El mas rico del Cementerio Firmat Agosto de 2016

El tipo -de empleado paso a ser patrón- circularon varias versiones sobre ese importante paso en su vida, algunas no lo dejaban bien parado.
Ambicioso, trabajador, sin problemas para atender después de hora, con una gran visión para los negocios, pronto amplio sus instalaciones y tuvo que tomar gente, no paraba de ganar dinero, más aun cuando incorporo otros rubros que daban mayores ganancias.
Explotaba al máximo a sus empleados, les pagaba bien, más de lo que correspondía, pero su trato con ellos siempre fue distante.
Se casó, la esposa se incorporó al negocio como cajera, con un sueldo acorde a la responsabilidad, vinieron los hijos, seguía ganando cada vez más dinero, al que supo invertir en propiedades, campos y otros bienes que multiplicaron sus ganancias.
Nunca se tomaba vacaciones, su esposa intentaba convencerlo, sus hijos también, pero no quería descuidar sus negocios.
Sus hijos a medida que crecían se incorporaban a la firma, despidiendo previamente al empleado que reemplazaban, hasta que los tres ocuparon distintos cargos en la Empresa.
Sin darse cuenta se había convertido en millonario, no participaba en política, ni en actividades sociales, no colaboraba con las instituciones de su barrio, católico, no solía concurrir a misa, solo participaba de las procesiones de San Cayetano patrono del Trabajo, dejando siempre una importante suma que permitía mantener la capilla.
Faltaban dos meses para que cumpliera sesenta años, cuando imprevistamente sufrió un ataque cardiovascular que lo fulmino en el acto.
Su panteón es uno de los más nuevos y costoso de la ciudad, una residencia acorde a la importancia del más rico del cementerio

Agustín Secreto
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