Pensaba sumergida en recuerdos...
Cada luna creciente, por aquellos fértiles días, ahora que sabía, sentía su presencia "él no me hizo suya yo me hice de él"...
Es construcción femenina traer al imaginario aquel cuerpo que te hizo sentir completa en ti.
Ilusa te das cuenta que es nada menos que la carne, y no el intelecto, quien expele un deseo... Sí, sentirse contenida, sujeta, aquietada y soportada en esencia. Cuerpo y mente fluyendo en energías. La suya se quedó en ella, lo llama, lo percibe cerca. Él también la siente, sincrónicamente, pero ya no volvió más a esa realidad que los unía. Una realidad netamemte material puede diluirse en sus memorias corporales, se juntan en dimensiones paralelas: el recuerdo y el calendario lo confirman.