Te invito a mis sueños,
a esa hora en que todos duermen.
Ven de puntillas, con sigilo,
que no te escuchen por allí.
Pon tu mano en la mía
y habítame hasta que llegue el tiempo
de hacer real lo onírico.
Texto agregado el 27-12-2016, y leído por 171
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Lectores Opinan
27-12-2016
Cuantas veces no hice esta promesa de enamorados. 5*
Nazareo_Mellado