Ay los sueños que duermen en las pupilas de las niñas, niñas de azuladas alas de tus ojos que vuelan… vuelan y desvelan ensimismadas en sus sueños, ¿sin dueño? En esa duda me desvelo, ¡tratando de descubrir el velo! Qué oculta la razón de esa lagrima furtiva que resbala del azul turquesa tan precioso de tus ojos.
¡Toma mis manos!, serán el cuenco amoroso para captar ese líquido salitroso o mis labios cual pañuelo oficioso para contener el llanto del celeste azul de tus lindos ojos.
¡Ay estos abrojos que me lastiman el alma! Flagelo que me impone el destino al robarme la calma por no ser merecedor de al menos un destello del zafiro de tus ojos.
Texto agregado el 03-08-2016, y leído por 415
visitantes. (10 votos)
Lectores Opinan
04-08-2016
Es un texto pequeñito con un contenido intenso.
A unos ojos,esos que son las ventanas del alma.
Los ojos pueden hablar sin decir nada*****
Un abrazo.
Victoria 6236013
03-08-2016
Una narración maravillosa creada por la fantasías de unos ojos bellos que enamoran. !Muy buen escrito! Saludos. NINI