LORCA Y MI CANARIO
Daniel O. Jobbel
(Ensayo breve)

¡Sí!, a boca de jarro. Muy suelto de lengua le preguntaría a esa jueza Equis, si podrá investigar cuándo, como y quién fue el gato qué cuando yo tenía cinco años de edad se comió mi canario y me hizo llorar durante mucho tiempo. ¿Será cuándo los sapos bailen flamengo? ¡Quizás pasen muchas lunas!.¿ Pareciera un ensayo sobre la ceguera?. Quizás.
La jueza federal argentina Equis, quien desde hace años investiga violaciones de derechos humanos durante el franquismo, ha aceptado la denuncia por la desaparición del poeta. No se si se trato de convertir en una mariposa masoquista que se tramutó en juez policíaco para seguir dándose méritos mediaticos. O piensa en su propia fábula de existencia equivocada en sus actitudes, con sus labios gruesos, agresivos y dulces como ciruelas,¡ Oh; mire usted que lenta es la justicia! Se diría por allí. Bienvenido sea jueza.
Sí la jueza ha admitido, con los problemas que tiene el argentino medio, resolver el caso o investigue la muerte del mismísimo García Lorca, y condene a sus asesinos después de 80 años, dudo que quede alguien vivo de esa época para aprovechar semejante investigación. Entonces. ¡Digo! Estamos a milesimas de la locura. Y como se diría alunados. Es que hay cosas más significantes por ver. Preguntas del tintero¿Es necesario ?¿No es mejor ético una revisión histórica?
Se saldan deudas, aunque a tan largo plazo que ya suenan vencidas. Pese al esfuerzo de unos cuantos divulgadores entusiastas, y que aunque la Justicia del Estado Español no lo asuma, sigue cubriéndose de vergüenza ante el mundo. Solo Miradas. Se sabe. Quizás sea irónico.
De hecho queda al instituto de antropología, ubicar el sitio donde se encuentra la fosa común donde quedaron los restos.
Agrego esta cita:"Si basta con un sólo verso para que un poeta insigne se salve y un escritor mediocre puede pasar a la inmortalidad por una frase feliz que haga fortuna en plazas y mercados, también será suficiente recordar en el lecho de muerte el perfume de una rosa o el sabor de una anchoa para que toda una vida tenga sentido: esa última sensación habrá sido el eje de acero, que ha armado el alma de la persona desechada ahora por la suerte". Manuel Vincent, dixit ... Frase que le cae anillo al dedo a la jueza Equis.
¿Hermandad con la Madre Patria?.¡Pobre Federico!, que versos debe estar purgando en los cielos de la nada. Sin embargo, y a pesar de todo “el silencio impuesto por el poder del olvido”, hoy, frase del creador de Bodas de sange que resultó premonitoria, sigue y seguirá siendo vigente.
Españolitos. Sin pelos la lengua. Como no recordar que hasta hace poco sus propios pares nos echaban a patadas del aeropuerto de Barajas, sólo por ser inmigrantes 'sudacas'. ¿Justicia será lo del poeta? Gran tema de debate o solo ruido a sonajero ¿Aquí o en Madrid? Y el gran crimen de mi canario sigue impune...
La paradoja de una jueza como Equis es, ser uno mismo, sin dejar de ser dos. Pero, no hay disfraz que pueda por largo tiempo ocultar la impunidad donde la hay, ni fingirlo dónde no la hay.
En la filosofía actual argumenta Vincent, "todo el catálogo de pasiones humanas ya fue convertido en teatro en la Grecia clásica. Ni el talento político de Cicerón, Seneca, encuentran un equivalente en la cultura contemporánea. En cambio cualquier idiota tiene a su disposición un micrófono, una cámara, una pantalla a través de la cual puede emitir esféricamente cualquier idiotez hasta más allá de la Andrómeda, faltos de lógica, sí repletos de delirios tóxicos, y disparates inconcebibles, de ambición desmedida." Poco entiendo de filosofía. Pero Vincent resume lo último en una eficaz razón. Quizás hoy la filosofía se haya ido al carajo en zapatilla de goma como la canción de Charly.
Admito la saludable misión de haber admitido el caso.
Sabemos la justicia llega tarde. Si llega. Se lo debemos a ellos, esos funcionarios más allá de la Andrómeda y nosotros los idiotas que los seguimos avalando. Españoles a cuenta. Como en una vieja novela de José Saramago: "Ensayo sobre la ceguera". Cierran en el 'debe.'
"Un muerto en España está más vivo como muerto que en ningún sitio del mundo".GL.
Ahora hablará la tierra. Mientras, habrá quien recite para adentro aquel verso de Poeta en Nueva York (1930) "Destrozaron tres esqueletos/ para arrancar sus dientes de oro.../ Ya no me encontraron", o quien prefiera, acordándose de sus verdugos.®