Mucho se dice la monogamia es algo antinatural e implantado por la sociedad. Pero ¿Nadie siente que con las nuevas redes sociales se está implantando la infidelidad?

La infidelidad es algo que siempre existió. Tanto por amor como casi por instinto. Sin embargo, previo al mundo de la internet no estaba tan expuesta como ahora.
Las redes sociales permitieron que se publique cada cosa de tu vida y a la vez darte la facilidad de que no se sepa nada.
¿Cuántas parejas conocemos que se separaron por encontrar algo en las redes sociales? ¿Qué pasa con eso que no vemos?.
No, esto no es un llamado ahora para empiecen a revisar los celulares de sus parejas. Tampoco su historial de internet, ni empezar a cuestionar porque se enoja si le revisas absolutamente todo.
La privacidad es un derecho de cada uno. Y si, no todo tiene que ser compartido. Cada uno tiene derecho a que en una parte de su vida, su pareja no este presente. Creo que es hasta sano que exista esa parte.
Con la aparición de las primeras redes donde conocidos y desconocidos se mezclan, también aparecieron las formas de ocultar cosas.
Facebook, por ejemplo, pasó de mostrar todo a ocultar hasta las personas a las que tenes de amigos o simplemente elegir con quien queres compartir tal o cual contenido.
Luego aparecieron otras, Tinder, Happn y alguna que otra exclusivamente para infieles. Esto le dio a muchos herramientas donde encontrar con facilidad aquello que tal vez se les hacia muy dificil: alguien que aceptara con facilidad las reglas del juego o que tal vez estuviera en las mismas condiciones.
Pero la cosa no quedó ahí, apareció snapchat, una red social que no solo autodestruye los chats enviados y recibidos si no que también te avisa si alguien saca una captura de ello. Además, también apareció telegram, que queriendo destronar a whatsapp, también implementó lo de los mensajes autodestructivos y le suma la opción de agregar a alguien por nombre de usuario sin la necesidad de tener el número de teléfono ( gloria al dios del infiel que ya no tiene que explicar porque "Roberto tiene una foto en bikini en su perfil de whatsapp).
Después de ver cómo la tecnología fue facilitando el poder estar con alguien más además de nuestras parejas, después de ver como todo ayuda a ocultar ciertas partes de nuestras vidas, me di cuenta que hay un punto en común entre la fidelidad y la infidelidad. Y es que la fidelidad es algo impuesto por generaciones anteriores a las nuestras y la infidelidad es algo que nuestra generación está imponiendo inconscientemente como una excusa de libertad.
Ahora, yo me pregunto si todo está impuesto en cierta forma ¿En que momento somos realmente libres?.