Hoy martes
Martes, de mañana, el despertar de tus ojos
Ojos, arrastrando consigo la noche, dulces ojos
Maquillaje corrido, dibujando estrellas de colores
Tu mirada en la mía, viejos conocidos , dueños de los míos
Martes, y no fue un día cualquiera, te vestiste de martes
Con tu encanto, tu cuerpo vestido de luz, y fue martes, no lo soñé
Ahí estabas, recostada e indolente, sin premisas, tus ojos en los míos
Tú, te vestiste de martes y no de otro día, y tú me miraste
Y no fue un banal día, y no te soñé fue el momento escogido
Y te vestiste de martes, pues cada día no es un simple día
Hoy martes, porque tu mirada en la mía, convergieron
Y te vestiste de martes no de otro día cualquiera, y será martes
Porque fue el momento escogido, para hundirme en tus ojos de miel.
Raúl Amador Irusta |