Me he secado por completo
De lágrimas y de cuentos
De ráfagas mentales
Que irrumpen en el insomnio
Aunque mi sangre corra fuerte
Y conserve un fuerte tono carmesí
Estoy y no estoy por momentos
Me asemejo a un cadáver en el desierto

Y los amigos desaparecen
Están en el exterior del muro
Impermeable de mi prisión
Y esta pobre y carcomida ilusión
De ilusionarme con los deseos
Que solo saben hacerse esperar

La fuerte marea que agota su mar
La flor marchita por el mismo viejo sol
Así estoy yo, estropeando todo buen sabor
Relajado por los brebajes y las pócimas del amor

Y parece el espanto despertar
Pero tan solo despierto yo
Como vos hermano mío
Que agotado te ves
Y gastado te sientes
Uno más del montón
Pero sabemos ser diferencia
Somos puramente diferentes

Y este perfume agrio
Que emana tu piel y tu aliento
Esta rancia empatía
Estos afónicos cantos
Estos años feriados
Son un largo camino
Que por los siglos de los siglos
No van a cambiar
Luchando conmigo mismo
Tal cual, como vos
Te sobra suspiro
Y te falta aun el aliento
Para contarme tú historia
Para hablar de tu odio
El preciado odio
Que ojos velados
No podrán jamás comprender

Y esta noche como todas
Te abandonas placenteramente
Aunque te ames fielmente
El desengañado amor de uno mismo
No alcanza y no es suficiente
Para despertar a golpes a dios

Exuberante y esplendidas
Han de ser tus fuerzas
Porque sobran motivos
Y sobran canciones
Pero te emborrachas de noche
Y te duermes extenuado
Así, como yo

Y juro ante las estrellas
Que jamás me he rendido
Y jamás he de hacerlo
Pero problema alguno no tengo
Para admitir la derrota
La rutinaria derrota
De este hueco en el alma
De estos gritos que ampollan
De la suave y traicionera violencia
Que nos rompe el corazón.