¡Rodando viene una gran calabaza,rodando viene por la gran pendiente,de la gran colina!
"¿Quien la corto, quien la empujo cuesta abajo?"
cuchichean los arboles y las piedras.
"¡Una cabra, una cabra que quiere hacer dulce!"gritan los animales y las piedras.
"¡El Domingo es el día del animal y estamos todos invitados!"...
Pero en pleno rodaje aparece un pequeño fantasma y quiere asustar a todos;aun que nadie le teme. Llorando se ubica al pie de la colina, extiende su blanca vestimenta, que es una sabana,y ataja a la enorme calabaza.
"¡ Hm, pieza, esta me viene como anillo al dedo!" y el fantasma esta pronto a llevársela. Pero de repente aparece la cabra para disputarsela.
"¡Mé meé, dámela, es mía, yo la corte, la necesito para hacer dulce,¿ pero para que la precisas vos?"
El fantasmita sorprendido de que la calabaza ya tenía dueño,contesta:
"¡Por favor,por favor deja que me la lleve, la necesito para salvar mi honor de fantasma, no ves que ya nadie me teme ni asusto a nadie!"
Oyendo eso, ambos se ponen a cuchichear y luego parten...
El Domingo todos disfrutan del dulce postre de calabaza,cuando de pronto aparece un fantasma muy extraño, ante el cual todos huyen despavoridos.Viste una blanca sabana,y sobre sus hombros una cabeza de calabaza, con enormes huecos para los ojos, una larga nariz de zanahoria, y dos filas de blancos dientes pintados con cal. Completan este atuendo dos ramas de álamo que a modo de brazos sostienen una herrumbrada cadena, de la cual esta atada la cabra, disfrazada de diablo...
Luego al aclararse todo y perder el miedo todos irrumpen en risa, y el festejo sigue hasta el amanecer y por varios días y sus noches.
"¡Viva el día de los animales, nuestros amigos!"