A veces me atrapa la fantasía de tu abrazo lleno de gracia,
y la vibración de tu risa incontrolable obsequia ritmo a mi cansino corazón.
De reojo acaricio y admiro los lunares en tu espalda.
Imagino tener el tiempo para contarlos todos y jugar al astrónomo,
para darle al fin nombre a las galaxias.
Levanto el semblante jugando al distraído,
esperando tu aliento sobre el mío en respuesta.
Mirar de repente mi reflejo en tus ojos,
para lavar juntos viejas ausencias.
Acepto la realidad de la insuficiencia de conocimiento.
De un marcado límite acechando inherente
bajo las huestes de la creación y las letras.
Pero hay algo más que no te cuentan
Las historias hablan de un error que se transformo en tradición;
que le puso podio a la especie dominante:
El amor por pura recreación.
Hay un libido en el saludo
que sólo sabe derramarse.
Al alcance de un quizás eterno,
me trajo en favor ahora
apurado a terminar con este enredo.
Serán siempre dos
para hacer un beso.
En mis labios dejo todo,
cada uno de mis deseos.
Texto agregado el 20-03-2016, y leído por 75
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