La textura del día,
hecha de particulas luminosas,
va cediendo sin reristencia
al eco materializado de la noche.
Imperceptibilidad de cambio
que en escencia es continuidad
de la danza astral, en la que la música
tiene melodía de respiraciones.
Texto agregado el 26-06-2017, y leído por 140
visitantes. (1 voto)
Bello y poético texto. 5* pata ti. Saludos. maparo55
27-06-2017
Una poesia contextual bordada de una insipiente metáfora en la continuidad del día y la noche, siempre obediente a un cambio difícil de revertir, como la naturaleza misma , un gusto haberte encontrado y haber tenido el placer de leerte , Un fuerte abrazo y gracias por compartir rolandofa
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