compradores presumen de haber sido pobres el noventa y nueve por ciento del destino y amasado fortuna rápidamente en el último año, por su parte, Alfredo se carcome el cerebro en querer saber, más que en lo referido a la venta deseada, en si a esa edad avanzada todavía tienen sexo regularmente; seguro que especulando sobre la suerte futura en la cama con la amada esposa, de piernas chuecas, provista de encaje a pintitas.
Los Gibaudo piensan que con este alimento básico que es la sexualidad se logran un sinnúmero de beneficios imposibles de mencionar en un solo discurso.
194-Emilse estando sentada arriba de Alfredo, notó que la panza se deshinchaba, y que algo raro ocurría, pero confiada continuó triturando al marido cual si fuera un amante. Mientras tanto él se sueña vivir rodeado de niños hechos en la fabrica nupcial propia. Quedando restringido el peso de la duda; para luego del acampe en el cielo darse cuenta que habían perdido nuevamente un posible hijo; otro intento fallido. Y así, a la tristeza lógica del fracaso, salvando las distancias, habría que sumar la preocupación real por encontrarse en bancarrota. Quedando como alternativas válidas: La resignación, esperanza de un nuevo comienzo; y de financiar en cómodas cuotas la embarcación que compraron a modo de inversión futura sujeta a reventa. Pero al temblar el almanaque por el arduo día tan especial, acontece que cuando salen de la habitación para dar un paseo, se encuentran con un bebe de tres años en el ascensor del edificio, entonces el tiempo también se subleva prolongando la permanencia obligada.
195-Enseguida que encontraron al niño lo bautizaron Pablo; aunque más no fuera hasta encontrar a sus tutores. Golpearon palmas por todo el barrio sin resultado positivo, y en la policía les pidieron que mejor lo alojen en el domicilio hasta saber quienes son sus padres. Querían un hijo pues ahí lo tienen, aunque prefieren uno de sangre propia, por ello en última instancia irán hacer intervenir a un juez que se haga cargo.
Y como la situación económica es precaria solamente han comprado un chupete y golosinas. Para el día de hoy han organizado una visita al domicilio de los posibles compradores del Galileo II. La harina con el huevo hacen la masa, y con la levadura la masa crecer, juntos, con la horneada, forman el bizcocho; estamos hechos de unos pocos elementos; y ellos se juntan y forman cosas; o caso contrario derribando la pared quedan los escombros.
196-Los factores son los artífices de los cambios de estados en la materia, por qué si las nubes y el agua fueran elementos distintos siempre estaría nublado, no habría lugar para tantas cosas; sé es maíz o sé es pochoclo. La muerte de los seres es lo que posibilita un recambio necesario; no obstante hace falta un control de la natalidad, o guerras. Lionel Armando con Cristina Milagros, de ochenta abriles, conforman el lindo matrimonio de potenciales compradores del pequeño yate; Alfredo, Emilse, y el niño Pablo, se han corrido hasta la isla, llamada El Guiño, navegando en el Galileo II. Hay tantas almas por cada ser que nace, porque son invisibles, pertenecen a Dios, que cuando morimos regresan a su peculio; donde si hay lugar para lo que guste guardar. Lo cierto es que los compradores se han encariñado tanto con el niño que solo aceptarían la embarcación con éste como parte del pago, lo restante al contado. Ellos verían de adoptarlo, y los Gibaudo deberán ser los padrinos. Trato hecho, vendido a los amigos.

197-Alfredo desea apurar la venta del Galileo II, pues de momento, una pareja, ciertamente poco fiable, reclama al niño como suyo. Hasta ahora alegan haberlo entregado a quienes acudieron primero, y al ver que el niño estaba feliz, respondía afirmativamente al nombre, obedecía, no dudaron en confiar la tenencia. Tampoco sabrían donde se encuentra pues ignoran el paradero. Aunque con mucha doble intensión, preferirían salvarse de ser nombrados padrinos. En última instancia de haber sido abandonado deliberadamente está en manos expertas, el mejor lugar del mudo, con la inminente posibilidad de ligar una herencia millonaria, y donde lo irán ha amar de manera incondicional.
Para que derivar la carga sin noción del resultado cuando por el rumbo trazado te eximen de requisitos y contratiempos pudiendo abordar la solución perfecta. Emilse, muy excitada por el trance onírico interpuesto, sostiene, entre jadeos entrecortados, que el egoísmo es una manera de instinto de conservación.
198-Debe haber sido una hembra que no pudo esquivar nuestra negativa. Piadosa, descansa tranquila, que no queda ni vestigio que rastrear de aquella frustración. Ahora si, irá marchando el heredero legítimo de la riqueza compartida; permite que vuelva a intentar con el lazo rodear tu estructura maternal; en el olimpo que nos mantiene como favoritos quiero hacer ver el orgullo de nuestra unión. Admito que salen de mi boca, palabras sonsas con despecho de niño malcriado; ay, si pudiera macerar el rencor con buenas nuevas, más con la fe acaparar esa sonrisa algo perimida. El mercurio entra en la glorieta del llano instinto. Puedo seguir sin quitar la herramienta, tentada por un último esfuerzo, pintar ese mundo que la hospeda, de varias capas del color de la risa; mi amor es una energía que a medida que se consume, ágil se va renovando, que no tiene fondo donde alojar la duda, que tira de un carro colmado de flores y arco iris, con la alegría de la felicidad, en un presente complicado, con vistas a mejorar.
199-Necesitamos plantarnos definitivamente en la vida como un matrimonio consolidado, ya hemos creado una plataforma, hacer cumplir los anhelos permanentes de estar unidos, hacer pata ancha y pito catalán a las adversidades. Tratar de encausar el trance, que en apariencia es incorregible, de no poder hacer un hijo normal, que la suerte obre de nuestro lado; con la firmeza de la parra expulsar los males del hogar; que es el mundo que a fuerza de cariño supimos construir. Avanzar a paso firme de frente a la sociedad, copar la banca sin tapujo, dar rienda suelta a los sentidos en estado de perfecto andar. Contra la mirada del osco envidioso, el nudo del mal, empecinarnos en ganar la guerra, acomodarnos a nuestras anchas en la posición existencial requerida. Vayamos empezando con eliminar el pudor que nos tiene entumecidos, acariciar las partes en pugna con ambas caras de la lívido. Mujer hermosa, donde se baten mis ilusiones, hoy peor que mañana bajo la cuesta en busca de melaza.
200-Al ritmo de las poleas renaces del capullo troncal del aparato escénico, envuelta en telas de colores con brisa propia, que haces flamear al viento por medio de una danza al boleo; repentinamente la sortija del rey se mese tentadora, e inquieta hurgas con la lengua el sabor de la vuelta. La prudencia alterada por la impertinencia nos anima aun más. Mi cara se estampa contra el pavimento más bello del planeta. Contaminado de dulzura del cañaveral confío la magia a la saliva sanadora; ergo, lenguas que frotan el frenillo del alma. Al momento, caigo en un mar de vino que el cuerpo sediento absorbe, mientras tú, embriaga de mis máximas, empecinada dejas una marca atascada en el fino cuello. Vuelas rasante sobre el hogar, alterada y susceptible. De vuelta a empezar de cero, con las ganas del actor que repite siempre la misma letra. El cansancio es una impronta que recrea el nuevo esfuerzo. Tengo la caramañola colmada de pastones con el poder de la alegría.
201-Meto la lengua y punto, después que el cerebro elabore aquel duelo con el peroguyo por la onda expansiva que provoca esta divinura. Estoy en el sitio bruto, eximido del balance del bohemio que prefiere freír la carne antes que rebosar una milanesa. Eres tan eternamente perfecta que da cosa alterar la armonía, pero solo yo sé como regresas renovada. Me consuelan los estertores mas allá de la coyuntura. Hasta donde podré caer nunca lo podré saber. Me dices que no pare de hundir la pecera en el goce. Tienes bacterias de la digestión sexual en el cerebro, pero cae el telón del alba, y sigues pidiendo continuar arriba mio deglutiendo; no entiendo, mejor que no entiendo, tengo que hacer el trabajo de abajo aunque el cielo me arranque las orejas. A ver esos medallones, a ver esa reliquia; entre joyas no hay cornada, pero una debe sofocar las llamas que envuelven al agua militante. Te veo altiva, desproporcionada, tengo la vista nublada por la transpiración, pero nada me perturba, nada.
202-Habría que comprender que son jóvenes, que tienen la fuerza de un torrente, que se aman de verdad sin tener despecho en demostrarlo; queriendo afirmar aun más lo que por naturaleza está súper agarrado. No es que hagan el amor por el hecho de trasmitir un mensaje, es por una necesidad imperiosa de gozar, de sentir el placer como una sensación perecedera. El punto de partida es una atracción fulminante, que luego se agranda al gustarse de pie a cabeza, por la piel suave, la pigmentación, el color de los ojos, el sabor de la saliva. Y sumado a esto el deseo de ser padres, una coronación merecida. Divierte observar como en el fondo optan retener el poder del instinto para hacer durar la cosquilla. El buen cuerpo, en algún momento pasará factura y todo lo que avanzaron de prisa habrán retroceder de repente. Aunque ya han hablado del tema, con seriedad, prefiriendo resolver el asunto por el lado la masturbación cruzada, que debe ser un camino interesante, que provoca una relajación alejada de mal habida flojedad.
203-Es un poco triste apreciar como Alfredo, de a poco, va construyendo una actitud romántica, producto de una culpa muy grande que supone la posibilidad de tener que interrumpir el embarazo por motivos de discriminación. En el acto sexual es donde mejor se aprecia, destacando la proligidad, la dulzura, la suavidad; pero dicho cliché amoroso, es un temor muy grande por la idea horrenda que esta vez la criatura en danza sea del sexo femenino. Desesperadamente observa el comportamiento de otros hombres que han tenido hijas, y cree que son más agresivos, depredadores, entonces intenta lo contrario. Hoy nos distendemos bastante ante el aborto, pues la moral va virando para el lado de priorizar el bienestar de los que ya están. El hecho de pensar que en el destino está todo escrito, permite expiar culpas, pero la verdad es que la existencia es equilibrio, poder de adaptación, factor sorpresa, que es justamente lo que la hace cautivante, enigmática, una vertiente de posibilidades, bellas o feas.
204-Emilse está en declive con los pies en la almohada; el cuerpo desnudo es un paraíso. Inhibidos por la belleza nadie sabe como tratarla, a veces resulta conveniente dar vuelta la cara para no quedar encandilado. Espera al marido para empujar los deseos en la hoguera, que aun perdura hecha brasas. Dan ganas de largar lo que se esté haciendo y acudir en su salvataje; están enfermos uno del otro, van contrayendo una fiebre viciosa que los hace estar pegados, han abandonado la salud por ser un trabalenguas, prefieren formar parte de la epidemia de un nido donde el aire es un espacio prendido de furia pronto a estallar. Está sola, pero él yace en cada rincón que proyecta la imaginación. Se ha untado crema que despacio va penetrando la piel, entonces, parece que se moviera cuando en realidad está quieta con la respiración restringida. La moral se nutre de la normas pero aquí no existen parámetros donde insertar un paradigma, hay una sola manera de entender el pensamiento: la adoración, la plegaria, el rezo.
205-Cuando Alfredo regresó de la isla El Guiño, le extrañó no ver a su amada en el living o la cocina, sensibilizado por el éxito comercial obtenido, tuvo pánico, algo que resolvió apurando la marcha en dirección a la habitación, donde encontró su uva sin pellejo, haciéndose la dormida, como para tentar al hombre a transgredir el llano clima de calma. Ella es un caldo de cultivo ideal para volverse loco, depende mucho de la periodicidad con que se la asista durar más o menos en la cornisa de la cordura o caer al infierno de la demencia, ha más veces mejor grado de sensatez. Es preponderante contarle historias, esotéricas tanto mejor, para lograr el foráneo deseo de la calentura, aquel que la traba en el enrosque. Él la induce a morder la ropa del laburo, a arrancarle con los dientes bolsillo y botones. Ella finge un sonrisa leve que es apetito, él, con la puntita del cinto, le golpea la cola, y la besa, pues es lo único que sabe, besar, besar, besar. Bueno, pero Emilse lo quiere, y eso es lo que cuenta.
206- La culpa por la imposibilidad de enmendar el pasado hace que seamos, aunque más no sea, prudentes por algún tiempo, hasta de nuevo familiarizarnos con el riesgo con el cual estamos lidiando. Ellos juegan con la fatalidad a cara o cruz; han creado una plataforma familiar genuina, tienen vivienda propia, se han casado por civil y por iglesia, pero falta un hijo, un niño que rompa con ese molde de dos, que no alcanza para conformar un grupo real. Son concientes de éste hecho, pero han creado, sobretodo Emilse, un sentimiento existencial nazi fascista, pero de rechazo al genero débil, algo de lo que es imposible regresar sin un crecimiento exponencial del espíritu. Tienen un suntuoso regimiento de hijos diseminados por diferentes puntos de la ciudad; criaturas que han salido como renacuajos que se han transformado en sapos, de diferentes edades, humanos íntegros con todas las piezas necesarias para pertenecer a la especie. Ellos lo ignoran, nadie conoce esta verdad, pero es tan cierta como patéticamente colosal.
207- La señora Emilse de Gibaudo, por su propia experiencia, entiende que los ciclos menstruales son irregulares, no es del todo ignorante aunque en esta cuestión si, basándose por su basta experiencia, tiende a generalizar el problema que padece al resto de las mujeres; ella piensa que las que hacen alarde de ser muy puntuales, mienten. La realidad indica que suele quedar en cinta y luego por tanto tener relaciones amorosas con su marido, estos embriones se transforman en seres humanos diminutos, que dentro del vientre crecen a una velocidad desproporcionada, pero que luego de salir, o escapar, detienen esta marcha cronológica para transferirla a un crecimiento de tamaño. El matrimonio ignora esta realidad, pero sus hijos saben que ellos son sus progenitores; en general, excepto Úrsula, son comprensivos, careciendo de rencor; tampoco se encuentran interesados en difundirlo, prefiriendo llevarlo a la tumba. Todo indica que quizás nunca nadie se entere, que sea una cuestión nula.
208-Si uno pudiera transferir los pensamientos negativos al terreno de la creatividad, lograría crear un jolgorio de grandes obras; pero no es posible. Entonces una buena decisión es poner a trabajar la mente en intentar entenderse, criticarse, conocerse, saber como funciona nuestro acervo interior. Fuera de ello se hace menester abrazar una profesión, u oficio, pues el ocio que no encuentra un canal de expresión es depresión. En tal caso, si nos place la historia, ocupar la mente en dicho sentido, estudiando los acontecimientos del pasado, conociendo lo que hubo ocurrido con anterioridad, pudiendo inclusive tomar una postura ideológica o de simpatía, con relación a los protagonistas de la historia; y el mismo proceder con el arte. Y si al mismo tiempo padecemos una angustia, por la pérdida de un ser amado, analizar como es que nos iremos a enfrentar al mundo con esta nueva circunstancia trágica, adaptando los conceptos al nuevo tiempo, y por encima de todo seguir adelante, con la salud de nuestro lado.
209-Cuando Alfredo regreso de la isla, nuevo refugio para las horas de ocio laboral. Encontró el hogar vacío, con una triste nota de su esposa anunciando una despedida. Valiente, leyó cada una de sus palabras, al compás de una agitada respiración. Luego de enterado pensó en quitarse la vida; pero desistió, por la vergüenza que eso provocaría en padres, amigos, compañeros de trabajo: Estamos en un baile que ronda siempre sobre el mismo sitio, dando pasos que van y que vuelven. De tanto girar hemos calado un hoyo muy hondo de donde no se puede caminar. Como sabes el tiempo corre y estoy embarazada, amor, no quiero compartir la responsabilidad de lo que pueda suceder si acaso es una nena. Oye. Necesito alejarme por un tiempo y ver lo que ocurre, para luego si encontrarnos y pedir mil veces que me perdones por tanto sufrimiento. No me busques por favor; haré lo imposible porque nadie me reconozca. No te preocupes por serme fiel, tómate toda la libertad que necesites, voy a rezar por nosotros.
210-El primer destino fue Mar del Plata, donde conoció a un vendedor ambulante, de origen Senegalés, quien la proveyó de anteojos negros, igual que él, y de capelina blanca para no ser reconocida. Minutos más tarde, por motivo de la fatalísima figura exuberante, que acapara la atención del conjunto, el joven apuesto y gentil, la cedió su remera para esconder la belleza integral, bajo el algodón de la gigante prenda. No obstante, Alfredo, resignado, al no establecer ningún tipo de denuncia la deja fuera de cualquier clase de persecución; a excepción de los admiradores que a más no poder la curiosean. Emilse lleva consigo el dinero de la venta del Galileo II, los ahorros en recupero, pudiendo de esta manera alojarse a sus anchas en un hotel confortable; igual tiene pensado ir trasladándose a diferentes balnearios, no descartando la noble posibilidad de emigrar a una provincia. Vale aclarar que necesita la atención de un profesional, quien le siga el proceso del reciente embarazo, lo que hace que deba escoger un domicilio real.
211-Cuando Emilse vio en el ojo del amante a un niño con sonrisa breve, de inmediato decidió nunca más tener relaciones. Y el negro cuando comenzó a tener dolores por dentro se tomó el primer avión rumbo al barrio, so pena de ser decapitado. Nuestra querida África de cara al otro lado del Atlántico, prehistórica, que tanto le cuesta de una despegar de guerras, muerte, y persecuciones. Fue un romance intenso, pero que pese a la inmediatez del desenlace, pasó de largo como tren bala; estrecha relación, útil, que le permite zafar del estigma del matrimonio consolidado. Y ahora mismo tener vigente la firme sensación que algunos eslabones de la cadena que la envuelve se han quebrado, quedando solamente levantar los pies del ovillo, para volver a lidiar con la inestimable libertad individual. En efecto aun siente por el marido amor abismal, culpa por haber mutilado la vista, quitado los ahorros; pero esta vez un afecto desde un lugar casi distante, como si el amado Alfredo hubiera perecido, o ella misma vuelto a nacer.

212- Hemos arribado a diferentes conclusiones, que devienen de investigar el pasado, también de verificar sobre el presente los hechos verdaderos; los resientes acontecimientos que afirman los datos recogidos de la historia personal de la damnificada. De diferentes índole, filosóficas, históricas, ético moral, psicológicas. Como que Emilse sabe perfectamente que esas criaturas son engendradas por su organismo, no siendo mera casualidad lo ocurrido en Mar del Plata; que le ha endosado al negro el hijo de Alfredo. Que inicialmente, como en cualquier embarazo normal, se forman los embriones, más luego de mucho coito estallan a la vida de repente dentro del cuerpo de la madre. Que para nada son espectros, ni enanos demonios que presagian fatalidades, como ella, supuestamente aterrada, puso de ferviente manifiesto al marido incrédulo. Que detrás de los gritos de terror, cuando se dejan ver en los ojos del amante, existe una mueca burlona por el hecho de conocer la realidad específica, incluido el traspaso de las criaturas desde ella hacia la otra persona.
213-Entonces, con el último especimen en el vientre (que ha esta altura de los acontecimientos, vaya uno a saber que edad tiene, o donde debe encontrarse; quizá en África, en una plaza con otros jubilados de color sin poder meter bocado, o de camarero en algún avión de línea comercial) es evidente que hizo abandono de persona dentro de otra persona, porque estos seres metidos en algún cuerpo, que hace de incubadora, a los pocos minutos son adultos; siendo evidente que la madre, que también es la patria, buscó la manera de hacer funcionar el mecanismo extraño de cambio de calidad, haciendo provocar el nacimiento instantáneo en el interior del vientre. Que por ello escogió un hombre ágil, morrudo, dotado, fuerte, bello, hambriento, porque el marido al estar indeciso, con relación a un exterminio selectivo, impedido e impresionado de calar profundo hasta el punto K, que es donde se produce la implosión final, no ofrecía garantía para una positiva penetración convincente que hiciera activar al embrión.
214-Es costumbre que Alfredo lleve, entusiasta, a sus nuevos amigos de paseo a la ciudad, especialmente al imponente parque de diversiones del complejo del casino de Tigre, donde Lionel y Cristina, de ochenta abriles, prefieren para ellos el juego del zamba, que es un plato gigante que se zamarrea como velero en tempestad; mientras tanto Alfredo cuida a Pablo jugando al piedra, papel, o tijera; después de hacer compras en el shopping del puerto, y de paseo a distintas plazas para que el niño corra y darle de comer a las palomas. Para luego devolverlos a la Isla El guiño, su segundo hogar; lo que permite olvidar por un momento a su amada señora, prófuga por razones de fuerza mayor.
El hecho que Emilse insista tanto en ser madre primeriza, con tantos problemas de manifiesto, hace suponer que ella desconoce o duda, no sabiendo con certeza, que dicho proceso metafísico sea exclusivo en su organismo, no logrando transformarse, por más que espere un siglo, en un embarazo normal.
215-Cual ésta naturaleza desconocida demanda, los embriones formados deben traspasar de manera crucial la barrera del útero, cual agentes inteligentes con habilidad para acomodarse a las dificultades planteadas, quizás, por el complejo obstáculo de permanecer cómodos a falta del espacio redentor, por todo impedidos de pasar a ser fetos normales. En un atisbo de virtual nostalgia, Emilse recuerda a sus padres, intentando descifrar si ella misma es un ser indómito como esas criaturas; que aun percibe como ajenos. Hasta ha llegado a conjeturar que serían seres provenientes de algún otro planeta. La duda que la carcome es saber si podría ser madre de un embarazo normal, ningún facultativo da cuenta de esta ambivalencia, además alguna vez hace mucho tiempo ya, hizo una consulta acerca de una posible gastroenteritis crónica, lo que pone de manifiesto la ignorancia sobre el tema, e indicando que seguramente ha tenido múltiples embarazos, acaso tantos como uno por cada período de la mujer.
216-Alfredo no encuentra la manera de hacer jugar al niño Pablo dentro de esas carpas inflables, que por lo general son económicas y por demás divertidas, con la entrada representada por cabeza de animal salvaje, con tobogán, y muy coloridas. Y cuando pide la colaboración de los padres adoptivos, prefieren los karting, la montaña rusa, o cualquier juego de riesgo, respondiendo de manera esquiva, evitando ahondar sobre el tema; la cuestión que no logra torcer el rumbo de los caprichos; pero hay uno que es de acrílico, que representa un laberinto, del cual consigue algún interés pasajero. Entonces antes optan por los juegos de terror en vez de estas carpas maravillosas. Por su lado, Emilse hubo conocido a alguien que sospecha podría ser un hijo, mira y ve en él una figura conocida, que bien podría haber divisado en los ojos de Alfredo. Tiene la arriesgada idea de entrar en un período de privación sexual, dejar pasar unos meses, duros por cierto, para ver que sucede al estar alejada del amor de pareja.
217-Lentamente Emilse va almacenando variada cantidad de razonamientos acerca de su realidad fisiológica, que dé a poco se amontonan formando un discurso comprensible, que luego se organiza a base de una cronología verás de los hechos, acerca de las diferentes etapas de la gestación de un hijo suyo. En un proceso mental que para ella es muy arduo, apelando a todos los mecanismos básicos, medios, y profundos de la mente, utilizando los sentidos con envidiable claridad meridiana y pura, que demanda una investigación científica, para así elaborar un conocimiento aproximado a la realidad que le toca vivir. Gracias a la percepción de los recuerdos, con la memoria activa como para aprehender el pasado, se va aproximando a una revelación de la verdad. Es todo un aprendizaje poder reconocer la realidad que en su caso es muy intrincada. Hoy día la sagrada Internet hace de la ignorancia una carencia relativa sujeta a la tenaz voluntad de doblegarla; pero en su favor, ni por las tapas, existe publicado nada, ni escrito, en video, o en secuencia de imágenes.
218- Referidos al coraje de transgredir lo establecido; Ella tiene la imagen, o un embrión de idea primaria, que se fue creando, desarrollando separadamente de los prejuicios, con gestación a fuerza de razonamiento lógico, fuera de todísima introspección egoísta o temor de enfrentar la realidad, de primeramente con amor quedar embarazada de nuevo; más luego de mucho coito capturar la criatura en cuestión, atrapándola en una especie de loca incubadora, con al frente un pene de juguete, invernadero capaz de imitar un útero genuino, posicionada justo al momento del traspaso de la criatura, de su vientre al interior del partener, quien sería reemplazado de inmediato por el susodicho aparato. Aunque debido a las tantas discrepancia por los temores que Alfredo demuestra, que no concuerdan con el afán de desafiar la realidad apremiante por encima de los valores morales, del dolor físico; a lo mejo le sea conveniente un desafío diferente trayendo un cómplice, capaz de asesinar si fuera necesario.
219-Por fortuna el clima familiero que impera en El Giño, isla del delta del Rio de la Plata Argentino, donde habitan amigos entrañables como Lionel, Cristina, y Pablito, más las largas visitas que realiza a sus propios padres, objetivamente aplaca bastante los deseos sexuales de Alfredo. El largo tiempo que hace que no intima con Emilse, de quien le resulta imposible crear una imagen sensual que lo erotice y con ello encontrar un consuelo en la autosatisfacción, lo cual, además, niega por propia voluntad; porque inclusive descarta por completo buscar persona que la reemplace. Dejando librado a los sueños, el hecho de amar a quien pinte en su imaginación, potenciado por el largo dormir profundo sin despertar por nada. Lapso interminable de tiempo sin tener relaciones con su amada esposa, hecho que percibe como un sacerdocio fiel de muchos años, donde sin quererlo empieza a mirar con la lívido puesta en el inconciente, desde maniquies en las vidrieras hasta niñas con guardapolvo.
220-En cambio Él no observa ninguna rareza en lo concerniente a las criaturas que pululan por el interior del vientre de su amada; hasta allanar la mirada de fantasmas. Cree que es producto del goce entre enamorados que avivan los resortes de la utopía de una dimensión diferente pero ligada a nuestro bello universo compuesto de galaxias. Un efecto de la química que desprenden los cuerpos por el motivo de copular con pasión y desenfreno, que encienden luces y crean formas provocadas por la grande energía producto del frenesí. Pero que son solo alucinaciones. Cree que se trata de un fenomeno de la persepción en cuanto la mente es capás de proyectar la fantasía afuera del cerebro con el poder de materializar los sentimientos. Que dichas criaturas exiten en cuanto el placer permanezca en estado de ebullición. Pero que luego de gozar se desvanecen. Que a pesar de tantas millas amando no han podido manejar la metafísica en favor de la pareja. La ignorancia en el poder al servicio del torpe error.
221-No salgo de mi asombro, he perdido un ojo por motivos foráneos, por luchas interiores que azotaron los temores del alma de mi señora, disparando los reflejos de las uñas como guadaña afilada. Trémula de pavor, alejada de mis propios intereses, todo el entuerto al divisar con catalejo empañados, por el vapor de los cuerpos, estrellita disfrazada de mendigo desfilando ajenas por la pupila del rostro. Con ello, para no arrancarme los cabellos de la bronca, la incrédula humanidad atesora como dicha la calma, la parcimonia; una fortuna para el afectado asumir la desgracia cual contratiempo. Por eso ando maldiciendo despreocupadamente, presumiendo que lo que falta en la cara es por lo bueno que irá a venir en adelante. El afrecho que ahora almaceno, ordenado lo voy distribuyendo bajo el manto de la súplica. Quiero torcer los mareos que van apareciendo, encorsetar la calma en el epicentro del equilibrio, donde la sed del flujo con el hambre de los besos, vayan a lograr percudir la acción del desmayo.
222- Tanto para mi como para el Emilse los días juntos eran una primavera eterna, nuestro cuerpos alegres, que tanto recorrimos con el olfato, con el aliento de los besos sacando lustre a los labios. Ella tan delicada con sus gestos, tuvo que arrancarme el corazón para estar tranquila. Ironía tener que desojar la flor para quedarnos con un pan bajo el brazo. Ella desconoce que descuida el tesoro frente al perro con rabia. Sería de relevante importancia detener la caída antes que reventarnos contra el suelo, el entorno se va llenando de impurezas raras que pueden llegar a ser cruel malaria. A lo largo de este sufrimiento loco, estoy conociendo la resistencia que tengo a las variedades que propone el dolor en el alma. Voy hacerle la propuesta de que vuelva jurando comenzar sin balance negro; impedir un nuevo retroceso u otro fracaso más unificado con la impotencia, debemos de una tratar de aunar las coincidencias para que surjan nuevas posibilidades; y entonces será indudable que la felicidad a regresado al mundo.
223-Es para mi prioritario solicitar al cielo darme suerte, que por favor bañe mi destino con un poco de esa cualidad de la dicha, imponiendo al camino los acontecimientos más positivos disponibles; alejando así la mala racha del perdedor, haciendo que la mujer que tanto amo desista de su negativa, pudiendo cambiar indeferencia por un simple acto de cordura, que logre que regrese al hogar, que con ansias la estoy esperando, lejos de querer aleccionarla, o interceder acusación por adulterio.
Fue muy estricto para mi tener que aceptar una imposición abrupta por motivos relativos, o tal vez inconexo con relación a los deberes contraídos. Voy acopiando recelo fascinante en cuanto barajo la posibilidad de transgredir la mente pacifista que por naturaleza ejerzo, y así sumergirme en acciones que no quisiera enumerar, pues lejos estoy de aspirar ser un asco. La mente debe guardar un espacio redentor en donde esconderse de los putos amaneramientos de mascullar odio al cohete.
224-Es preciso que vuelva a forjar esa figura de marfil, que cada piel tenga el premio del tramitar con la ceguera de la obstinación, incluso los sueños puedan viajar por la escasa preponderancia de los conflictos, haciendo del monocorde veneno de lo trivial que enceguece un color insistente que acapare la ilusión del triunfo; estoy clamoroso de acabar con el suelo escarpado por donde me arrastro. Es el paraíso sentirse erguido sin ayuda del orgullo, a puro coraje de cumplir los deberes sin necesidad de obedecer los preceptos. Que no deba ser, sino que sea, la lluvia aire y que las hojas derramadas formen una escarcha forestal encendida, por donde calcinar la pesadumbre propia de la melancolía. Que el tiempo eterno sobresalga del mundo timorato, sin muletas la latencia sería dura realidad si la suerte acomodara un premio debajo del acantilado imán que me solicita. Quiero amar lo que me pertenece, lo que con tanta dedicación he regado, lo que nadie cuestiona sino el egoísmo en son de dar pelea.
225-Desgracia, no me corras por la vida, tendría que trasladar la cama al lago para ahogarte cuando duermas, pero es que estás tan atenta que los huesos me has entumecido, vete de donde has venido y vuelve sobre el maldito usurero. Oh, brinca malaria sobre el aire enviciado, haste polvo de estrellas, que esparcida sobre el universo recalcitrante te verás preciosa. Vierto mi sangre por darte con lanza al corazón insignificante, vetusta maldición vestida de miriñaque. Tanto más avanzo en la cordura más odio siento por la injusticia que se impone omnipresente. Como nunca la infamia vuelve sus cualidades sobre mi presente de hombre truncado; la voz es un pato que llora la escasa fortuna, los pensamientos giran como la calesita al ritmo de las pastillas del depresivo. Mentira, que andas sobre mi ilustre cordura, dime, con tanto azote como iré a culminar con los muslos sosteniendo el esqueleto? Vete huyendo en deserción de lo cotidiano, que la gente atónita pregunta cuando he de regresar del sol.
226-No logro evitar recodarla y entonces el prestigio del músculo se yergue, sin aludir los latidos que embroman bastante; a favor del subsidio de la sangre puedo añadir juventud homogénea y destacar corpulencia suficiente. Paradójicamente habría que destronar la soledad y sustituirla por un mueble donde hacer bailar las reservas del hastío. Y así, la borrachera canta mansos cultivos del llanto acumulando chasquidos de niña. Necesitamos un vital espaldarazo del más allá, un enunciado que permeable, abra las puertas del cielo. Quiero ver a Emilse entrar sin maletas, con el cuerpo extendido, y como en una película en cámara lenta avanzar hasta encontrarnos en un abrazo afectuoso; como si nada hubiera ocurrido, más que sacar una buena nota en obediencia. Veo difuso, quiero aducir a los evangelios para sacar consuelo, con gesto adusto miro los reflejos en la ventana, no puedo hacer alarde de la castidad pues es algo que no deseo para nadie, pero como enredadera se ha montado hasta la coronilla.
227-Estoy estrecho de pensar en volver a lo cotidiano, pero insisto en resolver el entumecimiento en favor de la pujanza, siendo de nuevo un trabajador previsible, legítimo, con ánimo de prosperar, y adaptable a una conveniencia sana, con mérito suficiente como para regresar adonde estaba antes de la catástrofe sentimental. Una actitud elocuente presidida de un comportamiento sensato, que luego se instale en el acervo de la jornada. Dejar de atribuir a los demás cosas alejadas de la verdad, siendo que nadie me quiere agredir; terminar con eso. Abandonar este personaje de triste perseguido, dejar de transferir la culpa por mis fracasos al mundo que me rodea, incluyendo a los amigos y parientes. Mi querido Lionel, y Cristina, me alientan a seguir sociable pese a todo, que Emilse ha de volver en cualquier momento; que no solamente me ama a rabiar sino que también me idolatra. Y es tanto el escaso de noticias suyas, que presiento con patetismo que pronto ha de regresar a mi lado para quedarse por siempre.
228-Existe aun entre nosotros, una suerte de placebo sentimental a punto de quedar en el pico de los cuervos, un amor que se desmorona dentro de un incendio con llamas forestales; si es que ya no es puro escombro y montaña de cenizas de carbón. La pareja tiene que asumir que el espíritu también está compuesto por dos elementos importantes, pero si uno afloja, el ente queda como un globo con forma de pera, con el poder de en cualquier momento, al sufrir un traspié por motivos de la coyuntura maltrecha, tender a desinflarse por completo; solo el gran amor hace que todo ocurra lentamente. Al tiempo que uno esté frío, embotado por paradojas existenciales, y el otro, tonto, sumido en morboso carácter, con el truculento ánimo de acoplarse hasta lo inverosímil, tenemos que ambos factores provocan una eclosión de actitudes tan diferentes que irremediablemente desembocan en un caos perfecto, que solo la devoción por la natural armonía puede lograr quitar el amor de lo grotesca caricatura.
229- Resulta ser que Emilse está pudiendo conseguir no mantener relaciones sexuales, al alto costo de permanecer prácticamente en cuarentena, teniendo que alejarse del mundo para decantar de plano oportunidades de conocer hombres, que evidentemente por siempre se le presentan aunque se ponga un uniforme de plomo; inclusive más, en el hotel donde se aloja debe espantar las ofertas amorosas cual si fueran moscas en la letrina. Pero ocurre que luego del último episodio abortivo, con aquella menstruación efímera y raquítica, luego del genial enroque, ha pasado la nueva fecha estimativa del período, cuestión que por el momento no es de extrañar, entrando ya en la etapa de atraso. Lo que en cierta medida le alienta el ánimo, herido por el deseo, de continuar pese a todo con la castidad programada. Ha fundido las comezones tomando sol en la terraza, con la ausencia programada de fantasías eróticas, ayudada por los auriculares haciendo sonar música al tope del volumen, y claro, tratando de no repensar en nada, percibir el presente como única cosa posible. Al marido lo extraña pero prefiere optar por ganarle la apuesta al destino.
230-Emilse cepilla sus cabellos, un millón de alambres en forma de tirabuzón, que de a poco irán quedando estirados; rutina que practica con empecinamiento, pensando que irá hacer de su vida antes de ser una fugitiva consumada; donde en los tirones con el cepillo expía culpas y remordimiento. Pero cuando Ella está por decir algo a la imagen que le devuelve el espejo, de repente, un ser de avanzada edad, varón, se instala en uno de sus ojos. Enloquecida, con prisa, torpe y estupefacta, comienza a sacar cuentas, a opinar que sin duda han quedado resabios latentes allí guardados por mucho tiempo, huellas adheridas de la relación última. Una locura de la naturaleza, o simplemente una fábrica de hadas y duendes. Y con ello, resuelve regresar con el marido, a desgano, dudando, para recomenzar una maratón interminable de sexo explícito. Y así, sentada en posición de cenicienta, al divisar un bastón de policía que ha quedado olvidado, comienza a fluirle la idea de utilizar el hallazgo y sacar al crío a los cachiporrazos.
231-Mientras Alfredo, por insistente pedido de amigos del círculo íntimos, compañeros de trabajo, y demás congéneres, a modo de rehabilitación, mira mujeres bonitas; e insistente ensaya, a veces lo consigue con éxito, pronunciar piropos o frases ocurrentes; en el fondo sabe que sin mucho irá a conseguir lo que pretenda. Fuera de querer cosificar, creándose en él una cultura nueva de analizar la belleza pura; dándose cuenta pues, que gran parte del amor que profesa por su esposa se debe a los kilates; y que si no la busca pederá la silla española. Por su lado, Emilse, habiendo decidido mudar de hospedaje, ya en el hall antes de retirarse, mantiene una extraña charla con un botones del lugar, un mulato de buen talante, muy galante y dicharachero, donde entre otras chanzas, le asegura tener más de doscientos años, que ha perdido la cuenta, pero que pese a todo, en alusión a Emilse, con pasión haría de la mujer más bella que dios haya puesto en el camino su legítima esposa. Y Ella lo besa, y le da una propina.
232-Será muy arduo saber como irán a resolver el conflicto de pareja, porque insisten en escribir hechos nuevos, significativos, e imborrables, sobre el lienzo de la historieta. Son como fuegos artificiales al servicio del año nuevo. Emilse antes de conocer al marido hubo tenido muy poca experiencia con hombres (Aun desconoce los métodos básicos de la profilaxis) un besuqueo con un amigo de la infancia, picos cuasi de lengua; y un amor fallido, en un encuentro viciado de nulidad, con un joven, quien no supo como manejar los piolines de la marioneta. Para al final terminar de novia con Alfredo, fiel hasta esta situación de descalabro en la que están inmersos. Pero ahora el hostigamiento que provoca el choque de orgullos encontrados corroe la paz del vínculo, siendo preciso serenar bastante la arrogancia para no ser avasallados por la personalidad; y que cada uno pueda vislumbrar al fondo del túnel un motivo de esperanza. Para Ella significa el comienzo desde lo perimido; para Alfredo un angustiante letargo.
233-Haría falta un llamado redentor al hogar que tanto la requiere, ahí estaría en falta grave plausible de tarjeta roja, lo sabe, acaso la gran infracción del partido; está muy empecinada en ser Emilse, pero teme tener que prostituir el cuerpo y así seguir acumulando embarazos. Su flamante psiquis tiene el trauma de al sentar la cola en el inodoro quedar en cinta; con esto no se hace complicado comprender el aprecio por la nueva libertad; siempre dentro de un marco legal y estándar. Además es preciso zafar de lo riesgoso ya, con un álgido remanso en lo perecedero; soledad, tres o cuatro menstruaciones consecutivas; y a lo mejor así pueda acentuar ésta sensación de agrado, quebrando la barrera hermética de sombras monstruosas, coloso de una oscuridad que al momento le impide valorar lo propio. Tanto mundillo de parejas separadas, sin pena por los hijos que apilan. Montón de trámites de divorcio en los sabios tribunales, que con ello sobra para hacer lo que el corazón indique; por que el matrimonio es sagrado y con ello alcanza.
234-Alfredo tiene resistencia verbal, agravada por el orgullo, en aclarar que ha tocado fondo, que no tiene dinero, posibilidades económicas de solventar los gasto de tanto traslado en el Galileo; invitando a sus nuevos amigos a pernoctar en el departamento.
En cambio Lionel, amenaza con volver a nado, encontrándose reacio a quedarse pues necesita regresar por alimentar mascotas y gallinas. El filo de la historia es la senda por donde se camina. Ahora son las diescisiete de una tarde complicada para asumir grandes decisiones náuticas; tal vez si fuera un día radiante, con tres horas y media de luz antes que empiece a oscurecer, podría ser potable, pero por el contrario está muy nublado; es extenso el delta y por fortuna la isla El Guiño queda relativamente cercana del continente, entonces al capitán Gibaudo no le queda más que solicitar un solvento de carácter económico, en efectivo, que deberán destinar para poner combustible; una vergüenza muy grande pues al momento la casa invitaba.
235-No existe algo tan hermoso como el anochecer en el rio, sin embargo, hoy es el escenario perfecto para una película de terror. El viento que no se decide como soplar, el cielo que pesa como urticaria, el agua del primer tramo contaminada, verdosa con puntos negros seguidos de aureolas amarillas, además como con intenciones, de rasgos inteligente, deseando envolver la lancha y hundirla. Están callados, el niño Pablo balbucea sílabas a plena conciencia de saberse desubicado. El motor que golpea válvulas otorga poco crédito a los oídos del capitán, que de tan sensible, concentrado en la tarea específica, ha olvidado el idioma natal. Lionel y Cristina sentados en el banco de popa disfrutan los pocos minutos de claridad mirando sauces llorones y hortencias. Las olas se deslizan vivaces por las empalizadas de quebracho, o bien se montan sobre las entradas como ilustres visitantes. Se divisa en el horizonte la cola de un tornado. Una garúa sin gracia se torna en lluvia espesa, la alegría en alarmante preocupación.
236-Desde la amarra a la desembocadura del arrollo iban bien, aceptable, hasta que enseguida de atravesar un banco, dándose golpes con troncos hundidos, el Galileo II encalló. La poquísima claridad que había terminó por consumirse en segundos. Alfredo desciende a querer empujar la embarcación, tarea infructuosa sin alguien que ayude con el motor como opción fundamental. Con un hecho negativo agregado de comprobar que la hélice tiene un trozo de algo enrollado en el eje, entonces sube por un elemento cortante, y para darle instrucción precisa a Lionel, de mover con fe la nave, cuando él lo indique. Con solo accionar una palanca, sin necesidad de ningún pedal que embrague, es suficiente. Así fue que al volver al rio, cuando está lidiando con la soga, el niño Pablo jugando acciona el botón de encendido, haciendo girar el motor, con la mala suerte de volarle al padre el dedo meñique de la mano derecha. No obstante al no sentir dolor y ver que wno sangra, pudieron zafar del atolladero.
237-Al observar que no sangra el agujero, prefiere callar el suceso antes que sembrar el pánico. Segundo accidente grave en lo que va del año, producto de errores que parecen castigos divino, quizá augurio de fatalidad perpetua. No obstante por la fuerte tormenta nadie logra ver más allá de sus narices. Promediando la travesía son abordados por un grupo pequeño de jóvenes armados, que toman la tripulación de rehén, desviando la trayectoria hacia el lado norte, opuesto al que viajaban, internándose en el rio Frede; donde finalmente desembarcan en una quinta plantada de frutales. Los invasores se presentan como una organización terrorista, con el objetivo de poner alarma al conjunto social, al que consideran enfermo de esquizofrenia, así pudiendo empeorar el pronóstico, consecuencia del accionar imperialista, que pertinaz va queriendo suplantar las costumbres por otras más adheridas al consumo. Instalados en el aposento son encomiados a tener paciencia, negar cualquier intento de fuga y abrir la mente al nuevo orden.
238-Como característica grupal, los integrantes son de variada edad. De niños a ancianos, tan consustanciados que parecen clones. Están armados con elementos modernos e importantes, automáticos. La líder principal, de temperamento aguerrido y fluida retórica; reconoce que es de aceptar que la tecnología mundial hubo sufrido un salto cualitativo importante, pero con un costo de Argentinos muertos que es espeluznante, imposible de perdonar; militantes desaparecidos que tenían todo por dar de buen grado. Y por ello, el imperialismo bastardo, encarnado en la dictadura militar última, tuvo como objetivo destruir un modo de vida, anticuado, socialista, campechano, por otro de mayor apego al consumo, de objetos nuevos que generan vicio, dependencia; y que requieren de dedicación, las actualizaciones permanentes que se traducen en dinero fresco. Y así es que fueron eliminados de un plumazo clubes barriales, sociedades de fomento; reemplazados por bingos, shopping, computadoras y teléfonos.
239-Alfredo trata de hacer entender que nada tiene que ver con los militares genocidas, que por favor los dejen ir; pero la jefe, intenta explicar el motivo del cautiverio. El mercado de la droga es un desvío del capital, de la economía oficialista hacia otros mercados marginales, y es por ello que prefieren que la juventud se vuelque hacia el alcohol y los remedios de farmacia, o un coctel de ambos, para así dejar el circulante girando en la elipse primera y capitalista, pues todo redunda en juntar dinero para pagar a la banca imperial el permanente endeudamiento. Este mercado en auge deberá absorber cantidad de puestos de trabajo, creándose una sociedad ideal sin desocupados. Con una cultura de la comunicación entre celulares, que permite al aparato represivo, delegar a manos de los delincuentes cómplices el trabajo sucio típico; pudiendo operar a la luz del amparo, sorteando juicios por lesa humanidad. El primero de los atentados será cazar ladrones encapuchados y ejecutarlos ante la mirada del mundo.
240-A la pregunta de Lionel, de si el mecanismo perverso no es un concatenado de casualidades que evidencian como resultado un sistema plagado de imperfecciones, la respuesta es: Lo hacen a sabiendas, con intención, intentando enmendar las imperfecciones del sistema; sin importar el sufrimiento del pueblo, al que tildan de ave de paso; operan a plena conciencia del daño que provocan, sin importar el dolor que inflingen. Los castigo grupales a gente en las escuelas, por características diferentes, o simplemente al azar, son el fiel reflejo de como se maneja el destino del hombre común, aplicando prácticas de destierro, ostracismo procaz, con la vil anuencia del bastardo, sin voto popular, sino con el dedo de las bestias sanguinarias e indeseables. Porque los griegos, creadores exclusivos de los valores establecidos, explotaron las virtudes de la mente hasta donde les dio la capacidad, más luego, sintieron que cual pozo de petróleo ya no había resultados materiales de los pensamientos, y orondos se volcaron al turismo.
241-Cristina ceba mate y escucha: La impronta del imperialismo paternalista es siempre la misma actitud protectora dedicada solamente para el sujeto que acepta las reglas, caso contrario surge un fastidio selectivo, enseguida aplicando castigo cruel, desproporcionado, contrario a la normativa jurídica. Habiendo en el gobierno, no solo el poder de un país soberano, sino riestras o conjunto de ellos, subordinado a los más fuertes; con un rostro condescendiente, afectivo, que persistirá en tanto sea aceptado el modelo de franca superioridad. Haciendo subordinar la cultura a historias trastocadas y falaces, que los inventos, descubrimientos trascendentales, le pertenecen, o bien los avances científicos que favorece al conjunto; cuando fueron ellos los que omitieron a ciento de miles sublimes creadores, previamente ultrajados, que hubieron muerto en la indigencia, en la picota, en el anonimato cruel, siendo desposeídos de sus inventos, en favor de testaferros viles puestos como parches en reemplazo del original.
242-Y nos obligan adorar a quienes poco menos que el diablo se hacen presente en su nombre, con costumbres de porquería que invaden la realidad mundana intoxicando la belleza natural. Pero nosotros con un programa exhaustivo al servicio del necesitado, debemos hacer notar la falla negativa que nos relega como simple desecho; debiendo asimilar el modelo económico que trata con la fuerza de una fusta de espinas asignar a cada parte de la economía un rótulo legal para que el circulante dinero quede en la caja del patriota oligarca. Tenemos la obligación de elevar la moral hasta un estado de autonomía contemplativa, haciendo aceptar otras opciones nacientes que recién comienzan; con el peso de las dificultades y la oposición del cómodo invasor que conservador defiende a ultranza la economía vigente. Y sin temor a morir, ver en las naciones poderosas, potencias que pueden dejar de serlo en tanto persigan objetivos degradantes, muy inferiores a lo básico deseado, y nos tengan predispuestos a dar lucha y batalla.
243- Hoy día se toma la mamadera con alcohol y ribotril como suplemento vitamínico de la leche. Alfredo sufre al ver que Pablo juega con las ametralladoras sin que nadie repare en el hecho. El Galileo II es el calabozo donde los prisioneros están alojados, con custodia permanente, pero con la libertad de poder, sin previa autorización, circular por el predio. Ha desaparecido la tormenta aunque la fea humedad es avasallante. Están en los albores de un nuevo año y el clima que predomina es de espera sintiéndose al tiempo como un algo estanco. El calor hace reflexionar al líder mujer acerca del recalentamiento global, auguriando que cuando se derritan los glaciares y el fresco que proviene de estas reservas comience a escasear, será imprescindible para los pueblo que habitan en lugares cálidos emigrar, invadiendo otros países, y entonces habrá mucha guerra en el mundo, con cero posibilidad de retorno. Para el montón de bosta que significa el imperialismo para nosotros habrán de continuar los atentados en marcha.
244-Emilse llena de pensamientos eróticos la cabeza del marido; pero ésta circunstancia especial de adoctrinamiento en política por la que atraviesa Alfredo, le estaría súper grabando una larga enciclopedia de máximas en la materia. Por la sola idea que persiste, de ser obligado a participar en la ejecución de personas, se le activa un miedo exponencial en el cerebro, cual si fuera adobo picante para escabeche de vizcacha, situación neuronal que lo incentiva a tener que encontrar respuesta verbal a cada oración que imagina. Ha escuchado en el campamento, que luego de ejecutar un delincuente ante las cámaras, en el obelisco, previo drástico castigo, habrían de hacer estallar una bomba, y así mezclar los gritos de piedad con los aplausos de aprobación, en una escena dantesca propia de un película de terror. Sería un video de otros que desean acumular antes de desaparecer como célula; y con el crédito en aumento reclutar nuevos miembros, sin necesidad de tener que otorgar currículum vitae.
245- Alfredo ve en la líder del grupo la fiel imagen de Úrsula, e inclusive para sus adentros la denomina de esa manera, hasta teme que conversando se le escape el apodo. Es la primera vez que se debate entre preguntas, sobre que es, donde empieza o termina, el afamado dúo del bien o el mal. Le ha dicho al niño Pablo que el meñique que falta, ha sido por castigo de tocar las armas largas cargadas, que por favor se porte bien y no vaya por este camino. Con relación al mapa del delta, la única solución que vislumbra para una fuga con éxito, sería buceando varios kilómetros… Pero de donde sacar tanto aire. Sabe que en el trabajo lo aman y bancan a morir, que actualmente lo consideran un ser que desvaría por amor, a la caza de un fugitivo que huye por su culpa; y que sus padres y amigos, más o menos, piensan lo mismo, o sea que es imposible que alguien del entorno sospeche algo fuera de estos parámetros, y por más que pasen mil años seguirán en la misma postura. Es un tipo atrapado a su imagen de hombre libre.
246- Cristina ceba mate con yerba lavada, ha propósito, para reír en silencio; le divierte mucho observar como al rato los soldados combatientes de un sorbo acaban con el líquido del recipiente. Alfredo, de pensamiento moderado, no cree que las ideologías vayan a resolver nada, todo lo contrario, que las férreas acciones provocaran férreas reacciones, más no existiendo un lugar para las proporciones, en esa tempestad nada será previsible; arrojar un chasco de olor puede tener como respuesta la fiel bomba de neutrones. Y entonces se cuenta la historia del odio, un lodazal que trae aparejado un resentimiento tridimensional, que asesta respuestas que son reflejos de la ira, un quinto elemento que se antepone al orgullo mancillado; para lo cual nadie queda exento de sufrir y hacer estragos, siendo el factor común el dolor atroz, la discriminación étnica, la antinomia hasta en las antípodas. Un gran esfuerzo extra sensorial, con la inteligencia desplazada al medio de un ritual, donde lo esencial es la fuerza bruta.
247-Lionel a dado una señal inequívoca de aprobación por los atentados venideros, se ha convencido, o quizás sus dichos sean parte de una estratagema para seguir con vida. Ha sugerido, aportando ideas acerca de participar en el evento como señuelo para la caza de chorros engrupidos, delincuentes orgullosos de hacer daño, sin vuelta atrás reclutarse al movimiento desde ahora y para siempre; dejando en Cristina la decisión personal de hacer lo que mejor le plazca. La acción terrorista es endeble en franca relación con la moral, reconoce, pero en cambio regula el modelo político hacia un transcurso correcto, porque la artificial bonomia del suculento presupuesto debe volcarse a la protección merecida del ciudadano, debiendo cancelar proyectos de vil propaganda; cuando se construye algo con el dinero del pueblo es un éxito del conjunto y no un favor del gobierno; este dinero que se vuelca a la seguridad, que se prescribe con decretos de necesidad y urgencia, también involucra a la delincuencia represiva.
248-Estoy muy agotado de pensar en revoluciones industriales, dominación por medio de la coerción, imperialismos de diferentes zonas, aúno la calentura fisiológica con la bronca en razón de la política, barajando un estado de excitación exclusivo para un tipo acongojado; y por sobre toda erección leve, evito escuchar la ordenada descripción de instrucciones para el venidero atentado, del cual he de ser participe. Son una bandada de gorriones que no sienten dolor en la despedida, pavoneando que el mundo irá a cambiar por ellos sin padecer congoja. Cuando uno cree que lo puede todo, siendo tan pequeños que no tienen medida, es un intervalo inútil de tiempo como la menopausia. Y las cosas pasan y suceden pues algo debe ocurrir; entonces es bueno acoplarse bien con la expansión de otras civilizaciones elevadas, que llegan para que el nivel de vida de nuestra cultura, que sucumbe por los traumas del atraso, se optimice; incluso con la salvadora estadía permanente, y explotación de los recursos naturales.
249-Con ánimo adscripto al desafío de escapar, puedo evadir los controles, para salir por un senderito hacia una propiedad vecina, más luego de cruzar un riacho, agitado llego a un lugar apartado del campamento. Tal vez sea un poco exagerado asegurar que los otros rehenes sean en verdad mis amigos, pero la sola idea del abandono me resulta muy perturbadora; aunque huyendo cabría la posibilidad de establecer una denuncia ahora mismo, de donde además evitaría la matanza de inocentes desprevenidos. Pero aun teniendo toda la sensación de haber logrado escapar, con alegría póstuma e intuición definitiva, y una sonrisa instaurada que me ensancha la cara hasta las orejas, hago una sensata reflexión de las consecuencias nefastas posteriores, y mejor asumo con prontitud la decisión de regresar; con la certeza que ha quedado la basta experiencia como aprendizaje para otro intento futuro. La imposición es una cruz sin resurrección, pero el imperialismo es un apósito curativo que calienta como una bufanda.
250-Úrsula, distraída en un discurso hacia el destacamento, no advierte la ausencia de Alfredo: ¡Abogan por la libertad del individuo, dentro de un marco de libre comercio, pero soslayan la legalidad de los principios básicos, golpeando a la sociedad con apremios, torturas; anestesiando al pueblo deprimido con la droga número uno que resulta ser el maldito alcohol! Entonces la pregunta que cabe es: ¿De que condiciones de igualdad para encarar la vida hablan? Si luego de ser torturado o avasallado moralmente, nadie puede estar apto para comprar ni vender nada. Y así es que con la destrucción de la cultura del lugar los pueblos sometidos deben concluir con el bagaje histórico propio, que es la enorme manera peculiar de entender el presente como una vertiente de acción genuina. Los conflictos que se generan por motivo de la expansión imperialista, con represión civil de la detestable fuerza militar, provocan un colapso que significa un choque doloroso, la deflagración de las etnias, y demás etcéteras.
251-Escucho, más cual ventrílocuo respondo con el vientre para mis adentros, pensado que esta serie discursiva para inculcar conceptos avinagrados son un aplazo al hecho de estar vivo; que deberían agradecer la felicidad inherente del sano destino en vez de maldecir la creación del cielo, que así ralentizan la alegría con ostensible frecuencia. Lo autóctono de cada pueblo es un esbozo sustancial pero sujeto a cambios que provienen del exterior, que la cultura se hace a fuerza de forjar el embrión primitivo u original, pues nadie en el universo nuestro está, estuvo, o estará, exento de conquista del extranjero, todos, en mayor o menor medida, hemos sido varias veces dominados, así debiendo asimilar otros valores; pretender mantener lo puro es una imbécil imposición regresiva. Y sin sentir vergüenza, ellos solos tendrían que reconocer, que el continuo auge del imperialismo es cada vez tan superador, que le es necesario emparejar la evolución instaurando diferentes puntos de hegemonía donde volcar los nuevos avances.
252-No alcanzo tener tantas herramientas en el sano juicio de la ideología política como para saber que opinar feacientemente, hago incapie sobre un banco de información básica, que son mis escasos conocimientos sobre cifras de la economía mundial; o sobre los impulsos que hacen a esos resortes encoger para luego empujar para adelante, pues muchas veces lo que aseguro saber luego difiere con la cátedra. Suerte que mis pensamientos no se escuchan pues sino hace rato estaría retozando sobre la hoguera; no obstante deben emerger de la cabeza respuestas sabias con el atributo de ser interesantes para así poder convencer al oponente. Mi mente es un péndulo ávido de dar con la verdad más próxima a los sentimientos y convicciones. Pero por desgracia, las pocas imágenes conceptuales valederas que se posan sobre mi lengua, carecen de un subsidio de saliva suficiente para emerger sin trabas. Y así van sobrando los remordimientos, porque la verdad es abstracta, un cono de luz titilante y escurridizo.
253-Tengo arancelado los recuerdos, a quienes azoto con cruel indulgencia en busca de ingenio potente. Pienso que debería robustecer el ánimo con un poco de optimismo, pero llevo al frente la visión en copas, que condiciona la razón en tanto su actitud es poco prometedora, ineficiente. Y encima el carácter dispar que debería acomodarse al griterío del subconsciente, que claro reclama apoyo para una exposición sin disgregaciones. Desvanezco por un discurso hermético que me irrita e intimida, haciéndome nacer argumentos que finalmente no son del todo el fiel reflejo de mi convicciones. Estoy a un paso de ser infeliz y ahora lisiado a escasos milímetros de la burla, mal podría ser yo un imperialista sin sitio para la tumba. Cada uno de los sistemas económicos tiene sus características propias, es el éxito lo que establece la verdad del modelo en boga. Bajo un gobierno liberal se nos hace conveniente ajustar el bolsillo a las pretensiones del sistema hasta ver elevar el nivel y la calidad de vida.
254-Pienso pero callo, temo que mi discurso no revierta en el bienestar del grupo; el primerísimo factor de desequilibrio es la fuerza de la razón. Se me hace imposible abarcar con palabras ociosas una teoría rimbombante en connivencia con la genialidad, exenta de crítica justificada y mordaz. La razón afinada, pero con oscilaciones dubitantes, hace relativo un discurso que insinúe establecer por decreto la igualdad de clases; además merma el entusiasmo equiparar para abajo como gran alternativa de un hecho revolucionario. Ideas que llevan intrínseco que sea válido que el pobre reclame mejor remuneración, pues resulta imposible que todos nademos en la abundancia. Necesito manejar premisas acertadas para así entretejer un discurso convincente, que vaya enumerando cada uno de los ítems acerca de la realidad que pretendemos describir, en correlación exacta con conclusiones eficientes, como para poner en práctica social, y exponer análisis de nuevas verdades sin temor de caer en un remolino terminal.
255-Úrsula reúne al ejercito, y nosotros al pie de la casilla, vemos como desde la terraza la joven gatillar un arma sin balas. Agrega que los imperialista hacen mandar a los ladrones a meterse en las casas para torturar a los habitantes, y así decir el escondite donde atesoran los ahorros. Prefieren aporrear a la gente para que gasten en productos de las multinacionales, o electrodomésticos de los monopolios, antes que vayan esconder el dinero en los colchones; busquen algún militar que en tantos años de inseguridad halla sido asaltado y no encontrarán ninguno. Pero detiene la arenga al ver una lancha aproximándose hacia el improvisado destacamento; con ello volviendo a recargar el fusil, pero ahora enserio con balas con pólvora. Pero justo cuando estoy por animarme a replicar con el discurso que estoy entretejiendo en los pensamientos, para alta felicidad del ojo sano y la acción de la mirada, puedo ver a Emilse llegando en un barco taxi. Debemos de partir de la base que los hombres aspiran izar la moral al tope de un mundo perfecto.
256-Tras meses de espera por fin llega la persona, que con avidez proclamé con súplica en mis plegarias su presencia. Es en verdad, cualquiera sean sus intenciones a futuro, un momento inoportuno, donde paradójicamente redundando en mi beneficio ha de quedar cautiva conmigo; más luego vaya a saber donde iremos a terminar esta febril historia. Siempre fui un votante tirado al centro, que ahora, urgido por los pronósticos de fatalidad, los intereses del imperialismo defiendo, cuando tantas veces maldecí a ultranza. Pero así estoy sintiéndome cómodo, razonando en favor de la libertad individual por sobre cualquier otro principio en favor de la pobreza. Debiendo remarcar que las civilizaciones prosperan gracias al estudio terciario y la preparación universitaria, que hacen desplegar el aletargado conocimiento sobre la mesa del debate. Sería impropio que marcianos vengan a decirnos ha como gobernar. Quiero remarcar bien, que de ser preciso, voy a solicitar coperar en la educación de la célula, cambio de amar a mi señora.
257-Mi cuerpo, sin escrúpulo, entre olitas que el viento alojado en la atmósfera dibuja, estalla en remordimientos del pasado errático, que el sabio organismo metaboliza, transformando la inteligencia política avivada por el apremio, en puro instinto de animal primitivo. Mi bondad en pugna se precipita hacia el sexo abismal con gula, por el músculo duro espantando los pecados. Sin equidad quiero la carne de Emilse cruda, con la asignación de los aditamentos de una catrera y ungüento, y en un largo deglutir de sus piernas, voy a ser el emperador de las macanas, hasta consumir la dieta de mil mordiscos. Mi poder adquisitivo está en la cantidad de ternura que barajo, ya no tengo lugar para tantos pobres pelícanos bajo del vientre, ni pensiones para los comillos desafilados. Si acaso recibiera una asignación por cada suspiro malogrado que hube tenido, sería el lanchero más rico del planeta. Soy un cocoliche de predicador liberal con vías a fornicar delante del comité de guerrillero totalitario.
258-La sorpresa es un freno alternativo que se activa cuando sucede un imprevisto, un llamado de atención para los reflejos distraídos e incrédulos; un factor muy útil que requiere de gran agilidad para un acomodamiento, y posterior retomar por la senda predilecta. Los despostas hacen alarde de las bondades ciertas del movimiento establecido de antemano, explotando a destajo la capacidad del régimen opresor sin hacer participar a los factores del imprevisto, motivados por la riqueza que deviene producto de la explotación desalmada, dándole a destajo profundo en la sola dirección del objetivo de sojuzgamiento; dejando para el final del proceso la triste sorpresa que deviene de ser avasallados por los ejércitos de liberación. Nunca es tarde para empezar renovado luego de recapacitar bajo el resguardo mordaz de la conciencia, porque el insensato tiene un techo donde acaba pronto, mientras que el prudente va sorteando las vicisitudes y los contratiempos con la tranquilidad que depara la virtud de amansar el tiempo.
259-A la gran sorpresa de lo que suponía iba a ser, habría que atribuir una enorme decepción por lo que resulta ser, cuestión que me deja totalmente deshecho, una sorpresa que es algo muy desopilante, aunque también un intervalo horrible a futuro; de lo jocoso de pensar en un bello reencuentro amoroso, ahora debo descifrar el mensaje del cielo que me propone un embate que sin duda es un castigo terrenal. Provoca alegría ver lo que veo, pero resulta tan diferente a lo que esperaba experimentar que quedo tendido boca arriba en medio de la panamericana. No hay nada que hacer, tengo los rasgos de un fugitivo, y estoy subordinado a tener que copular el siglo venidero. La que atraca al muelle no es Emilse, sino su madre, mi suegra: Doña Olga, el segundo nombre no lo recuerdo, Torijo, recientemente viuda de Manuel Lucio Gallego. Esto que pasa en el cuartel general es como jugar al metegol con el molinete permitido, o ser el llavero de Úrsula haciendo que se enrosque en el índice.
260-Mi suegra es un complemento existencial que ayuda a encubrir el amor exclusivo que siento por mi madre; un amor extenso que nunca termina. Es innegable que el parecido con Emilse es importante. Tiendo a tratarla como a una amiga sin olvidar jamás que somos familia. Sinceramente me siento un chozno a su lado pues me cuesta articular palabras salidas de los intereses familiares. Hoy tenemos en común que ambos estamos sin la otra mitad de la naranja, aunque lo de ella es peor pues intercede la muerte, una ausencia para nunca más verse, donde le cabe la difícil figura de viuda. En cambio yo a su hija la puedo llegar a recuperar y seguir siendo el marido. Ella, investigando para encontrar a Emilse, ha dado con este cuartel, inóspito lugar de donde cuando quite el pie de la embarcación pública, le será imposible quedar en libertad de acción, sumando la presencia a la lista general de rehenes. No existirá vademecum que tenga el calmante para sacarla del sitio contiguo a la locura total.
261-Mi suegra Olga, al abandonar la lancha se acerca apresurada a estrecharse en bienvenida, y al verme predispuesto al desafío de querer enfrentarla, sin reparar en el tétrico entorno, un abrazo trivial consolidamos; algo tenso, como articulado en segmentos, lejos de adversidades al servicio al basto cariño; pero por ser tan extenso y duradero, quedando como implícito que algo malo está pasando. De ánimo filoso, lacónica, pregunta si su hija aun vive; debiendo, sin escamotear o esquivar explicación, contar lo que sucede. Entonces amaga querer regresar al taxi, siendo retenida por los soldados, dándose cuenta de su condición de secuestrada. Al instante la hicieron sentar en una reposera, con un perro atado al respaldo. El can es manso, lo llaman Onganía; pero si por tal cosa ella al momento de pasar una lancha saca el traste del asiento, éste arrastrará el aposento hasta la orilla; así debiendo permanecer sentada hasta que Úrsula imparta orden o disponga lo contrario. De ama de casa a esclava en casa ajena.
262- Si bien podemos darnos buena cuenta, cuan importante es la especie humana con relación al resto de los mortales, de pronto nos pasa que los hombres nos encontramos enfrentados a severas carencias en relación a la supervivencia, mientras otros lo más piolas nadan en la abundancia. La necesaria política tiene un desarrollo más lento con relación a las otras ciencias, y ni hablar de la tecnología. Dicho factor desequilibrante da como resultado, que muchísimas personas vivan en condiciones desopilantes. En condiciones de extrema pobreza las sensaciones del cuerpo son el valor de cambio como para saldar deudas por lo que se consume. El dolor es la sensación predilecta para los castigos. Digo palabras que todos escuchan azorados. Es como si mis dichos un poco los excitara. Úrsula, con Pablo en los brazos, se muestra muy dócil y alegre. Los demás revolucionarios apartan las armas de si. A mi suegra le cuesta entender que deberá estar hasta después de los atentados; aun ignora que ella también deberá matar y morir.
263- También es bueno saber que no todo es maledicencia en el grupo Renacer. Amarra al mulle una lancha flete, y desembarca un conjunto de muebles, entre ellos una cama de tipo sommier. Olga mira ilusionada pensando que han de ser para ella, pero si bien su exceso de peso es apenas un barniz intenso, resulta exagerado que sea de dos plazas. Por mi parte, mi hedonismo se esfumó con la orina. Hay bombas metidas en el galpón, pólvora que no supera mi calentura genital. Olga tartamudea que parece un telégrafo, seguro que merece una sanción por hacer tantas preguntas en oraciones disyuntivas, con escaso predicados y mucho énfasis. Liones y familia habrán de descansar en el cuartel general. En cambio han estipulado que con Olga iremos a dormir en la misma habitación; pero a decir verdad, no veo que pongan una cama extra. Solo espero que no elucubren la idea desopilante que pernoctemos juntos, pues de ser así dormiré en el piso con Onganía.
264- Me siento alineado con no derivar la fantasía para el lado de plasmar conclusiones novelescas. De momento no tengo otra misión que la de ser un hombre bomba, sin noción de cuando intuyo que pronto, antes que Pablo haga estallar el galpón de la pólvora. Los revolucionarios ponen empeño en armar el cuarto, al que han bautizado de nido. Impera un clima de sátira, que se disipa cuando Úrsula asume el mando de las acciones. Es evidente que existe un asedio; haciendo que piense que aparte de vivir políticamente equivocados, abyectos, se divierten con cualquier cosa al alcance de la simpatía. Sería hipócrita si hiciera interferir un temor inexistente, entonces prefiero mantenerme incrédulo y aceptar lo que venga antes que empeorar las condiciones. Se nos hace evidente que harán que tengamos que dormir juntos; y aunque sea un situación algo desfavorable, de común acuerdo, sin interceder terquedad, aceptaremos las reglas; iremos a obedecer la imposición faltos de extirpar la calma momentánea con filosa mufa.
265-Con Olga acordamos hacer el amor en serio, pues no queda otro remedio mejor que soltar amarras con el barco entre gladiolos. Ella me dobla en edad pero yo la triplico en afrecho. Haremos de cuenta que estoy socorriendo a un automovilista y empujaré el rodado hasta que arranque. Antes de entrar aquí hemos visto a dos soldados teniendo sexo arriba de un sauce; siendo tanto grande el escalofrío es que pensamos que nuestro desvío es un camino bien pensado, casi correcto. Ella me besa la frente, como madre que permite adosarse a su figura. Optamos por una compasión directa sin ahondar en disturbio. Ancla su liviandad una nube desgraciada en el firmamento de la familia, siendo que ahora se entrecruzan alas como extremidades desarticuladas. Dejo culminar al cuerpo hasta encontrar un esbozo del antaño. Las pieles son dos cartones en un telar de seda, haciendo formar una toga. Las caridades se disimulan simulando puñales inocentes. Es una noche de calabozo antes de partir al cadalso que conduce a la morgue.
266-Al día siguiente del primer día, nos hubieron obligado a permanecer encerrados en la habitación, y aquí estamos, entre pintitas, casi acostumbrados como lazarillos, al sabor del mal genio y la amargura del tropezar por la culpa del rengo. Olga se parece tanto a Emilse que me voy sintiendo un viejo, al tacto del rostro los años pasan como el agua por el rocío. Cada momento es una visita guiada al corazón de una fogata. La mañana impávida está en nosotros, subyacen los pobres gemidos; por la educación y el peligro en cierne. Alguna vez llevaba del emblemático músculo la cuenta de los latidos y el espesor del sonido grave, para ahora verme mudo y agazapado al son de una presa tierna como dichosa mujer apetecible. Debo recolectar tábanos con la lengua salida, condicionando por el remordimiento del decir ajeno. Mi suegra es como una frazada esparcida en el regazo, donde el yerno vigoroso le forma una plataforma para la muerte, que ella no desperdicia en idas, permanencia, y venidas de gilgero en silo de alpiste.
267-Será preferible el encierro que la ocasión del pavo en el banquete. Sin llegar a la apostasía la razón adquiere otra apertura; de la hecatombe cosecho espuma en los labios. Porque ella está espléndida, ahora es doble la burla del fracasado regimiento. Es horrible, que por cada momento cúlmine de la naturaleza humana, hagan sonar disparos al aire, haciendo que el cielo quede lleno de nuevos horizontes, y que la sorna sean aleccionadores azotes. Ya a esta altura no puedo, besar y parar de besarla, dar ofrenda donde ahora lloro. Este parentesco que impide un poco el lejano gozo, y que agiganta la sonrisa por el pecado del desentendido minuto. Es un error como cuando recalco aquel error corregido, aclarando oscurecido, allí en el cotín nuevo donde se produce muerte como manantial de ilusiones; de la misma que dio a luz aquella fábrica de duendes que supieron colmar los nudillos de homicidio. Mis caricias son una pincelada extensa, que recta recorre tu erizado banquete, peinaremos escamas desandando el nácar de la piel y los cabellos.
268-Tus ojos son dos gotas de purísimo brillo celestial, propiedad del alma reservada para los patriarcas, tu boca, que reconozco como extranjera, una caverna en extremo agradable, que recibe el afecto recién nacido a por andar, con las piernas estiradas cual brazos de bienvenida. Estoy reservado a ninguna maldad alojada aquí, pues el allí encogido se apresta en la garganta, que ninguna maledicencia germina, felizmente. Puedo hacer con tu cuerpo lo que deseo, porque el desear es pretender con el tenor del poder, pero la realidad nos avisa que existe una generosidad nuestra que lo facilita todo. No eres la persona con la que deseo estar, pero tus calores avivan las penas y el olvido. Este lugar es una isla perfecta con las limitaciones de los que habitan, pero en nuestro colchón solo queda sitio para la comprensión, oh, como podré entender tantos callejones de sensación ásperas con salida a la traición. Estoy sostenido y deslumbrado, por la temeraria figura que izas silenciosa, con la cualidad de los humildes que adornan la pobreza con grandes festines.
269-Cuando despierte de este sueño no he de volver a dormir hasta el próximo lustro. Eres tan igual a la que más amo, que solamente extraño un diezmo, aunque la diferencia en el tiempo es tan importante que la historia queda resumida en un panfleto. Son dos gotas de agua, ella es de rocío y tú de un estanque al pie de un molino. Y así voy pasando del tú al voceo, y del tuteo a vociferar frases de moralidad compleja. El amor se anuda en la atmósfera con el lazo de los involucrados, y nosotros dos somos el ahorcado que busca la otra punta donde poder completar el moño. Ah, no deberíamos darle rienda total al instinto animal, pues el ejercito que nos vigila, hace desprender del huracán tropical fantasías peligrosas que pueden terminar en orgía de pretensiones. Hasta el huerto está absorto de la prontitud de la alquimia, con algodones que estallan como salamandra en llamas. Te conocí mucho después de Emilse, pues sino hubiera dudado muchísimo del absoluto veredicto del choque de diferencia de edad y la exclusiva monogamia.
270-Eres una oblea húmeda que se va reponiendo con la tanta fricción de la historia. Cochina me avisas de la última regla luego de haber desangrado la falda. Hace recordar esta unión a la diferencia de clases, no pudiendo distinguir cual de los dos es del tonel de abajo. Veo al tiempo contraerse relegado a nuestro sigilo. El único juramento fue decir los siete buenos días al despertar; si es que se puede llamar despertar al estar despierto. Besos en los ojos en la primer semana, hondos saludares con la boca los restantes días; y hoy, además, una mañana de blanco montada sobre otra mañana de blanco. Mi esperma flota con el oleaje y su olor contrasta con la fragancia del rio. Ni que hablar de cuentos que aviven los sueños, donde el volcán de pólvora vomita, entre tanta quietud hecha sombra, tanta angustia hecha enfermedad. De que arrepentirnos frente al abismo de un nuevo mundo si al final del tiro nace un nuevo rumbo. Amores que no se reemplazan y se van sumando mientras amasamos fortuna de sensaciones.
271-Rengo de várices, estoy viendo morir la posibilidad de estar con Emilse. Borracho, pero sentado, me estiro a resarcir la sed de fe del tallo auxiliador de un espejismo del edén. Las banales circunstancias van prensando el aire de la esperanza, que se aloja entre las partículas salvadoras; sin llegar al escepticismo del asfalto de cosechar lástima, encuentro sosiego en perseguir la vidala que resuena en el llano. La desnuda existencia de los sin ropa lucha contra la burocracia de ser libre, volviendo acuñar pudor inocente y de amorío ansioso. Es digno el encierro besando un tesoro, aunque sin libertad, la bella felicidad, latente se aloja en el reducto último del corazón. El viento, de espalda, se esparce por el racimo de arroyos con la misma fuerza y amperaje, en cambio el sol es una estaca clavada sobre la indiferencia del movimiento, que esconde el presente en nuevos reductos. Platico con insectos que ríen descarados y evidentes, cayendo por una sola espada del follaje, y corto la miel de tu regazo soltando del vientre una luz espesa, que rompe tu risa en llanto y gozo.
272-Que te necesito carpusa encomiable para en este alocado cauce expresarme. Han capturado a Olga, llevándola desnuda hacia el arrecife. Es tremendo, pero La han sentado de nuevo en la reposera con Onganía atado al respaldo. Y detrás de ella, no entiendo el porque, algo que nunca hubiese querido mirar pero miro, a Lionel y señora manteniendo relaciones, así nomás, detrás de Olga, parados, con el perro oliendo la escena. Y veo, en estas circunstancias de salvajismo, al niño Pablo con un fusil al pie del galpón con la pólvora, es un bebé. Entonces es que aparece entre la bruma Úrsula, la líder hasta ayer interesante, pero ahora cruel. Y sin quitarse siquiera la caramañola, me invita a tener sexo, ya, frenético, y desenfrenado, a cambio de devolver a la prisionera adonde estaba. Le respondo que así estoy bien, por ese lado, que no necesito más que de mi esposa para sentirme completo; que estando juntos no nos falta nada. Costándome horrores poder encontrar argumento seductor que la haga volver a la sensatez primera.
273-Si los ojos que sustentan la mirada fueron un invento para deleitarse con la propia creación, estos invertebrados han estado proveyendo lujuria, que es un lodo que enceguece y traumatiza la existencia. Los soldados vociferan con fusiles haciendo sonar metales, como queriendo entrar a lo que ellos suponen un cabaret de la zona roja. Es preciso acotar que estamos vivos, y haciendo torcer la estadística que indica, que esta gente primero mata más luego despliega el abanico de preguntas vanas que ellos mismos se contestan. Por una plétora de súplicas de cuerpos incados en la cama, supimos conseguir argumentos válidos, para seguir con vida, condicionando la subsistencia a convalidar lo ya sucedido sobre el cotín. Lejos de encontrarme débil o estéril, hay que ver que es el mejor frente defensivo, desde donde poder dilatar el atentado; reiterando el mismo circuito de erotismo, sin pudores, a lo mejor desinflemos el cronograma terrorista. Tirita el verano por el calor intenso que nuestros cuerpos irradian, más el mío es de fiebre, y el de Olga de frijoles y amor; hormigón de ternura.


274-Decir que es cuadrada es agregarle kilos, o peor rectangular, ignorar el traste; lo cierto es, que Olga es tan digna que merece un aparte entre las deidades. Estamos por ventura de vuelta en la casilla, de cara al cotín, con atuendos nuevos; oh único rescatado sito humanamente habitable, exento de tétano o tuberculosis. Olga está a upa de la falda, ampliamente consustanciados, entre pose estricta y concentración; aun estallando en palabras, por cierto dulcísimas estrofas de enamorados, teledirigidos con el sustento de un afecto nítido, donde cada quien, sabe bien a quien le da la ración de amor esparcido por el ser específico. Con todo somos como obreros a tiempo completo, de doble jornada, con horas extras y sin vacaciones. En el injusto osco encierro, cruel privación de la libertad, estamos pudiendo resolver el exilio de las costumbres personales; en un retiro de salvación, que aunque complicado, haciendo abstracciones del secuestro expreso, nos vincula con algún tipo de paraíso de tipo terrenal. La libertad estará en nosotros hasta librarnos del tránsito de estos lares.


275-Estoy subyugado con cara de bobo pues hay una lancha, clara ambulancia, que por décima vez en ocho días, atraca en nuestro muelle, si es que se le puede llamar nuestro a las cuestiones del enemigo; muelle en el cual supe mirar con dulzura el agua pasar hasta perderse en el próximo arroyo. Actualmente casi no salgo, sintiéndome un incomunicado prisionero.Y por ello Olga es ahora mi mundo; mi suegra es mi mundo, y yo soy su hijo en el vientre, ni en pesadillas he podido imaginar semejante condición de feto, pero sirve, y por ella me entero que fuera de este lugar de encierro existe otro gran mundo donde conviven demás seres diferentes en cantidad ilimitada. Ella no me quiere contar, pero esa lancha tiene la misión de trasladar un grupo de mujeres, que luego se reúnen, formando un círculo, donde ellas escuchan sus palabras. Por la vestimenta son de sitios diferentes y de clases sociales dispares, suelen ser quince, pero cada vez alguna parece que falta. Olga predica o algo por el estilo, y al finalizar la reunión aplauden. Descarto una transacción comercial personalizada.


276-Menos Olga, el resto son un zoológico de lauchas, trato de quitarle información sobre quienes son esas mujeres, y no recibo otra cosa que una arenga con lengua de corbata; se la ve contenta y eso me place; pero dice haber escuchado que la trasladarán a otro campamento; no se que contestar; me alivia por Emilse, pero me preocupa la soledad. La noche tenue se hace ver en el día gris asustando con nubarrones. Olga en la punta de la cama provoca una sombra que tiñe el colchón de suave alpaca, con forma de velero angosto pero caminado. Las sombras son un pedazo de noche con la forma de quien las mira; sin alba y sin crepúsculo, a puro rigor del exabrupto, o con la calma de pertenecer a un sauce privilegiado. Tengo en la recámara del inconciente pensamientos oníricos que maldicen; mis ojos brillan sin llegar al llanto ¿Acaso el brillo sea una porción, de un día falto de oscuridad? Retrocedo en mi ceguera del paso repugnante; y soy delgado filamento de acabadas sensaciones. Estoy entumecido y despliego penas desgastantes que jamás alcanzarán ser recordadas.

277- Donde ahora anida la furia del genio, relegado al calabozo del prisionero, ellos hacen fijar crudo reglamento que emerge de voces sublevadas por el fastidio del tedio. Con las amigas de Olga tendré que esclavizarme sexualmente; a quien han llevado muy lejos. No hay nada que poder hacer, no entienden, son hijos de la cosquilla, pero claro, como negarlo, si siendo tan malditos mejor que no entiendan. Y con lo recaudado irán a adquirir armamento para nuevos eventos de terror ¿Como puede ser que el planeta tenga que clamar tan triste por un futuro libre de espanto y riesgo ecológico? Y agrego ¿Por que será que la simpatía heredada me arrastra a la bonomia, y rápido o enseguida la honradez al calvario de la obediencia? Si aquí mismo no corre la fuerza de la ola en retroceso, que interna al ahogado en el océano; las olas acarician la costa y penetran los verdes pidiendo disculpa. Quería besarla, y la contemplo en pesadilla tristemente alejarse con la correntada. Olga tuvo la misma paciencia con que circula la moneda en una economía de libre mercado.

278-En reunión privadísima, o privilegiada, o como se lo quiera llamar, según se considere donde estaría la referencia y que cara de la moneda se elija. De camaradería para todos los que están asociados, o interrogatorio para los que estamos bajo el rígido tormento de la esclavitud y el encierro. En el Galileo II, barco unímodo que no admite símiles impostores; la tal Úrsula, como enloquecida, con fuerte histrionismo, sin degustar lo que afirma, me dice que irán a poner una bomba en un hospital equis, y que yo seré el que accione la manivela mortal. Suena rebuscado, pero agrega una historia no menos confusa, mostrando primero una olla vieja con todo rayado el fondo: Nunca un médico avisará que rascando el hambre uno de a poco va digiriendo acero, y con ello hace estallar el hígado. Que lo saben pero callan para hacer dinero espurio. Y yo le contesto, que nadie mata por tonterías, a lo que responde: Punto número uno, eso quería escuchar. Eres como el mísero frío que no tiene amistades. Cuando las almas no pueden enfrentar la paz que coibe, entonces la guerra es la salvación.

279-Ya han hecho desfilar a quince señoras. Hubo un momento en que debajo de las sábanas, con la cabeza en los pies, hablé en idioma mandarín diciendo ser un soldado vietnamita cavando trincheras, después cuando le alcanzo la cartera a una clienta, sin quererlo, estiré la mano como para recibir propina. Pero lo peor fue cuando me llevé a la boca un ce-de rom, calculando que era una pizeta de muzarela; más allá del cansancio natural, me ocurre que no distingo entre una oruga y un ruiseñor, entre una margarita o una hortencia. Quedaron muy lejos las sutiles diferenciaciones entre los manjares de una dieta privilegia. El cuerpo ahora es un instrumento público, abandonado al salvajismo de las masas sin conciencia de clases; agradecidícimas. Y sin poder asegurar que acuño un capital, mi talento para las relaciones públicas, se haya unificado con las matrices del carácter, que enjuaga la sonrisa con el llanto, de ver como de a poco se hunde la mía predisposición al diálogo en un lodo de suspiros concretos y discursos de santidad, que tapan cualquier frase que agregue al clima totalitario.
280-En general las mujeres se ven muy contentas y satisfechas, y tienen en común, una casi permanente predisposición al rezo; con alzando los brazo, dando las gracias sin temor a parecer ridículas. Pero hubo un momento más que álgido, que hizo torcer mi vieja condición anterior en trecientos y pico de grados, aunque aun sigo como si nada, es de esperar que cuando quede libre, yéndome o estallando en miles de pedazos sobre el aire, vaya a somatizar una trompa de elefante o simplemente hacer catarsis en un crudo hospital manicomio. En cuanto de la cantidad de mujeres estoy pasando la raya de un record; pero ahora se suma la inclusión de un hombre, que sin ser un homosexual evidente, hace uso de mis servicios pagando aranceles especiales. Un asquerocismo, sumado a la bronca de prestar colaboración a la carrera armamentista, que suman pena. Siempre que sale este tipo, Úrsula se hace presente a controlar que lo haya penetrado en su debido sitio. Debería matar al diablo, pero mejor prefiero no desafiar al cielo y mantenerme fiel a los parámetros de la honradez y la paz del mundo.


281-Mientras espero que vayan pasando, quedo cual melancólico, pensativo, masticando remordimiento, contemplando siempre las misma manchas, rayones, veteados, en paredes de madre selva, ventanas y puerta, creyendo que ese mundo es la dimensión donde se expían los remordimientos y las culpas, el odio y la venganza. Cada uno que llega hace temblar la casilla cual terremoto, pero cada quien desarrolla una melodía distintas, las excedidas de peso detienen el paso en medio del trayecto, casi siempre golpeando contra las barandas, haciendo recordar a una samba. La tal Úrsula con Pablo suelen poner traba a la puerta, y cuando todo termina se escuchan los gritos llamando para que abran. Hay una de estas mujeres que me gusta mucho, y hace valer todo la pena; siempre la espero con especial ansiedad, tratando de disimular las nanas, erupciones, moretones, y el rojo claro de las partes irritadas, y me valgo de ella para poner énfasis interesante con la tropilla restante de la concurrencia; aunque son menos frecuentes las veces que vuelve, con lo cual, voy temiendo perderla para siempre.


282-Me siento una locomotora a vapor. Con la lógica rivalidad manifiesta para conectar mi parte de celular irrompible, frente a esas cosas que el ojo del tiempo envidia por lo durabilidad con que fueron concebidas, para soportar inalterables la permanencia con entereza; entre pensamientos de viejo decrépito, el esqueleto latente parece disfrutar del proceso que impera, donde gozar es todo. Úrsula sabe de la existencia de Emilse, e incluso tiene en los planes ubicar donde se encuentra, capturarla, enjaularla y hacerla participar del algún atentado. Sin conocerla la odia, solamente ha visto una foto que me han quitado junto con la documentación, y siente vivo el mismo odio, de quien teniéndolo todo es despojado por alguien que merecería la silla eléctrica sin almohadón para el traste. En un rincón todos nos parecemos, cuando queremos ser el mismo destino encarnado en nosotros cual mi empleo novedoso.
¿Habrá alguien en mi lecho de muerte, allí pacientemente sentado, que sin sentir asco, pueda arrimar a mi boca una copa de agua, para el sorbo que refresque el adiós final?


283-Esta muchacha que tanto me gusta, atracó como de costumbre su embarcación; es linda y tiene dinero, es dulce e inteligente; me besa que siento que soy un ángel que la recibe en las puertas del cielo. Me llama la atención que no es ella quien timonea, sino es su padre, que lo que nunca, la debe ayudar a descender del bote y trasladarse hasta la sala de espera; donde otras mujeres esperan que las atienda. La dejan pasar primero y no obstante casi como arrastrándose llega a los pies de la escalera, agoniza brevemente y muere. Entonces, creí que el mundo se desmoronaba como una pared húmeda, intento salir a socorrerla, pero Úrsula, que observa desde el balcón, pone el caño del arma larga en mi cabeza y me ordena retroceder. Arenga diciendo que no hay tiempo que perder, que pase la que sigue. Igualmente su padre alcanza decirme que gracias, que por mi ella vivió más y murió feliz. No hay lugar para despedidas. La mujer que entra, agrega que la irán a cremar en una embarcación cargada de leños, hasta el punto de hundirse sin dejar huellas en el rio. Lloro mientras me desnudo nuevamente.


284-Ya sin parásitos sentimentales vuelvo a pensar en Emilse, en este caso el paso del tiempo a sido por demás sustancioso, lo que impide que la ansiedad perturbe la lozanía; el cuerpo tibio seduce al énfasis del sol, haciendo gestión de una pausa del calor en mi radio. Cada vez hay más clientas, es mayor el bullicio ruidoso, que raramente me resuena como aquel recuerdo de nuestra fiesta de casamiento. Risas y ladridos despiertan mi apetito por la carne, de la carne vacuna digo; pero me han asignado una dieta a base de fideos con manteca y queso; debo conformarme con las diferentes formas de la pasta. El Parmezano sabe a hiel; los Penne Rigati me causan gracia por el nombre. Los ñoquis me recuerdan a la cruel perdigonada que amenaza tumbar a mi familia, los tallarines y los Spaghetis, a las extrañas lisas cabelleras, que suelo acariciar como virtudes del amor propio; para luego penetrar por selvas que me conducen a cerrar los ojos y soñar con un mundo sin hambre, sin que haya raquíticos por falta de solidaridad, sin bombas gigantes que hagan de estufas o de infierno redundante en el desierto.

285-Lentamente las luces del destacamento van desapareciendo con la madrugada. El piar de las aves es ciertamente agradable al oído ensordecido de problemas. Es cuestión de acabar con una infusión primera, para, forzado por la represión imperante, tener que retomar desde donde hube dejado el día anterior. De a poco van cavando mi tumba los reflejos del miedo, que más que brillar lastiman. El hondo pesar de ver pasar la divina libertad, que se troncha con los siglos que dura cada momento aquí dentro, van sumando discapacidad y entumecimiento. El ácido que el cuerpo reclama se ve desbordado por el succionar de las pasiones, voy desequilibrando la base troncal del destino queriendo saber como sigue el argumento, necio, una intriga feroz me invita a quedarme expectante, recogiendo información del enemigo, que incrédulo se posa en la rama que mis brazos parecen querer aparentar. Será probable que diera un zarpazo, el ser infiltrado que determina mi voz interior, que exige escapar con prisa, sin anhelar recompensa social o reconocimiento de la suprema corte de justicia.

286-No pretendo ensalzar mi orgullo con ilusiones renovadas sin el aval del destino concreto; a quien debemos pedir permiso de lo que sucederá por medio del buen comportamiento. En lo alto del rio Frede, cómplice y expectante, plagado de misterios sencillos y de guerra, viene una antigua novia, acaso la primera, cosechando semillas de un reencuentro que va floreciendo explosivo, producto de un abono fértil que precipita el milagro del arribo al contacto de un pellizco, por saber si estoy despierto viendo lo que veo; ya atracando al bendito muelle, rampa privilegiada que se convierte en escenario vivo; acaso un edén de quebracho rojo, con rendijas donde la luz pasa víctima de la atracción al fondo del rio; donde veo pasar la ópera que va describiendo mi destino, con soldados que representan el drama, seres que son para mi inmortales pero que como palabras se tornan en prefijos. Solamente encamado en este cotín, nuevo pero gastado, florido de palmeras, y lavado de formas geométricas, del color de la tinta de los calamares, me alzo dueño de una podredumbre ejemplar por lo insignificante.

287-Sin duda es mi primera novia la que desciende de la colectiva, que rápido se dirige hacia aquí. No obstante es interceptada por esa gigante de porquería que es la jefa del miserable destacamento, y trenzándose a trompadas, vivas patadas por el cuerpo, tierra en los ojos; tironeo de pelos y cabellos involucrados, por la fuerza del que pretende arrancar de un tirón la dentadura, se trenzan en duro combate de cuerpos completos y erizados, aplicándose mordiscos, escupitajos, arañando la piel y el alma. Hasta que esa mujerzuela poderosa, logra montarse sobre Soraida, de situación complicada, y haciendo movimientos que imitan el coito, Úrsula supone haber triunfado en la contienda. Aunque de pronto, por fin, una fuerza que proviene del núcleo de la tierra, ayuda a mi antigua pareja a lograr girar la silueta e invertir los resultados de la lucha. Pese a todo, contemplando firme la presa cansada y abatida, con ternura de enfermera que se apiada en la reposición de los medicamentos. Entonces, obtenido un permiso verbal de la líder vencida, se dirige a estrecharse en mi, en unidad ejemplar que nunca se altera.

288-Ursula, con el niño Pablo en brazos, cual chimpancé, a paso de desfile decadente, recorren en círculos que rondan la barraca.
A esta altura, entiendo que debería ser más profesional haciendo un resumen sin tanto besuqueo, pero no solo no puedo, sino que la que llega es aquella novia amada, la que denomino primera, por haber dejado yo la adolescencia en el sepulcro de la adultes. Que tanto anhelo con estrechar en mi suave regazo. Y hacer el amor, una vez más de tantas otras, besándola como antaño, pero ahora con mayor vehemencia debido al renovado cariño. Como ardillas de la india tratamos de resumir la historia pasada, de la gangrena de estar separados, por motivo de alta fuerza, como consecuencia de otro afecto indomable, del que nunca logro zafar ni aun en vías de extinción. Pero un cigarrillo sin formación, tapa el diálogo con humo soltando vapores de lágrimas. Apresurados por la estructura del cronograma pronto deberemos cerrar la tertulia e ir de lleno al compromiso específico. Y en brevísimo ayudados por la mundial experiencia acumulada, alcanzamos la cima del bajo instinto.

289-No obstante el apuro, su cuerpo sede al paso del afecto, cual la estela del Galileo; porque el amor tiene tantísimas caras, como fuerza positiva que va germinando, y los tantos diferentes grados de consistencia de la sustancia espesa. Las impresiones digitales que envuelven al cuerpo, pueden llegar a sentirse patéticas en días soleados que se disparan en la estación del frío. Besar a Soraida es estampar el presente sobre el paraíso; viajar por el tiempo sobre nube, desde donde miramos como un abismo las parcelas del viejo recuerdo. No encontramos consuelo en hacer reproche de la linda historia, que paradójicamente logra tapar los baches inexorables del ahora, el agujero que falta está dentro, latente, a la espera del reencuentro, que va uniendo el vacío del valle en montaña, de un único continente, que desplaza los mares arrojándolos al espacio sediento. Justo cuando iba a declararme prisionero, solicitando ya ayuda y rescate, Soraida me confiesa que tiene una enfermedad terminal; y que removiendo cielo y tierra pudo localizarme; como mintiendo agrega, que no resiste la razón de nunca más vernos.

290-Cuando Soraida, risueña y divertida, luego de varias semanas de atención personalizada (embriagado de dulce afecto, me cuesta horrores saber que tiempo pasa en una porción equis de días, de este mach eterno que soporto en silencio) me supo disculpar por ejercer la prostitución, creí sentir que un alud de ruletas del casino me sepultaban en la vergüenza total. Es doblemente cruel no poder solicitar auxilio pues pierdo la libertad y la reputación; pero ante la inminente muerte en danza prefiero callar otorgando tantos otros permiso de amor como sean posibles antes del deceso; e incluso dejar que perezca en mi humilde dominio. A lo mejor si estuviera viviendo en matrimonio con Emilse, hubiera sorteado el pedido de acción piadosa, con excusas que hubiesen sonado a eructaciones ácidas, o sido similares a insultos encubiertos. O quizá sea que el destino depara ventura, a quienes ante tamaño condicionamiento brutal del organismo al yugo del cáncer, saben, con una sonrisa en los labios, soportar de plano la intransigencia por el sufrimiento lacerante. Entonces de un montón de vergüenza extraigo la gloria.

291-Hoy Soraida me confiesa la verdad del misterio. Se ha curado del cáncer de útero por medio de las relaciones íntimas: Y aunque a veces fracaso, por esa fricción alocada y milagrosa, todas éstas mujeres que asisten se curan por lo mismo; pudiendo retener la existencia tronchada en un cantero extenso y florido, por lo menos hasta completar el destino de una manera sensata, con la sabiduría de la piedra que sabe aguardar ser arena o el final de los tiempos. Realidad que nos involucra y envuelve a todos en el absolutismo del milagro, pudiendo pasar de la relatividad del calvario al éxito. La euforia de la dicha es la milhoja que adoramos metabolizar en nuestra última intervención de quimioterapia. Del vientre azul del cielo, rayos de un día claro transmutan al diablo en mariposa, y del reposo de la sabiduría, sin advertencia ni tiempo para conferir una defensa, un millar de músculos empujan nuevamente al mal a su tanque atmosférico. Mis sentimientos llameando hacen soporte de una alegría esparcida en un pabellón de esperanza, ahora el pijama es un oberol de facultativo, en alianza con la medicina alternativa.

292-Y opino de la sunga de tigre con palabras de la extensión de su tamaño, a quien hube colgado como quien cuelga los botines deportivos cuando finaliza la carrera, prefiriendo volver el habla sobre la gratitud recibida, por los poderes sobrenaturales que son la medicina real que nos determina; y vestirme de traje de blanco apresto, bien limpio y planchado. La religión es una diatriba eterna con el reverso del idioma al servicio de la ciencia, madre de todas las ciencias; aunque del reverso de la diminuta prenda mis ángeles pacientes pronuncian interminables chismes y rosarios, que mejor desearía que callen antes que las letras tapen el mundo. Es grande la dicha, que me permito barajar alivio, por la muerte del enfermo de cáncer de próstata, que intenté curar con la misma dedicación de siempre, pues sino habría muchos otros pretendiendo lo mismo, lo que significaría una dispersión prejudicial para el resto. Pensar que a lo mejor existan otros como yo, con los mismo poderes, pero al hacer el amor con gente sana nunca lo vayan a saber. Desearía, pese a todo, que Emilse deba necesitar mis servicios de pija santa.

293-Sigo prisionero, pero puedo salir del encierro y moverme con libertad, vendría a ser un claustro dentro de otro menos oprimente. Podría escapar pero permanezco estoico salvando vidas. Soraida, de yapa, se ha enamorado de un lugareño; lo que hace que igual la podamos ver seguido, ofreciendo testimonio a las que aceptan el tratamiento. Hemos podido comprobar que es mi miembro viril masculino el agente sanador, pues algunas pacientes, que nunca logran conseguir turno en el período de plena erección, igual se han curado como el resto, entonces en estas condiciones se monta un santuario en mi regazo, y se echan a rezar; con lo cual trabajo tantas horas, que aun dormidos, lleno de estampitas, ornamentos pequeños, velas y cruces, continúa la procesión por fuera. Tengo tanta demanda local y del extranjero; que de buena intención, han querido hacer pasar lechuza por liebre, involucrando al novio de Soraida, con tal fracaso que perecen antes del pronóstico médico estimado; con ello habiendo logrado excitar a la líder guerrillera, quien ahora pretende el tratamiento trucho sin estar enferma.

294-Hace tanto que la líder a perdido la virginidad, con el novio de Soraida, que ay de mi si viniera al regazo fértil para curarse de la muerte, pues habría que ir sumando el odio que he contraído al ver en ella el mal personificado. Detrás de las cuestiones de la aldea del milagro de la sanación, no se ha vuelto a hablar de terrorismo expreso, usando gente desprevenida o en la vereda de enfrente, en buena hora; que lindo que halla servido además de salvar vidas, no matar a la hijos que tanto dios ama. Si esta dormida se tarda más en curar y se alarga la fiesta del vientre. La popa al viento, parte de atrás de la lancha colectiva, que tiene una plataforma especial de donde los pasajeros ascienden o descienden, según lo convenido; cruza la embarcación a ambas márgenes, y atraca en los muelles, y desde este rectángulo se puede ver quien llega. Por lo general, el turismo, los viernes por la mañana temprano se internan en el delta en las diferentes propiedades, y por las tardes noches del domingo regresan al Tigre con las lanchas repletas hacia un mismo destino.

295-Tengo una disciplina con costumbre de prácticas estrictas, que me absorben por completo; la política de ésta extrema izquierda romántica montada en ira, presa de una canción poco respetable en la energía del alma, al verse beneficiada económicamente por mi, como los mercados financieros le dan paso al sentido utilitario del que recogen oxígeno para la existencia. El novio de Soraida hace el amor por deporte y el sentimiento propio va como quedando en las tribunas oculto, victoriando el partidazo sin estar emulsionado, o si, pero solo las partes más básicas del amor. Se rumorea que en su casilla se curten orgías, no sé, prefiero ignorarlo y dar la curiosidad vuelta en dirección a la Meca; contemplar mi propio sacrificio en el inherente sufrimiento, y si hay placer aplaudir, y aguantar si hay dolor detrás del esfuerzo. Unas se curan y aparecen otras nuevas, pero al final la guillotina hace de tapial de despedida entre euforias de la alegría y dichas de la paz. Asumo cualquier furia, he nacido para montar las olas y amansar terremotos.

296-Mis amigos me apodaron Matúsalen, pues nunca envejezco; tampoco los he vuelto a ver, he olvidado de sus bocas el aliento a cerveza, el color y la temperatura del tacto al estrechar las manos, suerte que existe la Internet donde nos encontramos sin gozar de tantas dimensiones. El rectángulo de la lancha colectiva se fue haciendo mi paisaje interior de la fantasía, de donde cada noche sueño, y de día vuelvo a revivir, viendo a quienes regresan, vienen por primera vez, o si han mejorado, ascendido con alas celestes al cielo que los absorbe y retiene; que tan bonitas u horribles sean, junto con la edad, los regalos, el grado de mortandad que lleven dibujado en el aura que sale de dentro. El muelle de Talarico, y la isla El Sauce, nuevo reducto de Soraida y la líder, también nadan como pantallazos psicodélicos en el líquido que protege al cerebro. Conozco los ladridos de Onganía y entonces sé hasta cuando pasa algo raro; cuando viene Soraida el lindo perro ladra entrecortado pues recibe galletas redondas de sémola, por ejemplo.

297-Quisiera poder conciliar con las diferentes partes en pugna, antes que englobar personajes y discriminar a mansalva, como se hizo costumbre, al vernos necesitados de acomodar el orgullo por motivo de la injusticia a una situación de saciar la bronca y el odio en el alma; la mía rehúye de cuanto reproche asoma del fondo oscuro del resentimiento al desafío de acopiar un balance digno. Yo soy único y los demás son idénticos entre si, en cuanto hacer valer el destino cual una cotización de la bolsa. Si hubiera una ley donde tener un empleo fuera un agravante en las penas por robar, quedaría exento pues el dinero que genero lo veo pasar como las hojas que el viento embolsa. Si ahora mismo escapara y al llegar al continente debiera tomar un taxi no tendría como pagar la bajada de bandera. De tantos besos y de tanto baño, mi joven cuerpo está gastado del no color de la transparencia, y la textura es como la del rio cuando no sopla el viento. Los mosquitos son como aves en ira, que vuelven como cuervos a querer inyectarte sangre animal.

298-Las plomadas de las cañas de pescar en el aire se ven como gorriones, junto con las boyas, guirnaldas que adornan el cielo del firmamento, y al caer pellizcos a la superficie que se altera como en la lluvia, seguramente cuando tocan el fondo y se hunde con el gris plata, un tesoro debajo del barro sin gracia, más cuando asoma la pesca ella es la bala que ha perforado al pez y los anzuelos los alguaciles que le han colocado las esposas. Yo me sé un pescado pequeño, feliz de ser comido o de servir de carnada para conseguir algo mejor para la cena. Jugando al cara o seca con una moneda pronta a extinguirse por la inflación monetaria, espero relajado que las tostadas salgan del aparato; en minutos ha de llegar el primer contingente, es un día espléndido y fresco, igual trato que los rayos del sol entren por la boca y limpien mis encías donde el cepillo no llega con sus virtudes. Observo una caja de condones casi vacía, y recuerdo las licencias negligentes, que escepcionalmente dejo que transgredan las normas establecidas, tapando la muerte con vida.

299-Intento hacer resaltar mi costado más horripilante aunque la traición de la bondad me ridiculice. Lionel y Cristina hacen gala de la longevidad bien estampada sobre las tales arrugas que hay que detectar con esfuerzo, cual si el matrimonio fuera fuente única de la codiciada juventud, y ellos el ejemplo sexual a perseguir; por qué aquí ese asunto es como una contra cara del amor, se copula pero es lobotomía, hay sanación, distinto a estar bien conservado, pero es evidente que ellos no entienden descartando este fenómeno como un parámetro comparable con nada. Úrsula, al fin, aunque desfile camina ondulante, y se ha ganado un especie de respeto extra del niño Pablo, a quien lo estimula un abismo de deseo, que la niñez traduce en la perseverancia de crecer fornido, hallando en ese cambio un refugio cerrado al tránsito, de la trunca realidad que desearía fuera otra ¿Esa fuerza que han perdido las flacas piernas abarcará la ideología y entonces en vez de pensar con los pies la paz reine en las fibras totalizadoras del núcleo de la esencia?

300-Dependiendo del grado de audición que se posea, la lancha que transporta a los pasajeros se escucha bastante tiempo antes de arribar, cuando ella viene todos cambiamos de comportamiento, el niño Pablo cambia el suyo antes que el de Lionel, pero ambos a su tiempo parecen perros de caza ante la inminente presa, primero es un zumbido ido que crece hasta ser un rugido de león en celo, que se galardona con fuertes ronquidos que la marcha reversa provoca cuando se intenta maniobrar; lo mismo ocurre cuando se retira y continúa el viaje, y allí nadie más presta atención verdadera. El sonido tiene una velocidad menor a la luz pero cuando la lancha viene se instala en la atmosfera cual un huracán, que importa si estaría más o menos próxima al destino, nunca se entrecorta a menos cuando atraca en las quintas, que por un momento sede a la intensidad del hilo, pero que la ilusión y la ansiedad por conocer quienes vienen adjuntan un poder de ser constante. Allí viene la del día de hoy, dando comienzo la danza del oído y del erizo.

301-Los mosquitos son señores feudales, que cuando con el mata moscas los quieres exterminar, enojadísimos se vuelven hacia ti como cuervos a querer inyectarte sangre de los perros. Es probable que esa sangre de otro factor sea lo que hace estragos en el cuerpo. Cuando quedé prisionero, al principio, enojado, veía los mosquitos a los ojos y los maldecía, ahora solo diviso una mancha negra, que de tanto salen alas por los costados; si nada sucediera no existiría el tiempo, solo cuando suceden las cosas el tiempo se pone en marcha, más luego se plancha sobre la quietud y el ocaso. De lejos veo mejor que de cerca, calculo que pronto deberé usar lentes para leer; y pensar que la nota de despedida de Emilse Gallego, de letras diminutas, me sabían a cartel luminoso en la calle corrientes; antes pensaba primero en ella y luego recién la argentina era algo serio a considerar. Estamos escuchando la lancha pronto a venir y la comunidad comienza a paralizarse, ese hilo de sonido será el tiempo separado de nosotros hasta que acabe y retorne la vida.

302-El rugir de la interisleña; los opaco cánticos sin gracia, hilo de la atmósfera abrazadora, estertores esperanzados de la delegación; en mi la imagen entrecortada y triste, por mis parpados desatados por la emoción inquieta. El sol acompaña mezquinando rayos a la mañana, que relega a ser mulato el delta, concentrando luz pálida, que ilumina solo la nave, que de muelle en muelle alumbra la zona revitalizada; que prospera y crece. Hoy es un día salido de los días, pues se va consumando un éxito sin precedentes, que el afamado entorno revalida para el pueblo, a quienes permanecer indiferentes les sale un perú. No obstante la fama continúo haciendo equilibrio, con las variables de la envidia, el escepticismo, falsa incredulidad propia de aquellos que no se asombran más por nada, entonces jodidos arrojan cáscaras de banana en función de una prueba. Más, Úrsula, con Pablo, encintados, tratan de organizar una aduana, donde deban traspasar la barrera hacia un sitio distinto del muelle, irreal pero cierto, como el hambre a quien nadie regala un guiño.

303-A plena mañana, el solazo ilumina el rectángulo de la lancha colectiva, cual luz de linterna. Y el sonido del perkins es como un acompañamiento musical de una danza macabra cómplice con el oleaje; entonces antes que el aire del rectángulo veo una valija que se ladea brutal, y bultos de equipaje. Y acaece que una muchacha, con anteojos oscuros y un pañuelo de colores en la cabeza, ocupa la plataforma exclusiva pese al álgido tránsito. Debo así remitir al caudal poderoso de mi fantasía, una noche provisoria que emite un sol exclusivo, con torpe bandada de estériles golondrinas que son cuervos apurados por zafar de un tornado que los vaya a licuar. Tenemos ya soldados apostados que aguardan al contingente, que hoy ha de ser de cuarenta señoras, que según me comentan piensan que la vigilancia se debe a la importancia de lo que en comunión celebramos; ignorando que detrás del milagro se esconde patente la posibilidad de que salga el diablo a querer ametrallar al mundo. Y pero para conseguir eficiencia debo emanar confianza.

304-Ensayo unos pasitos, de carrera deportiva mezclado con danza de la calle, sobre el raudo piso de la pérgola. Pienso en que hoy, más que nunca, debo controlar a full aquella actitud romántica y servil, donde se gesta el desenlace con mayor prontitud, para así acumular potencia y durar estoico el triple de lo acostumbrado; contraer mis palabras que se ciernen sin dejar pasar estrofas con lívido. Aunque al final presumo que en mi reside un titán, que enfrenta lo que sea y logra lo que quiere, amalgamando almas en remolino que son huérfanas en mi yo. Tengo que incorporar a la visión aterrada del infra conciente que mira la lancha venir, una idea dudosa, pero muy espeluznante al vislumbrar un ser de rostro único para mi, con figura física que me resultaría muy conocida, pero ante la cumbre de lo casual absurdo, prefiero asignar al miedo las ideas que se transforman en imagen apremiante, y vuelvo para enfrentar esa visión pese al miedo, antes que rosa disgregarme en intrascendencia; patalear en piscina con la cola al cielo.

305-Al acortarse la distancia todo crece de tamaño, con la imagen inflada de mujeres ansiosas, que obstruyen la salida, pero hoy la embarcación nunca arriba. Las pasajeras ansiosas deben ceder la plataforma, entrar para aquellos que desciendan tenga más espacio dentro del rectángulo. Y cada vez menos bolso dejan ver más a la muchacha del pañuelo, que me sabe a prima, que vuelve a aparecer acompañada de más cabezas, que solo dejan vislumbrar sus pelos brillantes iluminados por el champú exclusivo. Y la embarcación que sigue, con las tantas pasajeras que vienen imantadas por los milagros de la metafísica, aplaudiendo, supongo que a mi, aunque somos todos, bajo el designio del cielo, los que hacemos posible el milagro cotidiano. Y cuando por fin arriba y el muelle se colma de señoras, muchas de ellas casadas, otras de novia, o solas, da igual, a esta altura de la gesta, atiendo exento de cualquier ego, tratando, ahora si, de agregar una rutina profesional de comportamiento que me haga un potencial robot, que resulte tierno e indulgente.

306-Con poco es suficiente para encaminar al mal hacia el abismo de la sanación absoluta; que aunque la flecha de lo remitido en la sangre pretende incrustarse en el centro del alma, se refleja en la mira un estío dulce de falsedad que finalmente la apestosa puntería hace trizas, y la peste que desaparece entre la maleza; haciéndome rememorar la fuerza del triunfo ángelical, en grata función de la no flagelación de la existencia, que ensombrecida patalea, siendo que la muerte se ve aletargada, más enseguida las esperanzas alegres, optimas y vitales, que revierten la idea de la muerte en el enfermo, y de interponer frustración se ajustan cuentas entendibles con las leyes de la fe. Y los integrantes de la organización con la líder a la cabeza separan del contingente a tres mujeres, la del pañuelo, una joven interesante, y aquella otra vida que no quería que la realidad coincida con el pálpito intuitivo, el reflujo de una visión que hubo divisado a un ser, que atrapa mis emociones haciendo que solloce desconsoladamente, con mezcla de pudor, orgullo, ansiedad.

307-Y aquella de las tres, que no quiero reconocer pues aun dudo; que si la aspereza de las visión no me cercena el coraje, que se esconde, haciendo que la confusión aun se apodere de mi corazón palpitante; dando los ojos prioridad a la mujer del pañuelo que también me sabe a alguien significativo, cual si adrede se quisiera duplicar y desaparecer, en el contraste de fuerzas perpendiculares que desean la superposición; y la niña que no ha de tener más de quince años. Yo me aclaro, otorgando a la moral cansada fuerza de voluntad, que ni a fuerza de látigo seré capas de intervenir en la sanación de una menor; por más que esta cura sea considerada un tratamiento a fuerza de copular fuera de los parámetros del amor, que con la carne se ejecuta fuera del abismo de la pasión y el goce. Y la otra vieja, que en visiones confusas, asocio con aquella santa que tanta alegría inocente le regala a mis días, y que sin mezquinar sonrisa tanto me contagiara de optimismo, que si es, deberá ir al templo del regazo con la niña, cuando no quede nota del gallo.

308-Aquí todas luchan por no ser como náufragos que pelean por el último vote; pero son como gallinas con alas sin plumas en un gallinero con maíz para una sola. La pequeña tiene el semblante de quien ira a perecer soplando la goma de mascar, o en cualesquiera inhalación que se transforme en suspiro, parece una campesina que hubiera perdido el ballenato final; la señora uno, que creería saber quien es, pero por dios que no sea, tiene la cabeza agachada sin el cuello como soporte; la del pañuelo está sostenida por los colores del trapo, y todas están inhibidas de ser, sin embargo hacen fuerza para no desesperar, y tararean sin ritmo. La muchacha del pañuelo también me recuerda a alguien significativo, pero jamás como esa que, presupongo que estoy equivocado, pero que oh sería aquella persona que ilumina mi camino de fe, dando empuje a mi corazón para seguir de pie en el pantano que se traga hasta una hoja seca. Hasta la fecha era un hombre fuerte pero ahora siento una toalla en el pecho que oprime el aire y me hace tierno para el oficio.

309-Ahora en tierra firme, perfectamente separadas del resto de las chicas, en actitud de organizar según la urgencia, puedo reconocer que la mujer del pañuelo es una estrella del cine, del bolero, por cuanto festival del mundo exista galardonada; que empezara como modelo de pasarela, y que estuviera comprometida con un hombre candidato a presidente, que la hubo dejado plantada en el propio altar. Hace tanto que estoy encerrado que he olvidado la tabla del dos, seguro que ha de ser por la enfermedad que me llevo lejos a destruir en el desguace del milagro, el dolor ajeno me azota, me pone melancólico y tonto, agresivo, olvidadizo, perturbado antes de ser cenizas, omnipotente. Y la niña menor, que compromiso; la tercera es mi querida Elisa, señora de señoras, cocinera de los más exquisitos manjares, deliciosos postres. Que sin dudar es mi mamá amada, doble maldición de saberla enferma y deber curarla con el opuesto a lo previsible. Y que ha besado tanto mi mejilla, que hoy se pozan como las perlas en la caparazón del estuche.

310- El niño Pablo siempre juega con las armas, aunque hoy más que un juego parece estar entrenándose para cuando sea adulto; siendo que si tuercen el camino de la violencia armada quizás sea candidato a sobrevivir sin necesidad de continuar con la posta. Y al final que mi madre se tira a mis pies y los besa, la dejo pues a lo mejor eso le haga bien a la salud, no digo que no, pero le he de ayudar con condicionamientos. Hay un estruendo de arma celosa que se dispara sembrando alarma generalizada; y el niño que pide disculpa inocentemente. Entonces furioso solicito que por favor quiten esa pistola del arsenal humano, e incisiva algo despechada, Úrsula, menospreciada en la autoridad, la coloca en mi mesita de luz; no importa, mejor, aquí nadie la usará. Le solicito a mi madre que mantenga la calma y la fe, evitando entrar en diálogo, damos por sentado muchas cosa, que seguramente remedan en cóctel con la fauna de la sonósfera, entendiendo que lo más preferible es que sanen por sobre cualquier otra cuestión imprescindible.

311-Brenda Ángela Perez Cruz, actriz mexicana, es la primera en pasar a ser atendida. Se desnuda; por mi parte siempre visto una bata blanca, que va rotando a diario, aunque últimamente hay que reemplazarla hasta dos veces. ©uando duermo sentado y se arma el templo del regazo colocamos una de color bordó. Atuendo que solamente abro un poco, cuando el momento de la protección, y posterior onda terapia, que muchísimas veces es de frente estando postrado detrás. Pero Brenda quiere besarme, me pide que le bese. Tiene un cuerpo esbelto y perfecto, no obstante siento rechazo cual si fuera inflable. Es una situación en donde me resulta perturbador conversar, aun con la medicación tengo las energías contadas con las dedos. Es complicado lidiar con seres que resuenan en vez de acaparar el oído, con movimientos quitados de la quietud, y si la cabeza va para atrás caen sobre la bacha del peluquero, y con solo decir si con la cabeza, al final del ademán terminan mirando roñas del piso y pensando como irán a salir del atolladero.

312-Entonces logro concentrarme y perdonar, la beso brevemente y recuesto su cuerpo sobre el cotín con sábana; comenzando allí un forcegéo eterno, absurdo, perturbador, incómodo. Las dificultades son factor de comprensión de mi parte, pena triste, que ayuda a ser comprensivo. A modo de explicación que subyace, le ofrezco una crema lubricante; a quien no logra estirar el brazo hasta pasado el vientre, e imposibilitada de flexionar el cuerpo echado, haciendo que la mirada sea un manantial de impotencia. Aun no comprende que es una batalla contra el cáncer, de una guerra contra la muerte; que tiene mucha prisa por acumular almas en el cielo. Manejo a diario situaciones donde el afecto se inmiscuye con el sentimiento propio del placer sexual, pero es imposible encarrilarla hacia un lugar sensato. Evito ser por de más generoso, pues de lo poco que ofrezco quiere mucha cantidad. Al encontrarme en un problema, sin saber que hacer con mi madre, observo ofuscado, algo extraño como salido de la lógica pero con premisas de la cirugía plástica.

313-Brenda al detectarme lúcido, reflexivo, sacando deducciones correctas, se anticipa empezando con una confesión retardada. Entre sollozo inteligentes, logra explicar, que así, es una persona devenida de un gran cambio de identidades; con lo cual en breve explicación, da por entendido que he comprendido perfectamente, solicitando el correcto desvío del tratamiento hacia la cura de la leucemia, luego haciendo un silencio de ultratumba. Le ruego que entienda que mi poder se remite al cáncer de útero solamente; que hemos intentado otras opciones sin ningún tipo de éxito, que por favor regrese al tratamiento anterior, o que busque en este país una alternativa posible. Luego de insultarme de arriba a bajo, intenta abofetearme cayendo rendida sobre la cama. A todo desde a fuera se escucha a Úrsula protestar por la demora. Sin que alcance hacer nada toma el arma de la mesa de luz, obligándome a continuar con lo pactado; accedo, intentando una vez más ubicar el miembro en el lugar requerido. No solo es imposible, además es indignante.

314-Cuando se arrodilla escapa el tiro. Rápido, Úrsula explica a la concurrencia que se trata de una expresión típica de exaltada risa, producto de una gran alegría producida por el asombro ante la viva rapidez con que mejora. No se sabe si dios existe pero se sabe que nos mira, dijo Brenda decepcionada segundos antes del accidente. Ella intentó persuadirme simulando que iría a quitarse la vida, si por tal caso no continuaba pujando lo suficiente para quebrantar la barrera de la cirugía. Le contesté que sin excusas iría a suspender los compromisos con las restantes esperanzadas pacientes en coma y mi madre incluida, amándola hasta hacer lo imposible por sanar sin importar la barrera del tiempo. Todo esto con ella sosteniendo el revólver a diez centímetros de la sien. Y en ese único altanero segundo, cuando la bestia tuerce el rumbo del sentir prehistórico, y otorga justo paso al naciente pensamiento, que luego perdura en las cosas y acontecimientos del propio entendimiento genial. El arma se dispara quedando la bala en el deslumbrado cráneo.
315-Temo que los ruidos de la fiesta, con disparos y música de tan ecuación estridente, aplasten a mi madre con la plataforma de lo indeseado, de todo lo contrario que uno elige para hacer hermosa su estancia aquí , en esta bendita existencia, donde la materia rige el destino en cualquiera de sus formas ¿Será la existencia una cruel enfermedad del alma, en la que la pobre quiere soltarse del cuerpo, que solo cuando muere la deja libre? Y yo que sería para el alma un carcelero que la sujeta a esta instancia material insostenible?
La fama hizo posible una coartada valederamente posible, siempre que no se piense demasiado en argumentar la abrupta ausencia de Brenda Ángela Perez Cruz. Los turnos los decide la muy Úrsula, quien, avisada de mi negativa igual hace pasar a la adolescente. La enfermedad no distingue entre princesa o cartonera, carne de bofe o de exportación; fuera de las hazañas de la penicilina cualquiera puede caer en las garras del cáncer. En definitiva es como en la política, es tonto mezclar y arruinar todo junto.

316-Hay dos sauce que descansan sus copas lánguidas sobre el rio, cual moraleja de la naturaleza, que invita a atracar el yate, y en tanto, entre llantos que remedan en risas meditar sobre las horas de la existencia, que exigen prisa en sellar felicidad y dicha. Y Úrsula que discute con las enfermas que esperan ser atendidas acerca del turno a pasar según la gravedad. Se escucha su voz decir: La que no esté de acuerdo que se vaya, cual si estuvieran sanas y ubicadas a pasos de una boca de subterráneo. La propia jovencita reconoce que hay otras compañeras que merecen entrar primero. La menor es menudita y mide lo que un arbusto sin follaje lo que la hace aun más infantil. El contingente hace voces para que socorra a mi vieja como el tratamiento lo indica, y a la niña también, que la muerte se salga del margen de la hoja y que flote con los olores de estiércol. Finalmente hacen pasar a cinco en agonía, que ubico como pollos en la parrilla, y bis, pongo empujo y saco, y vuelvo a entrar y salir varias veces. Es fabuloso como mejoran en minutos de gloria.

317-Reglón seguido hacen pasar a otras cinco, todas desnudas, con dos de ellas encapuchadas, sin demasiado esfuerzo me doy cuenta que se trataría de la niña y mi madre, como haciendo querer decir, dale a ellas también que está todo bien; y quien sino Úrsula. Siento ternura y desprotección, cual si estuviera inmerso en una pesadilla que ocurre en un pentagrama, siendo evidente que nadie considera la mía ideología. Entonces a su tiempo las tomo por los hombros y las hago redireccionar hacia el exterior, siendo que hacen cambios haciendo entrar otras tantas; como queriendo dejar boyando en el inconciente la clara idea de acostumbramiento hacia el incesto y la pedofilia ¿Serán, el edipo un merito sobre el límite de lo potable, y el abuso una cualidad selecta respetable que un grupo de fustrados hicieron factores de pecado para luego imponer otras restricciones consagradas al clasismo, obteniendo ganancias materiales que se inmortalizan como la patria? Ayer en el rio se reflejaba el cielo y los peces parecían aves, hoy la vida es la muerte que huye.

318-Mis ojos son como unas cámaras que filman en vez de mirar y que registran fuera de las emociones, que solo parecen vivos frente a la tortura en pos del divertimento, y es justo lo que la jefa del destacamento está empezando a imponer como norma establecida dándome impulso a querer reaccionar. Salgo unos segundos a caminar y despejarme, más cuando paso por el pozo donde arrojan los condones, levanto la tapa, cual si fuera una olla donde se cuece un puchero, viendo los bordes de color rojo carmín, cierro los ojos junto con la tapa y pienso que tal vez sea sangre de las gallinas; nada se tira, todo se come, pero la sangre de las gallinas son como las cáscaras de huevo. Cuando regreso vuelve a estar mi madre encapuchada, expectante, callada, débil como el agua que emerge de la transpiración del invierno. Deberían estar las otras chicas que se fueron curando, aunque escucho decir que ya regresaron con una lancha charter. Sobre la ribera de enfrente, atada a los sauces está la embarcación destinada a transportar las frutas, sin frutas.