Homenaje a mí querida madre Y para todas las mujeres de ayer.

…Fríos recuerdos...

Miro por la ventana mi patio, hace frío, este triste frío de Agosto.
Pero en mí alma esta el frío de los recuerdos, aquellos tan léganos,
Que se quedaron en aquel patio; donde de niña jugaba con mis hermanos.
Mamá lavaba en el piletón los trapos (la ropa nuestra), mientras nos cuidaba, en el bracero el puchero hervía, esos olores del ayer (la ricas comidas, de mamá) que aun la recuerdo con tanta nostalgia y amor, estaban mis hermanos, mis padres, junto aquella niña añorada del ayer.
Y que felices éramos en la pobreza, rica de amor en que fuimos criados.

Hoy tenemos casi todas las comodidades ¡y nos quejamos!

¿Por qué?
¿De qué?

Ya no lavamos, sobre una tabla...
Ya no prendemos fuego con leña o carbón...
Ya no refregamos, las ollas con tizne...
Hoy las mujeres, somos independientes.

¡Y nos quejamos!

¿Por qué?
¿De qué?

¡No lo sé!

Renegamos de la vida, que nos toco
Por qué no tenemos más valores materiales;
Por qué... se nos rompió el auto, la compu, el televisor...
Y tantas otras cosas materiales, que valoramos más que lo espiritual.

Amemos la vida, y a los que nos aman...

¡Amémonos con fuerza y nos amaran los demás!

Que en nuestros corazones brille la alegría de estar vivos, hoy,
Que la luz divina alumbre nuestras oscuridades
Que brille el sol, aun de noche en nuestras almas
Que Dios bendiga nuestro hogar!!
Que dé, de comer al hambriento, que camina delirando por la vida.

Lo material nos asfixia, nos hace mezquinos,
Seamos felices con las pequeñas cosas de la vida...
Allí donde esta Dios cada día, y que sean ¡benditos nuestros días!

Para siempre en mí estas Mamá,
Mujer coraje, mujer valiente de ayer.

Nilda FicherA

Reeditada