Por favor, te lo suplico entre
lágrimas y de rodillas, no permitas
que esta noche de ensueño se acabe
en medio de discusiones. No dejes que
esta pasión se diluya como un fuego
ceniciento.
Por favor, ríndete ante esta lujuria, ríndete
ante mí. Niña, fruto de este deseo, es lo que siempre
hemos soñado, no caigamos en soledad de nuevo.
Se mía esta noche.
Texto agregado el 28-10-2016, y leído por 154
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Lectores Opinan
28-10-2016
Ojalá se rinda y disfruten mucho ambos. MujerDiosa
28-10-2016
Es que parece que no es un sueño de dos. PiaYacuna