Como cuando existías
elaboraba mil formas de versos,
arrebataba al crespón su verde profundo
y pintaba en tus ojos algo parecido
al amor.
Como cuando existías en mi cuerpo
profundo,
en las entrañas pegado con mi lava
floreal,
humeaba la rosa,
la prosa silbaba y formaba con letras
tu rostro en mis dedos.
Y entre tanto escribirte con esa tinta negruzca
inmortalicé tu desmayo,
nunca más respiraste;
no sé quién sea el culpable,
si la insistencia nefasta de este amor tan abierto
o el hecho de verte siendo ciega perpetua.
Texto agregado el 27-11-2016, y leído por 293
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Lectores Opinan
06-04-2017
la poesia me obliga a desandar letras mas la tuyas me invitan a caminar lejos, despacio.... a irme quedando en ese ir y venir Noc