Mis manos entrelazadas a las tuyas
Tu mirada se aúna a mi mirada,
Se marcan nuestros pasos en la arena…
Se me eriza la piel
Con el zarpazo de una ola despareja.
El sol se hunde, y pinta de acuarela
La tarde que despacio agoniza
En la ilusión de una quimera.
Se derrama la tibieza de tu estilo
Y mi sombra se pierde tras tu vera
Y se achica y se disipa mi silueta
Ante esa onda abrumadora que me lleva
Al hueco donde viven las sirenas.
Y hay flores de cristal
Y un orfeón de caracolas
Que ni Ulises, resistiera.
Y se ondea mi sombra
Abrazada en la penumbra
A un viejo barco
Que duerme, columpiando sé
Buscado tu borde y ceñirme a ella
Texto agregado el 27-02-2016, y leído por 341
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Lectores Opinan
18-08-2019
Muy bonito y musical tu poema. Me gustaron mucho las metáforas. Un abrazo. gui