No deseo un amor a medias,
No me conformaré
con vestidos de castración ni reprimendas,
No te prometeré mi alma
Si no tienes las agallas para salvarla.

No seré la mejor ama de casa
Pero si, la amante más entregada,
No me aferraré a vos
Pues, la vida se nos va y aún brilla el sol.

No me busques los labios,
No me des el calor de tus abrazos,
No me desvistas el cuerpo
Si ni siquiera te has atrevido
A saciarme los deseos
Ni a descifrar las lineas de mis manos,
Si no me has aliviado del peso que cargo
Ni has sabido decodificar las cicatrices
Que al corazón han lacerado.

No te confundas,
Perderás tu tiempo
si deseas hallar en mí la cordura,
Si deseas conformarte
Te irá mal conmigo.

No te ocupes de la luna,
El universo jamás se ha detenido
Y llegar a su centro
es una falacia absurda.

No me des una esperanza
Si vas a patearla,
¡Te pido que no lo hagas!;
No me des un recuerdo
Porque no tendré el valor para contenerlo,
amor mío,
Y cuando éste
Se agite de dulce pasión y recelos,
Se precipitará tal estruendo dentro mío
Que para tanto derrame no habrá consuelo.