Con un ventilador me haré una hélice
para elevarme en la trilogía de un vuelo,
usando la energía de trinos matinales.
Llevaré muchas camadas de yo no fui
por las dudas llegue el frio invierno
y unidos con el pegamento de la miel,
siete arlequines y cuatro polichinelas.
Aterrizaré en una tarde de verano
o en la tercera parte de la noche.
Tal vez encuentre un ramo de alegrías
o una veterana guitarra descordada
y junto a dos desconocidos con turbantes
cantaré una serenata en tu ventana.