Tengo que producir, tengo que pagar recibos, tengo que llevarme bien con mis superiores, ¿dónde tiro este papel?, puedo ir a la papelera... bah, lo tiro por la ventana, tengo que hacer el informe al jefe para que lo tenga a primera hora, tengo que llamar a los proveedores para abaratar costes, ufff a estas horas no podré, estoy agotado, ais ¿cuándo tendré vacaciones? ¿que haré?, agarraré el avión para irme bien lejos, dicen que contamina mucho, chorradas, tengo que dejar de pensar tanto pues debería de dormir, pero tengo que entregar el informe, pero es que si no duermo lo suficiente no rinderé mañana en la oficina, pero es que no tengo sueño, tendré que tomar esas pastillas que me dio el médico, fui ayer en coche a verlo, aunque su consulta está solo a dos cuadras de mi casa, por cierto tengo ya el coche tres años, tendré que comprarme otro ya no me gusta el color. Pero ¿que le digo en el informe a mi jefe? Si no soy complaciente, mandará que los informes se los haga López, ¡No! Eso no puede ocurrir, tendré que retocar este informe, debería de ocultarle los gastos de la empresa en cumplir la ley del medio ambiente, deberemos de tirar los desechos a partir de ahora al río, pues tratarlos o evitarlos significa un 4 ó u 7 por ciento y si se lo comunico a mi jefe me tirará, que miedo tengo, he de trabajar más duro no debo descansar, con tanto trabajo no tengo tiempo ni de divertirme, con lo que me gusta a mi pegar unos tiritos a los pajarracos del monte los domingos, que afortunados son de que yo los mate y me los coma, o los tire, o se los dé a mis perros, por cierto estos perros míos cada vez están más viejos, deberé de colgarlos esta semana y comprar nuevos, y así buscar venados, hay que gusto cuando se me cruza algún que otro venado jeje, como disfruto viéndolo caer a plomo, pero no debo distraerme debo seguir, uy que tarde que es, las 4 de la mañana, todos los días me pasa lo mismo, pero que suerte tengo de seguir con mi...
A las tres semanas del olor entran y lo meten en una bolsa negra. Fin del cuento.