No tengo fotos de mi niñez, no teníamos cámaras fotográficas porque me crié en un barrio pobre y popular. Pero allí pasé una infancia plena y feliz. Bañándome en las represas de la cancha aviación con un puñado de amigos y a escondidas de nuestros padres.
Gasté muchos pantalones jugando a la balita, jugué a la pelota en una canchita de tierra con mi única zapatillas que también llevaba a la escuela y jugar ahí cuando llovía nos transformaba en los mejores jugadores del barrio.
No tengo fotos de mi niñez pero juntarnos en la esquina a jugar a las escondidas es una de las mejores imágenes que conservo o tomar sandía a la sombra de un viejo árbol. Cuando caía la tarde tomábamos cocido con tortas fritas y luego nos colgábamos de la ventana de una vieja vecina a ver una vieja tele en blanco y negro.
No tengo fotos de mi infancia porque ni si quiera cumpleaños teníamos pero correr en las calles luego de una buena lluvia es uno de los mejores recuerdos que conservo.
Nuestra mayor destreza tecnológica consistía en hacer un barrilete con una simple bolsita y añadir hilos de una bolsa de cebolla y eso forman parte de mi niñez, humilde pero feliz.
No tengo fotos pero tuve amigos de carne y hueso que fueron absorbidos por la gran capital buscando prosperar. Agradezco a cada uno de ellos que compartieron conmigo la niñez, la infancia y parte de la adolescencia.
Estudiar me sacó un poco de la pobreza y me hizo crecer como persona, por eso a los niños hay que enseñarles que deben estudiar toda su vida hasta el fin.
Yo no llevo un niño adentro, yo le llevo afuera porque aún soy solidario con los que puedo y porque las injusticias me siguen entristeciendo.
Feliz día a todos los niños de mi patria y que hoy se ensucien un poco más...
A mis amigos de la infancia con amor