Angustia
Autor: Profr. Uriel López Guillén
Para mi ahijada Andrea
La ilusión hasta ellos llegó,
Nuevamente serían papás,
Y la vida les regaló,
A una hermosa niña.
Bendito sea Dios,
Una paz y alegría,
Comunión entre los dos
De noche y de día.
Muñecas y regalos,
Cuentos y varias sorpresas,
Un mundo de halagos,
Nada de penas.
Música en el hogar,
Sonrisas y motivación.
Todo era felicidad,
Alegría en el corazón.
Sin embargo el destino
Ya tenía una mala pasada,
Y cambió aquel bello camino,
Y llegó una hora marcada.
La pequeña enfermó
Y aún no puede sanar,
Dicen que lo que le pasó,
Es algo difícil de controlar.
Sus piecitos no le responden
Y casi siempre tiene fiebre,
Y sus tristezas esconden
Sus padres que tanto la quieren.
Miles de esfuerzos han hecho
Para curar esta enfermedad,
Y aún ni con todo eso,
La cosa ha podido cambiar.
A pesar de todo ello,
Bendicen y alaban a Dios,
Confían que pasará aquello,
Rezan con quedita voz.
Y ese aliento tan bueno
Se los da su ternurita,
Que conserva el rostro sereno
Y le reza a la virgencita.
Sentada en su sillita de ruedas
Platica y juega con su madrina,
Y rogamos a Dios que conceda
Que la veamos un día camina y camina.
La fe y la esperanza
Está puesta en el creador
Y en fecha, no muy lejana,
Le dará alivio a su dolor.
Por eso postrados de rodillas,
Pedimos por esta pequeña,
Y secando nuestras lágrimas,
Rogamos a la Virgen morena.
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