No hace mucho y con algunos amigos realicé un recorrido por la Península de Yucatán, después de recorrer 70 kilómetros hacia el oeste de la ciudad de Mérida, y de una prolongada caminata por una brecha eterna, observamos a lo lejos entre matorrales las primeras edificaciones mayas, ocultas como si estas se negaran a ser vistas. Se vislumbraba la cúspide del deteriorado arco falso, estructura característica maya, señal de que habíamos llegado a nuestro destino. El lugar es conocido como Oxkintok que en maya significa “la ciudad de los tres soles”.
Pero he aquí lo sorprendente del lugar, se percibía una sensación de tranquilidad y mucha calma, un sosiego infinito, se escuchaba como el viento desplazaba aquellas pasadas ramas, y el agradable sonido melódico de las diversas aves anunciando su presencia. A la entrada dos personas mayores en amena plática. Al vernos llegar el más longevo nos dio la bienvenida. De inmediato se acercó una mujer delgada que muy cortés se ofreció a ser nuestra guía. Tenía todas las características de una persona nativa, y el acento maya, su nombre Lourdes. Así iniciaría con conocimiento de causa el recorrido. No había palabras más precisas para describir cada uno de los lugares que con mucha paciencia ella nos relataba. Así llegamos a una de las pirámides más importantes del lugar, llamada el Laberinto, Lourdes se detuvo y dijo que guardáramos silencio, pues habíamos llegado a un lugar sagrado, en donde antiguamente los gobernantes realizaban ritos de “confirmaciones” para los jóvenes gobernantes, esto es, hacían ingresar a cada uno, cerraban la entrada para que entraran al inframundo y estuvieran en contacto con los dioses. En un interior completamente oscuro, tenían que soportar el hambre, la obscuridad y el frío, al cabo de cierto tiempo, el que resistiera estas adversidades, era considerado como prospecto a gobernar. El vencedor salía al amanecer al mismo tiempo que el sol, reafirmando así su divinidad. Fue todo una nueva y grata experiencia en torno a esta desarrollada cultura maya del continente americano precolombino.
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