Misterios de hembra encierra la tarde,
con un suave alterar de los sentidos,
expresándose en inocentes enigmas
que traen en su soplo vientos cardinales.
Con un profundo sonido agitado
se dejan oír los árboles en movimiento.
Incrédulas, las horas ablandan el tiempo
con una dignidad acompasada
de distancias, urgencias y lentos meneos.
Misterios de hembra encierra la tarde
desapareciendo al final del ocaso.
Texto agregado el 15-04-2016, y leído por 175
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