Don de gentes
Muchas veces me he preguntado cuáles son las variables que influyen en que una persona posea un comportamiento socialmente aceptable. Algunos dirán que tiene que ver con la educación formal, aquella que las personas reciben en el colegio/escuela y luego en educación superior; otros, que radica en el aprendizaje social, es decir aquello que cada persona va a asimilando como una forma de actuar debido a sus referentes, personas susceptibles de ser imitadas y que se va moldeando dependiendo del contexto en cual se encuentre un individuo. Imagino que si estuviese conversando con H. Gardner (creador de la teoría de las inteligencias múltiples) me diría que depende del desarrollo de los distintos tipos de inteligencia, definidas por él como “la capacidad de resolver problemas” en el ámbito, por ejemplo, interpersonal, es decir, de la forma de relacionarse con otros. Por su parte, D. Goleman, probablemente, daría una explicación basada en la inteligencia emocional y toda la teoría que ella encierra. Entre muchas otras respuestas que más de alguien podría darme.
Me pregunto, qué es lo que hace que una persona que entra a su lugar de trabajo, salude amablemente, al portero, a la secretaria, al gerente y al encargado del aseo. ¿Qué es lo que promueve que algunas personas digan “por favor” y “gracias”? ¿por qué algunos cuidan los bienes públicos y otros los destruyen? ¿por qué algunos dañan a los animales y otros los cuidan? ¿qué hace que una persona discuta y se enoje perdiendo la perspectiva del tema en cuestión y otros comprendan que la mejor manera de discutir es conservando la calma? ¿qué provoca que un individuo posea como atributo el “don de gentes”?
Desde mi punto de vista, el “don de gentes” es un bien susceptible de ser desarrollado en el seno del hogar, a través de una crianza amorosa basada en el respeto de las diferencias individuales, con normas claras, que deben ser respetadas, de ésa manera cada niño sabe a qué atenerse, en el contexto en que se les explique claramente que cada uno de sus actos tienen consecuencias. A su vez, el colegio/escuela, debe ser un espacio protegido, en el que cada miembro de la comunidad escolar se ocupe de educar a los niños desde la perspectiva de las motivaciones personales de aprendizaje y potenciar al máximo cada una de las capacidades de los estudiantes.
Siento/pienso que es posible… |