Poema
ALGÚN DÍA
Algún día me miraré en tus ojos,
sentiré en mis manos deslizar tu piel,
andaré tu pecho de colinas suaves,
probaré la fruta y la exquisita miel.
Algún día en tu oído seré susurro,
también abrazo tibio en la tarde fría,
te llevaré el café caliente por la mañana
y seré tu compañero en el viaje diario.
Algún día seré tu brisa de primavera,
en el estío seré la sombra fresca en el sol,
en otoño de hojas te haré una alfombra
y en invierno seré los leños que den calor.
Algún día podaré las espinas de tu rosal,
temprano regaré el huerto, barreré el jardín,
de noche cerraré puertas y apagaré la luz,
luego, tranquilo, contigo me iré a dormir.
Algún día mi cabello cano tu peinarás,
mi barba hirsuta tus dedos la enredarán,
cerrarás la ventanilla de mi morada
y entre adioses, cantos y letanías
de paseo al cementerio me llevarás.
Algún día…
Algún día de lluvia fría en invierno largo,
cuando el trueno ronco rompa el silencio
y el relámpago rasgue y dibuje la oscuridad,
seré el granizo que en tu ventana te llamará.
Algún día de viento fuerte me pensarás,
te acordarás de un tango, querrás bailar,
cerrarás los ojos, soñando los abrirás
y al calor de un mate mi nombre susurrarás.
Algún día tu voz nuestra canción entonará,
habrá música y baile por calles y avenidas,
se abrirán cortinas y ventanas, entrará la luz,
romperás el silencio y en voz baja me nombrarás.
Algún día lejano en el tiempo te acordarás,
de aquel poeta disfrazado con traje de ave,
que a tu llamado, raudo, llegó volando,
con un poema y un posible sueño de amor,
y que aún escribe, mientras espera en la Cruz del Sur.
Algún día…
Incluido en libro: La Novia del viento
©Derechos Reservados.
|