A falta de una te escribo
con mis dos manos,
solo hago punto aparte
para tomar aire
solo miro el cielo
y siento el infierno.
Tú eres la llave
que abre mis versos
y mi corazón de par en par.

Te escribo con el corazón
y también con mis nervios
con todo mi cuerpo
y con el otro de mi mismo
que se viste de traje y corbata
y el que se desnuda en el teclado.

Te escribo desde mi sano juicio
y cuando he perdido el juicio,
no sé cuál de los dos escriba mejor
solo sé que te escribo
porque me da la gana de escribirte
y si no me diera la gana
también te escribiría.

Te escribo desde el presente
y desde el día que te cruzaste
en mi camino, echándote de menos
multiplicando la gracia
de habernos conocido
justo, cuando salía del laberinto
sin la ayuda de Ariadna.

Te escribo tal vez
porque es lo único que sé hacer
y porque eres el talón de Aquíles
de todos mis versos
y porque eres mi adicción,
si dejara de escribirte
no me lo perdonarías,
no me lo perdonaría
porque al escribirte y al leerme
nos damos la existencia.

AUTOR: PEDRO MORENO MORA
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