Aokigahara*


El bosque abrió sus brazos.

Ensimismado entre aromáticas fragancias y exóticos sonidos el niño se internó sin temor. Era la primera vez que desobedecía a sus padres, la primera vez que escapaba en solitario, la primera vez que exploraba aquella grata sensación de calma y libertad.

El crepitar de las hojas lo acompañó, mientras se alejaba del sendero. La cuerda que arrastraba dejó una huella delgada sobre la tierra oscura. Estaba hastiado de las burlas, sentía que sobraba en este mundo. Su alma desgarrada solo imploraba paz.

Poco a poco las sombras se hicieron más largas, más largas... abarcándolo todo.




El Curita


Siempre supo que era diferente al resto de los mortales. De un carácter afable y una mente reflexiva, él no veía atractivo en la superflua charla femenina, ni en la banalidad de su comportamiento, basado en la belleza. Por suerte, para su tradicional familia, tampoco gustaba de los hombres. Lo suyo era la castidad, la pureza, la inocencia. Por ello a nadie sorprendió cuando eligió ingresar al sacerdocio.

Aquella mañana, mientras daba la misa, su pulcra mano rozó levemente la seda del manto. El contacto le produjo estremecimiento, placer, evocación. Era suave, tan suave, como la piel de los niños...


M.D


* http://alfredlopez.tumblr.com/post/139965863315/aokigahara-la-verdadera-y-escalofriante-historia


Mis queridos colegas cuenteros. Incluí los dos relatos en un solo post dado que ambos son los felices ganadores del certamen en su versión XXV para cuentos de cien palabras de la página.

Agradezco a Walas su convocatoria y por impulsarnos a la creación de estos mini relatos. Un abrazo y muchas gracias por leer!!