La penumbra abraza mi ciudad y hace sentirme desprotegido, si no te siento cerca de mí. Y la noche me infunde miedo a la soledad, porque tu ausencia se siente más a cada hora. Cada minuto, cada segundo es eterno, si no tienes donde acurrucarte ni con quien compartirlo. Qué tonto he sido, qué tonto; somos los hombres, que sólo me doy cuenta cuando no estas. Que horrible y triste situación se avecina, lo siento así y es horrible llegar a casa para no verte. Aun hoy me pregunto cómo pudo mi pudor sobreponerse al dolor de no tenerte cómo es posible. Perderte por ser tan terco sabiendo lo que podía suceder. Sé que puedes decirme que ya es tarde pero no puedes obligarme a no intentarlo. "Estoy arrepentido", sería el inicio de esta carta de disculpas, que no se interpongan entre nuestros corazones, razones que no son un sentimiento, porque desde aquel momento lo único que me mantiene en pie es creer que existe esperanza para nosotros dos, entonces te pido ábreme una puerta para que nuestra comunicación fluya nuevamente y podamos hablar porque yo te amo ahora más que nunca, los sé, una súplica por amor no es perder, sino lo contrario, es para no perder lo que amo, un respetuoso saludo de quien espera con ansias una respuesta, que le permita seguir el viaje de la vida con todo lo que he deseado y no sabía que ya lo tenia y eso eres TU... |