El día jueves llegó. Era la primera vez que experimentaba esa sensación, algo nuevo que no tenía explicación más que por uno mismo y aunque muchos decían lo contrario, terminó por gustar.
Lo primero que le di fue paciencia pues la distancia entre el amor de Ella y el mío era mucha, tanta como para olvidarse, tanta como para dejar todo ahí, pero ¿para qué dejarla? Puesto que de por sí era muy importante para todo y no dejaba rastro alguno de duda. Y ahí estuve, esperando como siempre.
Lo segundo y más curioso que le di fue conocimiento, Yo no era un muchacho muy culto para que me quiera por eso, pero sé muchas cosas más que otros, siempre le decía a veces hablamos tanto que cuando nos vemos pareciera que no tenemos de qué hablar y muchos profesionales siempre discuten que el equilibrio entre dos es importante y Ella lo era. Y ahí estuve estuve, pensando como siempre.
Lo tercero que le di fue tiempo y esto es algo que muy pocos dan y si lo dan no saben por qué lo hacen ni cómo hacerlo, según mi psicólogo: "el problema del amor no es solamente amor, es también lo que haces con ese amor, es decisión, es cómo lo tomas, como lo manejas y cómo lo resuelves" "amar no es decirle a cada rato que lo quieres, amar es pensar que sin decirle ya lo sabe, es saber que sin esperar, ya lo tiene, es sentir que sin hacerlo, ya lo hizo y por ti y por ella". Y ahí estuve, sintiendo como siempre.
Lo cuarto que le di fue amor definitivamente, es que aquí entre nos, cuando sabes que es ella la que buscabas, no tienes más que pensar en hacerla feliz pero siempre con mucha madurez y confianza, siempre con compromiso. No puedes amar o crecer que amas a alguien sólo por el hecho de decírselo, o realmente crees que por un regalo una vez al mes ¿te va a querer más?, no definitivamente. Y ahí estuve, amando como siempre.
Y así pasaron las cosas, bastaron 1 venida, 1 ida, 1 venida definitiva, 1 casi venida y 1 despedida definitiva. Ella y Yo finalmente supimos que los dos no podríamos sobrevivir en el mismo mundo del amor, en la misma tierra del cariño vacío, por lo que días antes de este final le dije tenemos que hablar y aunque nunca le prometí como sería el final, ya sabríamos de qué trataría, y decidido fui a buscarla.
Minutos después, y tomándola de las manos con mucho esfuerzo, pero con casi nada de amor, decidí dejarla por dignidad, por amor propio, por una fuerza que nosotros debemos tener siempre y aunque muchos intenten decirte lo contrario debes hacerlo. Ese día miércoles, Ella no pudo más y me encaró todo lo que supuestamente me dio pero que nunca se atrevió a decir, todo lo que creyó haber hecho pero nunca hizo, Yo en mi rol de persona que busca calmar la cosas le expliqué que muchas veces en la vida las personas siempre buscarán amar a alguien por interés, por esa necesidad de sentirse acompañado pero estar solo a la vez, por probar que estando con alguien son mejores y por hacernos entender que pueden amar porque así lo creen. Gran error. Entonces acercándome le di un beso en la mejilla como señal de paz frente a todo y detenida mirando dijo: "¿Te vas?", si le respondí. Y Ella con muchas dudas y lágrimas en los ojos dijo: "¿Y esto qué es?" y Yo con mucha decisión y firmeza le dije: Lo último que te puedo dar. |