La despedida.
Siempre fuiste bella ante mis ojos, los que no podían verte de otra forma, no como amiga, trabajadora, madre, o hija. Intenté odiarte, olvidarte, pensar mil cosas negativas sobre ti para asi decepcionarme, te busque en otros brazos, en otros besos, en otros tiempos... y no pude, seguías siendo tú el centro de mis pensamientos, mi amor, mi mujer.
Los recuerdos me traen tu cara redonda de niña, que disfrutaba mirando desde lejos, en esos tiempos en que la edad " del pavo" a uno lo tenia vergonzoso, recuerdo también tu sonrisa que me hacía tan feliz, el fuego en tus ojos cuando ya no éramos tan niños, las lágrimas cayendo cuando la realidad nos volvía adultos estrepitosamente.
El tiempo se encargó de juntarnos y separarnos, en mis tiempos sin ti me escondía en las sombras a mirarte y te vi tal cual luchando, riendo, bailando, sufriendo, a veces recogiendo los pedazos de tu corazón cuando alguien lo rompia.
Me perdí tantas veces en tu piel, en tu aroma absorbiendo tu esencia, cantando en el escenario de tu cuerpo mis deseos, mis sueños. Te llené de mi asi como me llene de ti completamente, obsesivamente, extrañamente... dolorosamente.
Yo se que ha pasado mucho y a la vez tan poco, pero ven toma mi mano, cierra los ojos y absorbe este momento para que quede siempre en el recuerdo de nuestros momentos, ya no llores, no hay tiempo, solo quedate a mi lado quiero llevarme este momento, nuestro último momento. |