Te quiero indiscutiblemente
sin decencia y sin pretextos.
Te quiero desnudo
o cubierto de mil pieles
con el temblor de tu quijada o sin lentes
de la misma forma de quiero.
Te quiero sin ningun temor de perderte
porque mi piel siente tu presencia a kilometros de ella
Mi carne hipnotizada por la tuya te llama
y esos ojos verdes responden en silencio
Te quiero entero sin metabolizaste
así completo sin siquiera morderte
y es que te quiero desde hace tanto años
cuando mi piel no sabia erizarse
ni mis musculos contraerse como lo hacen contigo
Ahora mis pezones oscuros te llaman
y tu simplemente contestas
sin defraudarlos... nunca.
Texto agregado el 04-05-2017, y leído por 136
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