Soy hombre de otra cosecha,
soy roca enterrada en arenas,
creciente que desafía al viento,
tempestad que temblorosa
se desgaja en los mediodías,
colores paridos ente gemidos,
un resplandor que se disculpa,
desierta tinta derramada en vano,
un absurdo cobijado en espigas.
Recorro las miradas con el eco
que nace de un comienzo
en la sepia iniciación del agua.
Pierdo la voz más no la expresión
y callo la mente cuando el corazón
descubre cualquier amanecer.
Texto agregado el 19-11-2016, y leído por 126
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Lectores Opinan
20-11-2016
¿Hombre de otra cosecha? Para nada. Alguien se encargó de ponerle preservantes porque su mensaje es más actual que nunca. Frinefebo