Escribo porque tengo la necesidad constante de deshacerme de los pensamientos que muchas veces me atormentan, o que me encantan. Cosas que muchas veces es necesario decir y no encuentro el tono, mas si las palabras.
A veces escribo cosas muy personales y otras veces cuento historias de terceras personas como si fueran mis propias historias. Me ayuda a ponermeen el lugar de los demás por un momento, por efímero que sea.
Escribo para desahogarme ante un problema grave, que luego de unos días me resulta una situación bastante ridícula, cuando vuelvo a leerla.
Escribo para mejorar mi escritura, me gusta eso de que me corrijan cuando tengo una falta, por mínima que sea.
Escribo, aunque nadie lo lea, sobre mis amores pasados y mi forma de ver el mundo. Quizás algún día llegue alguien y lo lea, y aún enterándose de mi descabellada forma de amar, términe por enamorarse de mí.
Escribo para liberar mi parte loca, para espantar a las mentes demasiado básicas, para llamar un poco la atención. Porque frente a una página en blanco no hay límites más que los márgenes, que no son estigmas sociales, ni normas de buena conducta, porque el quiere lo lee y el que no, lo ignora.
Escribo porque cada vez que me leo, me convenzo cada vez más que me gusta ser yo misma. |