A veces pienso en el tiempo.
El tiempo vivido que se duerme entre mis pliegues, los recuerdos que se agarran a mi pelo, el futuro que peina mis pestañas, los años que marcan mi cuerpo como anillos en un tronco...
Mi concepto de tiempo es elástico, maleable... Y dúctil.
Tal vez por eso lo que a veces debe ser una semana se convierte en meses, aquello de años me parece apenas de unas horas... Y el último año fueron exactamente 352 días.
Texto agregado el 11-06-2016, y leído por 99
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