¡Bienvenidos sean viajeros del universo!
Su corazón es el mio, mi corazón el mundo entero. ¿O acaso todavia no se percataron que las distancias aún existen por algo? Por nada, para jugar un rato a que somos distintos, a que estamos separados, para hacer de cuenta que no estamos hechos de luz, energia, calor, amor. Para buscarnos y tener la posibilidad de volver una y otra vez; sentir la piel, los huesos, y fundirnos en un meta-abrazo.

¿Meta qué?

En un abrazo, en una caricia, en una mirada y millones de risas.

¡Bienvenidas emociones!
La posibilidad de hacernos canción, porque vibrar ya vibramos, juntos, hace mucho.

Bienvenida la presencia que acontece la ausencia, perfecta, inocua; gigante desnuda de emociones, y el anhelo en forma de suspiros.

Más cerca imposible. Más lejos ¿Para qué?

Bienvenidos los momentos, celebremos los encuentros, finitos por excelencia y eternos por deseo.

¡Salú! y ¡Gracias! Un aullido al cielo, que es tu corazón, y es el mío.