Por el amor que te ofrecieron mis ojos te desprendiste de aquella pintura antigua todo para sentir a que sabe la vida. La vida mía que fue también tuya. Tu lienzo no volvió a ser el mismo se sentía vació sin tu grácil figura. Ese vestido azul te tallaba perfecto. Ya nada seria lo mismo en aquel plano de colores sin tu presencia. Los seres de aquel mundo imaginado te buscaron con desespero. eras lo mejor que tenían. La única mujer en la pintura. Para mí siempre fuiste una ilusión un aliento, una esperanza. A mi también me gustaba verte en la pintura tenías tanta vida allá adentro que parecía mentira que estuvieras hecha de vinilos. Cuando al fin logre tenerte conmigo formada de mi misma piel y hueso lo que más me gusto fue abrazarte. Tu cuerpesito de jugo era delicioso. Y si lo apretaba demasiado la Oxitocina fluía abundante. Que mejor narcótico que tu cuerpo recién bañado con jabón de olor.
Texto agregado el 11-04-2017, y leído por 274 visitantes. (2 votos)