EL ABUELO SE FUGÓ DE CASA…!!!

Nuca he dedicado tiempo a pensar las cosas antes de hacerlas siempre he hecho lo que en ese momento me sale. Pero ahora lo he pensado y huir es mi desición

Puta…!! Me colmaron, me hartaron, me cabrearon la mujer, los hijos, las nueras, los nietos, los perros, los gatos y, sobre todo, la costumbre maldita de mi mujer de darme órdenes: báñate, siéntate erguido, no tosas, no estornudes, no ronques, no duermas, no comas, las pastillas, no vivas, no mueras y la gana de joder y joder. Igual los hijos, las nueras. Los nietos : sea acolitador, abuelito; cambie de música, mi antiguo; no se moleste que los hombres usen aretes, mi ceñudo; qué le parece mi trenza y mis risos, mi acedo. Las nietas : Ëste es mi otro novio abue; las piernas son para mostrarlas, viejo; qué le parece la mariposa tatuada en la nalga, mi dinosaurio Me siento rehén en mi casa. Hoy en la noche escapo, me escapo de ésta maldita prisión y de los putos carceleros Qué rumbo tomar ? No lo sé, ni me importa.



Son las once de la noche (no me acostumbro a decir las veinte y tres horas) vacilo un momento entre los claveles del jardín próximos a la puerta que da a la calle, a la libertad!! No hay tiempo para dudas, para nostalgias. A huir se ha dicho ¡lo hice! Estoy en la calle y corro como lo que soy, un fugitivo de mi familia .En el bolsillo llevo 200 dólares que logré ahorrar desde que perdimos el sucre para darle paso al dólar. Ser fugitivo requiere dinero, no es cierto?

A las tres de mañana decidí hacer una parada para orinar y resulta que empapé las zapatillas de orinas, debe ser el cansancio, la emoción, la adrenalina Qué dicen ustedes?

Luego de orear un poco las zapatillas volví a calzarlas y regresé a mi objetivo. Por fin llegue a la terminal terrestre, estaba a esa hora desierta, a primera vista. En medio de la sala había cuatro hileras de asientos, respaldo contra respaldo. Al fondo un grupo de 4 ó 5 hombres disfrutaban, al parecer, de una divertida conversación al decir de su risa estrepitosa. A la derecha, varias ventanillas, la mayoría cerradas. Tras la segunda había una mujer flaca , de lentes redondos y uniforme reglamentario. Al verme sentar con la dificultad propia de mi cansancio, se acercó para preguntarme - ¿Y qué destino tiene usted señor?- De inmediato consideré algunas circunstancias. Destino ?m era secundario aunque de preferencia la costa por el clima, las rodillas me duelen en el frio. Lo importante, lo básico, lo urgente era la hora de salida y el precio.

-El bus 213 sale en dos horas con destino a Guayaquil – ¡Perfecto! Cuando mis captores noten la ausencia ya será tarde, a esa hora estaré por las estribaciones de la cordillera occidental rumbo a la Perla del Pacífico.

Me senté en una de las hileras de asientos vacíos y me sumí en algunos pensamientos y recuerdos que ratificaba mi decisión. De pronto se me acercó un hombre, luego supe que era uno de los risueños que pude distinguir a mi llegada – Qué más viejo, padonde – No suelo exasperarme con la gente, hubiera o no motivo para ello, y en esta ocasión tampoco me incomodó la grosería del extraño. Sin embargo, vale mencionar que me inspiró cierta simpatía el impertinente. En razón de mi circunstancia preferí no decirle mi destino – Podemos contar con usted por un momento, mis amigos y yo lo invitamos- me solicitó muy cordialmente.



Todo fue alegría, sonoras carcajadas . Desenfundé complaciente todo mi arsenal de chistes y anécdotas ya que pocas veces me he topado con amigos tan divertidos.- Para el frio de la madrugada y para festejar las nuevas amistades, que mejor que un licorcito- propusieron, con agrado procedí a sacar cautelosamente un billete de 10 dólares y encargar a uno de los presentes hacerse de una buena botella de Canta Claro, así se llama el elixir en mi provincia. El encargado llegó no con una, llegó con dos botellas de Cantuca (denominación cariñosa del Canta Claro) No me molesté, me preocupó que empezaba a esfumarse mis ahorros, nada más. Risas, abrazos y hasta besos sellaban estas nuevas amistades…….hasta que algo comenzó a suceder con mis amigos, empezaron como a desvanecerse,esfumarse, vaporizarse a volverse con el rostro desfigurado, monstruosos. Yo, yo como entumido, vacilante, impedido de caminar. Me dije ¡basta! Mi destino es Guayaquil , busqué el boleto que me había vendido la flaca de lentes redondos, no asomaba. El dinero había desaparecido del bolsillo. Perdí el conocimiento, la razón. Tengo una leve sensación de que apretaba el cuello de uno de mis amigos, se me asoma la imagen sangrante del rostro del otro, del más pequeño. Las luces de los patrulleros de la policía me siguen obnubilando.



Fui llevado a la fiscalía maniatado, se me formularon cargos por intento de asesinato. El abogado que otorga el estado y funge de mi defensor, es necio en el afán de que me declare loco y que le diga al fiscal que son varias veces que me suceden cosas así, pero con benévolas, con agradables consecuencias.

Hoy es mi cumpleaños 85, el guardia me comunica que tengo visita.



Zapotillo, 19 de agosto 2016