Bere estaba sentada en el mismo sitio, eligió un sofá cómodo y café, del tono que voluntariamente jamás consideraría para amueblar un piso, la mesita para el cenicero seguía la languidez del nouveau, y también su peinado.
Cuando pasé por ahí me causó gracia el asco que me provocó el aroma de pastelillos y galletas recién horneados, horas antes ese era mi antojo, pero después de comer cualquier cosa ya no soporto el aroma de algo más; el calor era intenso y el día de caos, avenidas bloqueadas por una protesta sindical, hora pico para el refrigerio de oficinistas y salida de niños de las escuelas. La acera era bastante amplia pero aún así resultaba complicado avanzar rápidamente, inevitable, salió corriendo tras de mi y ni mi mejor esfuerzo para deslindarme funcionó. Un auto intentaba inaugurar la doble fila y me impidió cruzar en esa esquina. Bere, tan flaca ella, morena, bajita y con ojos pequeños, flequillo desmayado sobre los pómulos de la misma forma en que el Sol le delineaba los huesos de la cadera, jeans en gris muy deslavado, voz exageradamente bella para un físico tan insignificante.
Me sujetó el brazo izquierdo y evité mis reacciones violentas, dijo algo parecido a estar feliz por verme, intentó preguntar por él.
No sabía que contestar,( mi heart is so broken, in pieces, mi heart is so broken, I´m puzzling,here I go, trying to run ahead of that *), y no le iba a cantar, aunque la canción que tenía en mente explicara todo perfectamente.
Retrocedí y comencé a aplicar la versión mas barata de mayéutica, pregunté de dónde había salido, a lo que contestó muy natural que estaba en el café de la misma calle, y siguiendo mi método, me interrogó queriendo saber hacia dónde iba o de que venía; terminó invitándome a tomar el té.
Accedí, si, como guiada por el asco del olor a bizcochitos azucarados, hablé acerca del sofá, coincidimos en la mala opinión acerca del mueble. Las preguntas llovieron, llovieron sus ojos y mis pensamientos. Ay Bere!, tan débil ella, tan aprensiva, tan buena persona.
Tuve que mentir un poco, en realidad no tenía las respuestas, pero,¿como dejarla así?, yo no sabía donde encontrar a nuestro ex novio, ni porque la dejó, ni nada, así que primero advertí:
-Suelo ser emocional, simplemente emocional, así que no me hagas mucho caso si te grito algunas veces, si intento encerrarte o de vez en cuando también olvido tu nombre.-
*(so broken, Björk: no place like home2,1999) |