Lo que se lee, no se olvida. Leonor Leiva Abarca. 29/12/16.

Hace poco leí que el dibujo de un corazón, es como dos lágrimas al revés. Entonces me pregunté: ¿por qué lloramos las mujeres? Se sabe desde siempre que somos harto lloronas, y al decir de los hombres; “ todo lo arreglan con lágrimas”.
Claro que ellos las aguantan o tragan, porque desde chicos se lo enseñaron, so pena de tildarlos de “mariquitas”. Hasta crearon una canción alentando el mito. Este es uno de sus versos: “DICEN QUE LOS HOMBRES NO DEBEN LLORAR…”
Personalmente lloro cuando escucho canciones que cuentan experiencias sentimentales. Por ejemplo, cuando escuché por primera vez a Gloria Simoneti cantar “Entre paréntesis”, yo parecía María Magdalena. Reconozco que también me pasó con algunas películas, “Madam X”, “La usurpadora”, Kramer v/s Kramer y varias otras más actuales.
Lloro en los funerales; aunque no conozca al difunto. El sólo hecho ver llorar a una amiga que fue su pariente, me conmueve demasiado.
La otra creencia popular, es que trae mala suerte si la madre llora en el matrimonio de algún hijo; éste, no será feliz. Lo hice en el casamiento de mi hija mayor. En febrero cumplió las Bodas de Plata y de mala suerte nada, pues vive en la casa que ganó en un concurso que hizo el Súper Mercado Montecarlo.
Otro lloriqueo me sacudió cuando mi hija que vive en Oregon, llamó para contarme que esperaba trillizos.
Llevada por la curiosidad averigüé en Internet, que la Prolactina (hormona de la maternidad) es de un 70% en las mujeres, por lo que dejamos más a flor de piel las emociones que los hombres.
En los varones, la responsable de sus lágrimas, es la testosterona. Si están en tratamiento por cáncer de próstata, esta les baja. Se muestran emocionalmente sensibles.
En mi familia, la única vez vi llorar a mi esposo, fue cuando falleció su cuñado. Mi hijo es bastante fuerte, tal vez lo haga en privado.
Creo que es adecuado que los hombres también expresen sus emociones a través del llanto.
El sonido de éste, es la primera forma de expresarnos. Manida es la sentencia; “Guagua que no llora no mama”.
Me emocionó ver en el funeral de Lady D, que sus hijos no lo hicieron, porque se los prohibía el protocolo.(31 de agosto de 1997)
Ahora que se acerca la Fiesta de Año Nuevo, ¿cuantos tendremos que dibujar corazones al revés, aunque no queramos? ….