Que manera tan extraña la tuya
de meterte en mi alma y quedarte,
para que te piense, para que te extrañe.
¡Y crezcas dentro mio como enramada de flor!
Que manera extraña la tuya de llamar mi atención,
queriendo anidarte en mi corazón;
queriendo estallar a versos de mis labios;
creando mariposas en mi ser, en mis sentidos.
Que extraña manera de hacerte querer,
así quedándote en suspiros.