HAN VUELTO LOS VENCEJOS…
Han vuelto los vencejos;
las cosas naturales vuelven siempre;
las hojas a los árboles,
a las cumbres las nieves.
Han vuelto los vencejos;
lo que no es arte vuelve;
vuelta constante es la naturaleza
por cima de las leyes
Han vuelto los vencejos;
¿ves como todo vuelve?
todo lo que ha brotado al sol desnudo,
de la inexhausta fuente;
todo lo que no fue de algún propósito
producto endeble.
Han vuelto los vencejos;
¡augusto ritmo, única ley perenne!
¡el año es una estrofa
del canto permanente!
Todo vuelve, no dudes, todo vuelve;
vuelve la vida;
¡vuelve la muerte!
¡cuanto tiene raíces en la vida
al fin y al cabo vuelve!
¡Han vuelto los vencejos,
y al pecho aquellas mismas ansias vuelven…!
Ahora comprenderás lo que en la vida
quiere decirnos: «¡Siempre!»
Siempre, quiere decir la vuelta, el ritmo,
la canción de la mar en la rompiente;
si la ola se retira
ha de volver, pues es de lo que vuelve.
Vuelve todo lo que es naturaleza,
y tan sólo se pierde
lo que es remedo vano de los hombres,
sus artificios, invenciones, leyes…
Han vuelto los vencejos,
como ellos vuelven…¡siempre!:
con su alegre chillar el aire agitan
y el cielo, con su raudo ir y volverse,
al caer de la tarde
cobrar vida parece.
No se posan ni paran, incansables;
sus pies ¿a qué los quieren?
les basta con las alas,
criaturas celestes.
Con ritmo de saeta, ritmo yámbico,
los versos vivos de su vuelo tejen,
chillando la alegría
de sentirse vivientes…
Han vuelto los vencejos;
los del año pasado, los de siempre,
los mismos de hace siglos,
los del año que viene,
los que vieron volar nuestros abuelos
encima de sus frentes natura fuerte,
verán también volar, negros y leves.
Han vuelto los vencejos;
criaturas del aire que no mueren
—¿quién muertos los ha visto?—
heraldos de la vida, amantes fieles
del largo día de la mies dorada;
¡han vuelto los de siempre…!
¡Vencejos inmortales,
alados hijos de natura fuerte
heraldos de cosechas y vendimias,
mensajeros celestes,
bienvenidos seáis a nuestro cielo,
vosotros… los de siempre!
Abril, 1908.
Miguel de Unamuno
°°° Para compartir, es toda una lección de vida °°°
Merlín!!, no te pongas triste con lo que nos dijo Daiana en el que escribimos ayer juntos. Es mucho mejor que este ja, ja...es nuestro, le pusimos corazón y una pizca de realismo. Además; ¿Quién conoce a Unamuno?. El rey de los uno. Naaa...cuatro gatos. En cambio tú, nacido en la era digital (ya juegas al Candy Crush) eres famoso en to' el mundo. Ya, ya verán cuando termines la universidad, como va a temblar hasta Atilas (el auténtico rey de los Unos) y sus elefantes cruzando los Alpes.
Daiana, mala!!. Guau, guau!!.
¿No serás la Daiana de la serie televisión "V, invasión extraterrestre?.
La comandante de la nave invasora. Una morena maciza, reptiliana que comía ratones. Lo que ha llovido...
[https://es.m.wikipedia.org/wiki/Jane_Badler]
¡Venga!. Ponte el bañador que nos vamos a la piscina (46°C)
Lo que no pensó jamás Unamuno es que en Sevilla hubiese hoy en día, una colonia de vencejos en las Setas de la Plaza Encarnación (edificio y cubierta del antiguo mercado en forma de setas), que 2 siglos después, ya no emigran a África por culpa del Calentamiento Global. Es África la que ha venido a vernos con su desertización...
Luego ya no vuelven, sencillamente porque no se van. |